S e x t o

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Cierra los ojos.

Inspira profundamente.

Expira, lenta y silenciosamente.

Intenta reproducir el siguiente escenario allá donde estés leyendo esto. Si no es posible, trata de imaginártelo.

Fuera es de noche. Las ventanas están abiertas de par en par y sólo se oye la quietud del mundo del nocturno verano.

Algún que otro pájaro aletea de manera débil fuera, al son de los grillos, pero no es más que un murmullo en la lejanía.

Hace calor. Todo pesa. El mundo calla.

Sobre el suelo de madera, sentado sobre tus pies, te encuentras tú. Estás colocado en posición de meditación, relajado pero no por ello menos atento.

Un ruido se oye de fondo.

Ñec,
          ñeec,
                    ñeeec.

Se oye de manera reiterada, uno tras otro, con pocos segundos de diferencia entre uno y otro.

Cada vez con más lentitud.

Cada vez más cerca.

Sientes una presencia detras de ti y despiertas de tu meditación.

INEFABLEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora