El ático. Yaoi Hard Sadomasoquista

capitulo 40

Fuí a casa con el dinero en mano, me ofrecía más de lo que pagaban en la pizzería pero, es él, corría riesgo de que me volviera a intentar secuestrar, además, sería un idiota sí acepto, pero también era buen dinero, aunque era dinero que debía por su culpa, además, también exponía a Andrea, a mi niña, no me gusta eso.
No acepté, no confío en él, sé que tiene un plan, siempre es así, finge estupidez y cuando menos te lo esperas te está follando, no debo bajar la guardía.
Entré en la casa y Andrea ordenaba, también viene llegando de la casa de la doña a la que le limpia, platicamos un poco, al parecer a ella le pagaron 100 pesos hoy, yo tengo el dinero de limpiar la escuela y lo que me dió Michael, serían como 600 entre lo mío y lo de Andrea, los dólares de Michael eran como otros 200, 800 pesos eran buenos para un día, pero con eso tendremos que vivir toda la semana y pagar las deudas. Aunque también recibiría 100 mañana de las entregas de la pizzería, eso también ayudaría, mañana iré a comprar algo de despensa, falta mucha comida, si le resto lo que pagaré en el banco y le sumo lo que ganaré en la semana me quedan 300 pesos, con eso puedo comprar muchos frijoles y huevo, podré comprar muchas cosas pequeñas, estoy seguro que eso nos alcanzará.
A la mañana siguiente fuí a bodega ahorrera y compré todo lo que pude, tengo que tener suficiente para la semana, sino, no lograré llegar al domingo. Salí de ahí en el auto de papá, me dirigí al centro para comprar algunas verduras, entonces me dí cuenta cuan realmente grande era la casa de Michael, era de dos pisos, blanca, tenía cesped, yo recuerdo haber visto este lugar antes, estaba feo y apesar de que era grande se veía viejo y demacrado, Michael sin duda había hecho un buen trabajo, quien diría que una persona tan malvada podía hacer cosas bonitas, aunque de seguro contrató a un diseñador o algo así. Fuí por mis verduras y de regreso le eché otro vistazo a la casa, se veían acogedora, no era demaciado grande, ni demaciado pequeña, me gustaría tener una casa así pero, no quiero tener nada que ver con él.
Tomé mi moto y estaba por irme cuando un llanto de bebé me sacó de mis pensamientos, voltee a ver a la casa y ahí estaba, Michael arrullaba al nene en el balcón, le daba besitos en su mejilla y jugó con sus piecitos, miré escondido en un pilar lo que sucedía. Él bebé dejó de llorar y jugaba con Michael, se veían exactamente como padre he hijo, por un segundo quedé encantado pero algo me sacó de mis pensamientos, él bebé me miró y apuntó a mi dirección con su manita delatadora, Michael volteó pero por fortuna logré esconderme, pero el bebé comenzó a llorar otra vez. Esa cosita casi me delata, debo tener más cuidado, Michael podría verme y malinterpretar las cosas, debo salir de aquí pronto, ese bebé es lindo pero hasta creen que yo voy a andar cuidando esa madre, pura gente pendeja se encariñaría con un bebé concebido de esa manera y como yo no soy gente pendeja, simplemente escaparé de él. Me escabuyí entré la gente y llegué a mi auto, estar escapando continuamente de Michael me deja una sensación extraña en mi barriga, creo que me acostumbré a huir, antes me gustaba la adrenalina de los juegos de carreras o el pilla pilla o las atrapaditas, etc. De haber sabido que mi vida iba a tener persecuciones constantes abría entrenado un poco más, tengo que aprender a esconderme mejor, siempre me atrapa.
Llegué a casa y comencé a preparar la comida, papá llegaría en un par de horas, Andrea estaba ocupada barriendo en cada agenda y yo tenía libre toda la mañana, puedo hacer quehacer mientras tanto.

...

Él creé que no logré verlo, está algo rellenito, ese pilar lo deja al descubierto, aún así no lo perseguiré, no estoy en condiciones de hacerlo, tengo a mi bebé, sé que no se parece en nada a él, lo conozco lo suficiente como para comprender todas sus características y he estado con mi bebé durante todo esté tiempo. Sí él acepta el trabajo de cuidarlo haré todo lo que sea posible para que puedan crear un vínculo, escuché hace unos días el caso de una niña de 14 años que fué violada y después de dar a luz decidió quedarse con los bebés, bueno, más o menos, su familia la hizo cuidarlos pero, bueno, es un caso algo diferente si, pero yo soy su familia, soy su cuñado o algo así, sí él lo cuida y lo alimenta estoy seguro que generarán un vínculo, él es su tío, en alguna parte de su corazón debe haber un espacio para el bebé. Sí Andrea no quiere hacerce responsable bien, que tome él la responsabilidad, que asuma el papel de madre y cuide conmigo de este niño, es su deber.
Comencé a buscar cirugías plásticas para remodelar mi cara, mi brazo y mi pierna ya no tenían salvación pero mi rostro puede cambiar, tal vez pueda reconstruirlo hasta el punto en que logré ser atractivo para él, recuerdo que hasta el bebé lloraba al verme los primeros días, pero ahora me adora, siempre quiere que lo cargue en brazos, siempre quiere que lo apapache, espero ocurra lo mismo con él. Sí logro formar parte importante de su vida es obvio que también me querrá, tengo que hacer que él necesite de mi, tengo que hacer que él me vea cómo alguien nuevo, algo más que su ex obsesivo, por que eso somos, ex's, aunque quiera negarlo, yo toqué su cuerpo, yo lo llevé de viaje yo lo hice feliz en incontables ocasiones, con mi dinero lo cuidé más que a mí, lo amé más que a nada en el mundo. Ahora por él mi familia me odia también, mi hermano que antes me pedía dinero ni siquiera me habla, mi madre falleció de un infarto cuando se enteró de los juicios y nadie me dijo hasta hace apenas unos días, mi hermano me lo gritó a la cara y me dijo todas las verdades que yo ya sabía. Lo sé, y lo admito, ya no puedo más, estoy loco, soy un psicópata, lo siento, yo no quise causarle todo este daño a él, pero no sé cómo controlarme, no entiendo nada, no sé que hacer, solo sé que mi meta es él, solo sé que él es a quien amo y por quién vivo. Yo... Yo lo necesito aquí... Aunque me golpé, me diga todas esas cosas aberrantes y me humille. Siempre que lo tengo cerca siento que voy a morir, mi corazón late tan rápido que parece que se me saldrá del pecho, ahora sumale a esto verlo con el bebé. Cuando lo tiene en brazos me imagino que en algún mundo él y yo somos esposos, él da a luz a mi hijo y lo quiere tanto como yo, que en algún lugar él a aceptado mi propuesta de matrimonio y somos una feliz pareja.