ʀᴇᴄʜᴀᴢᴀᴅᴀ | ꜱᴛʀᴀʏ ᴋɪᴅꜱ ¹

❑❛Capítulo 1

Levanter sonaba a través de la bocina, los ocho estaban moviéndose al ritmo de la canción acorde a los pasos de la coreografía, el sudor les empavaba, estaban exhaustos, pero querían dar lo mejor de ellos a pesar de que fuesen solo ensayos sin fans gritando eufóricamente a por ellos.

Solo querían que todo saliera perfecto para que, en cuanto cayera la noche, pudieran irse a su dormitorio a descansar por lo menos unas cuantas horas antes de volver a la empresa al día siguiente. Tenían su tarde-noche muy bien planeada, todo consistía en descansar. Solo eso.

El problema aquí es que Stray Kids no contaba con el llamado de jyp para una reunión urgente y rápida la cual quería tener con ellos.

― ¡Estoy cansado! ―grito Jisung con las pocas fuerzas que le quedaban después de tumbarse al suelo.

―Cuando salgan recuerden abrigarse bien, no quiero que se enfermen. ―ordeno Chan y todos asintieron a sus palabras.

―Hyung, ―le llamo Jeongin―, ¿podríamos pasar a comprar algo? ―puchereo―, tengo hambre.

―Deberíamos pedir comida rápida antes de que cierren los establecimientos. ―cambio Seungmin la propuesta.

Nadie tendría ganas de salir a la calle para buscar comida que a todos les gustara, era mejor pedir lo más básico y delicioso: pizza.

―De acuerdo, pediré comida en camino al dormitorio. ―dijo Chan para ahora si tumbarse al suelo.

El tiempo que tuvieron de descanso fue corto, hubiera durado más sino fuera por su manager quien entro después de tocar la puerta, los ocho chicos se pusieron de pie y saludaron educadamente con una reverencia.

―Chicos es necesario que se presenten en la oficina del ceo, tiene algo importante que decirles, es urgente. ―fue lo único que dijo para después retirarse del lugar.

― ¿Hicimos algo malo? ―pregunto el maknae.

―No que yo sepa. ―contesto el líder―. Es mejor que vayamos y no hagamos esperar.

Limpiaron sus rostros todo rastro de sudor, colocaron sus sudaderas y salieron de la sala de prácticas, subieron por las escaleras hasta llegar al piso de arriba donde se ubicaba la oficina de jyp, tocaron la puerta antes de entrar, el pase les fue concedido. No negarían que no se encontraban nerviosos justo ahora.

Fueron llamados los ocho al mismo tiempo a la oficina de jyp, no tenían idea de para que los necesitaba si justo ahora estaban en medio de ensayos importantes.

Entraron uno por uno a la oficina del antes nombrado, lo notaron a él y a una chica de 17 años aproximadamente, cabello corto y liso, los ocho hicieron una reverencia por educación a ambos y Bang Chan fue el primero en hablar.

― ¿Sucede algo? ―mentiría si no dijera que estaba nervioso.

―Los cite aquí a los ocho porque necesito decirles algo muy importante y no quiero perder más tiempo. ―la chica se puso nerviosa y eso los demás lo notaron.

―Usted dirá. ―menciono el líder.

―Ella, ―señalo a la pelinegra―, vivirá con ustedes a partir de hoy. ―y tal y como lo pensó, las reacciones no se hicieron esperar.

― ¿Por qué razón? ―pregunto Felix confundido.

―Porque ella, ―hizo un ademán hacia la chica para que se acercara―, será ahora parte de Stray Kids.

De todo había menos felicidad y Aurora no estaba del todo consciente que su vida de idol sería mucho más difícil de lo que había imaginado.

El silencio que se había formado en la oficina era realmente incómodo y tenía ese toque de suspenso porque nadie decía nada, sobre todo los chicos quienes eran los principales ¿afectados? no estoy muy segura si llamarlo de esa manera, pero sería una palabra similar a ello.

―Ya chicos, digan algo. ―pidió nervioso el ceo, aceptaba que el ambiente era tenso.

― ¿Ella será parte del grupo? ―pregunto incrédulo Changbin―, ¿y cuando nos tomaron en cuenta en la decisión?

―Hablaremos de esto mañana, se está haciendo ya de noche así que tómense el resto del día para que puedan ubicarla en el dormitorio. ―señalo con la mirada a la chica quien seguía mirando sus manos.

Chan fue el último en salir, dio el pase primero a la chica así que ésta cargo su mochila en sus hombros y su maleta, tomo su peluche de delfín y salió de la oficina de jyp no sin antes hacer una reverencia.

Se unió al camino del resto de los chicos, sabía que era incomodo todo porque nadie le hablaba, solo Chan era el que la guiaba, pero no con voz sino con la mirada. Nunca creyó que esto iba a ser tan difícil, tenía en cuenta que todos eran hombres y que quizás si sería incómodo y algo extraño, pero no esperaba del todo que sus nuevos compañeros de grupo definitivamente no tuviesen la mínima intención de hablarle.

Al llegar al dormitorio, Chan la guio hasta la habitación que pertenecía a la maknae line, Jeongin y Seungmin protestaron en silencio y Chan los calmo enseguida mandándoles una mirada nada afectuosa mientras que Felix estaba tranquilo, la chica entro, pero se quedó de pie, como esperando a que le dieran alguna instrucción de lo que debía hacer.

―Ustedes se encargan, es su habitación. ―con eso Chan se zafo de la situación dejando a los tres menores con ella.

― ¡Hyung! ―medio grito Jeongin, pero ya era demasiado tarde, el líder ya estaba en la sala haciendo como que no escuchaba nada.

Todo era tan jodidamente tenso y tan diferente a lo que los chicos tenían planeado para esa tarde-noche.

―Jeongin y Seungmin tienen la litera de la izquierda, solo queda la cama de arriba en la derecha así que esa será tuya. ―finalizo Felix.

―Gra-gracias. ―tartamudeo, y antes de que pudiera decir alguna otra palabra la puerta se cerró.

Los tres se habían ido de allí.

―No sé en qué me metí, pero estoy aquí, ―trato de consolarse―, tu puedes Aurora enserio tu puedes. ―se auto consoló sola.

Repitió la misma frase durante unos cuantos segundos, dejo su maleta recargada en el rincón de la ventana, coloco su peluche de delfín en la cama de arriba y puso su mochila en el suelo cerca de la maleta.

No tenía ánimos de sacar sus cosas ahora, solo quería pensar acerca de la situación, creía que quizás mañana las cosas mejorarían y podría entablar conversación con los chicos, que solo era el momento del shock por esta noticia tan repentina.

Pero no se imaginaba lo que se avecinaba para ella.

Estaría mas sola que un anciano en un asilo.