Primavera: Una realidad perversa y oscura [Libro #1]

Capítulo catorce

Primavera

Me levante al sentir que el cuerpo de Thiago se despegaba de mi lado y abrí mis ojos con pocas fuerzas. Debían de ser las seis mas o menos, estaba un poco claro y todo se escuchaba muy pacifico. Él no noto que me había levantado dado a que estaba de espaldas, llevaba sus habituales camisas, pero esa era la misma de ayer.

Se retiro aquella prenda y vi su espalda la cual me hizo abrir mis ojos con más ánimos, su tez blanca y aquellos músculos se veían perfectos en la mañana. Note que tenia un tatuaje que era un pequeño lobo que olía algunas flores, estas flores eran tulipanes, el tatuaje era hermoso a decir verdad, no era el típico tatuaje, este se me hacia distinto.

Mi vista bajo hasta sus caderas las cuales se me hicieron presentes al notar que había bajado sus pantalones.

¡Tiene mas nalgas que yo!

Thiago tenia un lindo trasero

Mis ojos observaron como tomaba sus bóxers y hacia un movimiento para bajarlos y quedarse sin nada, mi boca se abrió de inmediato, sin embargo nunca llego nada, en ese momento se giro.

— Es curioso el como sentí como tu mirada me recorrió hasta por el recto.— Me miro un tanto divertido y mire sus ojos, a estas horas no se veían azules con gris, solo se veían grises.— Efecto mañanero, suelen ponerse grises cuando me despierto, luego de que tome una ducha se verán azules y luego de que me haya vestido volverán a su color normal.

— Me pasa lo mismo.— Sonreí.— Solo que el azul se pone un poco mas celeste y el verde se pone más intenso. Luego de bañarme y dependiendo del clima se ponen celeste y esmeralda y son hermosos, cuando es verano el azul suele verse mas eléctrico y el verde tiene tonalidades un poco mieles, pero son pequeñas veces, tienes que ser muy observador para saber eso.

— Lo se, he visto esos ojos miles de veces y sus cambios.— Recordé lo de ya conocerme y asentí con vergüenza.— Levántate, vamos al lago, necesitaras despejar la mente un rato y te hará bien.

— Okey, aunque debo hablar con mis amigos para quedar en vernos en el funeral de Ammar. — Me senté en mi cama y mi vista sin poder evitar se dirigió al cuello de Thiago luego bajo hasta su pecho que aunque no era de esos hombres super fornidos, estaba bien, sus brazos eran musculosos, su pecho no tenia vellos, era pálido en totalidad, tenia unos bicepts no tan formados realmente, su abdomen estaba totalmente plano y las entradas que habían hasta abajo me hicieron querer ver mas. Note que su bóxer se encontraba abultado y trague con fuerza.

A lo que voy

¿Todo eso fue alguna vez mio?

¿Realmente fui su novia?

Soy y me considero mas que común

Thiago era un hombre exitoso, con una belleza envidiable, con un léxico maravilloso, una inteligencia de admirar, con mucho dinero. No lo se, tengo un concepto de los tipos ricos en la vida real que se me hace incluso imposible pensar que este chico salió conmigo. Pensaría que su tipo son aquellas mujeres rubias o pelirrojas con grandes curvas, con un estilo de vida perfecto y sin ningún problema.

Yo soy todo menos perfecta

— Tanto tiempo sin verme debe ser incluso impresionante.— Sonrió y alce mi vista hacia él.— Tu reacción sigue siendo la misma.

— Entonces ya te había visto desnudo antes

— Puede ser que si.— Sonrió.— Pero vamos, teníamos unos cuantos años de relación, es obvio que tuvimos relaciones sexuales y que tu me viste desnudo mas de una vez tanto como yo a ti te vi desnuda.