Capítulo Veintitrés

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-Nam, necesito hablar con JiMin - trató de sonar lo más natural posible mientras desviaba la mirada.

NamJoon le miró sorprendido, nunca habría pensado que el zorrito pediría algo como eso, ahora sentía curiosidad - ¿Con JiMin? - le acarició el cabello preguntando incrédulo.

-Sí, es que quedamos en que nos pondríamos de acuerdo para que me diera un poco de ropa - ahora si le extrañaba, ¿Acaso JiMin sabía que era un zorro y por algún motivo se lo estaban ocultando? - le dije que me había mudado hace poco y no tenía muchas cosas, además somos del mismo porte y creo que calzaria bien... ¿Qué piensas? - YoonGi se volteo a mirarle fijamente tratando de no parecer tan ansioso por el tema. - No puedo usar todo el tiempo tu ropa Namie - Sonrió nervioso insistiendo nuevamente.

NamJoon trató de disimular la mala cara que le había dado al pálido, pero él le captó rápidamente. Tampoco es que el moreno le quiera negar que saliera y hablara con otra personas, pero sentía que algo no andaba bien, aún así asintió.

-¿Quieres ir mañana? - YoonGi asintió. Por un lado le gustaba ver al pálido tener la iniciativa de conversar con sus amigos, pero, ¿porqué entonces se sentía tan inseguro?

YoonGi se transformó en zorro y se movió entre la ropa restregandose contra NamJoon quien le miraba ya más relajado, sonrió cuando le vio de vuelta en humano, desnudo.

-Oh, por favor, no me tientes así Yoonie - le besó el hombro abrazando su torso desnudo.

-¿Así que siempre te provoque? - YoonGi le miró divertido con las  cejas alzadas, acomodándose entre los brazos del moreno.

-Por supuesto - le beso la mejilla con cariño y se acomodo entre su cuello y hombro. - ¿cómo no lo harías? - sonrió rodeando el cuerpo de YoonGi y pasando su mano por la espalda hasta llegar a la espalda baja, el pálido sintió escalofríos, aquello siempre le daba escalofríos pero le encantaba sentir las manos de NamJoon sobre él.

...

-Bien, ¿Estás listo? - el moreno se asomó al baño para mirarle y le sonrió con ternura al ver que YoonGi tenía razón, la ropa de él quizás, solo quizás le quedaba un poco grande, después de todo el pálido era de contextura delgada y pequeña.

- Ah, si - respondió distraído terminando de abotonar la camisa, NamJoon se acercó para doblarle el cuello de la misma y apartarle un mechón de cabello de su rostro. YoonGi le miró.

-Te ves bien Yoonie - le dijo sincero, sonriendo - me pondré muy celoso si alguien te mira demasiado, eh... - bromeó, pero quito su sonrisa al ver que el pálido no decía nada y parecía perdido en alguna parte de la habitación.

- ah.. ¿Hasta que al fin admitirias estar celoso? - luego de un momento le respondió sonriendo de lado y NamJoon rodó los ojos divertido aunque el zorrito parecía estar en otro lado menos en el cuarto con él.

- Si es muy grave, claro que si zorrito - se acercó a besarle la mejilla y luego un fugaz beso en los labios - Vamos, llegaremos tarde - YoonGi le vio darse la vuelta y rasco su mano, nervioso.

Cuando salieron del apartamento de NamJoon el frío los acogió, sin duda hasta el cielo tenía un mal presagio de lluvia. El moreno comenzó a caminar por la misma calle que siempre ocupaba para ir al trabajo mientras el pálido le seguía a un paso más lento. Ninguno de los dos había dicho algo de camino, YoonGi estaba cada vez más  nervioso y sentía que colapsaria en cualquier momento, necesitaba desahogarse urgentemente.

& Lt; & lt; Our History & gt; & gt; NamGiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora