Un lugar donde sentirse humano/ Soukoku

Chuuya (18 años)

☢️El escenario de este capítulo es completamente inventado ☢️

Se sentía diferente...

Era extraño para mi esa situación. No todos los días duermes a dos metros de un compañero que deberías "odiar"

Es extraño.

Pero lo más extraño. Es que esa noche, dormí profundamente y sin ningún mal sueño rondando por mi mente.

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Día 1 de la misión

El despertador que había programado antes de acostarme suena a las 7:30 de la mañana de un miércoles.

Suena con un pitido agudo y constante que me hace abrir los ojos con una sensación de enfado que me recorre todo el cuerpo, tengo que decir que no soy la persona más feliz del mundo por las mañanas.

Pero todo ese sentimiento de enfado cambia por uno de vergüenza que hace que mis mejillas se tornen rojas, mi respiración se detenga y un calor general se apodere de mi cuerpo.
Pues, mientras dormíamos, mi compañero y yo, antes dándonos la espalda, nos habíamos girado quedando cara a cara y a un escaso metro de distancia.

Mierda, si me muevo bruscamente se va a despertar y lo último que necesito a estas horas de la mañana son sus burlas e insultos. Así pues sin perder de vista al castaño, que parece dormir profundamente, algo muy raro en el, me incorporo lentamente y sin hacer el menor ruido.

Cuando ya estoy sentado en el saco de dormir, veo como se mueve el bulto que está a mi izquierda significado que mi compañero se acaba de despertar y de que igual no dormía tan profundamente.

Se incorpora lentamente y con cara de sueño hasta quedar en la misma posición que yo. Parece que el cansancio no ha abandonado su cuerpo todavía, pues parece que no se ha dado cuenta de que llevo unos segundos mirando su enmarañado pelo.

Con un movimiento lento, este gira su cabeza hasta que nuestros ojos se cruzan. La vergüenza vuelve a apoderarse de mi y me levanto rápidamente.

- Bu-Buenos días -Mierda. Soy patético.

-Eh? A, Buenos días

El moreno tiene una voz ronca de recién levantado que hace que una sonrisa se forme en mi cara involuntariamente.

Sin perder un segundo recojo la ropa que había tirado en el suelo la noche anterior y me la pongo sin prestar mucha atención. No quiero quedarme ni un minuto más de lo necesario con mi compañero, que, todavía sigue sin camiseta.

Formulando un te veo afuera salgo rápidamente de la tienda y me acerco a paso rápido a una mesa ubicada en el centro del campamento que hacía las veces de comedor. Cuando llego me preparo un café con una cafetera que había encima de la mesa y me siento, intentando olvidar el encuentro con mi compañero en la tienda segundos atrás .

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Nos encontramos en la salida de la fábrica formando un círculo con los 100 hombres a espaldas de mi compañero y mía. En el centro se encuentra Ane-San que se dispone a explicar el plan a los agentes.

Al terminar, se dirige a estos una vez más para dar unas palabras de ánimo.

- Esta misión -Dice levantando la voz- Es la más importante desde hace varios años. Tenemos órdenes del propio jefe de la Port Mafia, Mori-Sama, de exterminar a esta nueva organización enemiga, así como a todos sus miembros.
Mantener vuestras posiciones pase lo que pase y no os confiéis. Si pasa eso, caerán más de los necesarios.
¡Adelante!