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Cuando Rebeca recibió esa llamada telefónica que cambió su vida, estaba aterrorizada y nerviosa más allá de toda creencia. A pesar de la forma en que se le repartieron las cartas, no pudo evitar sentir crecer su corazón mientras imaginaba la vida con un niño. Un bebé. Algo que siempre había querido, mucho antes de ser traicionada por su propia Madre y Padre.
Klaus igual iba a dejar a esa bebita,melliza de Hope,siempre supo que era egoísta,pero quererse deshacer de su segunda hija solo porque era menos poderosa era cruel,solo querer a una de tus hijas y repudiar a la otra por nacer,y Hayley no se quedó atrás con su preferencia por Hope,su argumento era que solo quería una hija,que solo sabía de Hope y no de la bebé inesperado,que además su hija necesitaba atención y no la iba a desatender por esa bebé.
Gracias a Elija que por lo menos tuvo sentido común le hablaron ofreciéndosela,de lo contrario la dejarían en algún lugar al azar,con alguna familia humana,porque sospechaban que la niña lo era.
En el momento en que Niklaus puso la pequeña en los brazos de Rebeca, sintió un manto de calidez y paz cubrirla. Algo que nunca había sentido en su vida milenaria. Su corazón estaba tan lleno, que le dolía cuando miraba a los pequeños ojos verdes azulados de la bebé.
Despedirse de su familia nunca fue fácil. Odiaba huir, pero esta vez lo odiaba un poco menos, ahora que tenía una compañera dulce e inocente constantemente observándola en cada movimiento. Ella tendría que estar mejor ahora.Las únicas palabras de Nik y Hayley dijeron fueron "llévatela lejos,que no sepa de nosotros,inventa algo o has lo que quieras,pero no la queremos cerca,ni mucho menos escuchar nada de ella",y así sería,la alejaría lo más posible de ellos y del caos sobrenatural.
Pensó que sería difícil adaptarse a la vida con un bebé, a pesar de que lo quería durante tanto tiempo, pero era como si su cerebro activara un interruptor que no sabía que existía.
Rebeca nunca se había sentido más humana en su vida. Ella había pensado que sabía cómo se sentía el amor, de los hombres con los que había desarrollado relaciones a lo largo de 11 siglos. Pero esto fue algo extraordinario. A pesar del hecho de que este niño no creció dentro de ella,lo sentía tan suyo.
Se encontró desarmándose al ver al precioso bebé, que se dormía entre su pecho, sintiendo su rápido latir en su propio. Su corazón encima de su corazón. Ella había anhelado tanto este sentimiento.
Se instalaron en un hotel a las afueras de la ciudad,la pequeña parecía una muñequita verdaderamente hermosa,cabello café oscuro y ojos verdes azulados ,sin duda heredado de sus padres biológicos,pero le sorprendió ver que se parecía a ella,misma nariz y rasgos faciales.
Cuando despertó y sus hipnotizantes ojos la vieron por unos segundos y podría haber jurado que le sonrió cuando su pequeña manita tomó su dedo.
-Supongo que seremos solo tú y yo ¿no pequeña?,hay que darte un nombre,he pensado en algunos,como Rose porque eres tan bella como una,pero tal vez Natalia sería mejor-ante eso recibió un suave balbuceo del recién nacido,causando una sonrisa en ella-¿Te gusta mi pequeña Natalia?-susurró cargándola-Bueno supongo que tenemos un nombre Natalia Rose Mikaelson-declaró probando sus nombre en sus labios,tenía planeado alejarse de todo lo conocido en este momento,en especial de su detestable familia,se iría a Rusia en donde tenía una gran mansión,donde Natalia podría crecer feliz.
Los nombres de Natalia tenían significados,Natalia significaba "la que da vida y regalo",mientras que Rose "Belleza",y eso era exactamente lo que la bebé le estaba dando,una vida,una oportunidad de ser feliz y amar,una hija como siempre había querido.
Los años pasaron y la pequeña se encontró preguntando por su padre,realmente no hablaban de eso,ella había inventado una historia sobre cómo fue madre joven y eso es lo que les decía a todos,un joven romance que resultó en Natalia,y nadie lo cuestionó por su parecido físico,incluso diciendo que su hija se parecía mucho a ella
La historia fue la misma para la pequeña castaña,que su papá se fue por que era lo mejor,así dejándola para que su mamá le diera amor por los dos,la niña simplemente lo comprendió,consiente de que había muchos tipos de familias,y no volvió a preguntar más,ella consideraba a su mamá su mundo,así que no necesitaba más.
Era una niña curiosa,siempre admirando hasta más pequeño detalle de las cosas,buscando aventuras,incluso si eso implicaba meterse en problemas terminaba con una sonrisa satisfecha en la cara si su objetivo se había cumplido,pero a la vez era dulce,considerada,generosa y empatía,tan cariñosa,una combinación perfecta de bondad y temperamento.
Cada que podían salían de viaje,a Rebekah le gustaba enseñarle el mundo,la forma en la que siempre estaba maravillada por todo lo que descubría,sus ojos repletos de inocencia y esperanza,como si el mundo fuera hermoso,la castaña irradiaba felicidad.
Razón por la que decidió ocultarle sus orígenes,tenía su lado lobo y bruja,pero el vampiro era inconcluso,cuando era bebé la había llevado con algunas brujas de confianza para que descubrieran si era humana o un trihibido,el único lado que quedó inconcluso fue el vampiro,había posibilidades de que lo tuviera o no,le ocultó su lado lobo,diciendo que la Luna en su espalda era una marca de nacimiento,y dándole sin que lo supiera una pulsera que permitiría restringir su magia,así tendría una vida normal,su lado lobo no se activaría si no matara y su magia estaba controlada.
Por 13 años todo fue tranquilo,tenía la vida humana que siempre había soñado,con una hermosa hija,sintiéndose viva y amando a una persona de una manera en que nunca lo hizo,recibiendo también amor de su pequeña.
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