Y ahora que vuelvo a estar cuerda
y con los pies pisando el suelo,
poco a poco me doy cuenta
de que no necesito consuelo.
Y ahora es el momento de gritar,
ahora es el momento de denuncia.
Lo siento, pero esta chica anuncia,
que las injusticias no piensa aguantar.
Estoy harta de cerdos, policías y personas,
harta de pisar ratas muertas.
Me cansa que en la vida no haya comas,
y me cansa que en mi vida te entrometas.
ESTÁS LEYENDO
Resurrección
PoetryEsto no es una novela. No es ficción. No hablo de romances, ni de resolver ningún misterio. No pienso hablar de padres, madres o hijos. Ni siquiera de abuelos o nietos. Esto podría estar pasando en el edificio de al lado, en la ciudad de al lado, a...
