000

582 36 0
                                    

Toy

Luego de haber pasado un mes viviendo con la mejor amiga de su madre debido a la muerte de ésta decidió que lo mejor era dejar de aprovecharse de la amabilidad de aquella mujer y volver a Corea.

Podría volver y vivir solo, pero aún tenía 16 años y realmente dudaba poder mantenerse, por lo que a pesar de odiar la idea...

Debía buscar a su padre el cual había abandonado a su madre en cuanto supo del embarazo.

Y lo único que sabía de él era su nombre y que había vivido en la capital de Corea los últimos siete años... y esperaba que siguiera siendo así. Mucha información por suerte.

Con los ahorros de vida de su madre y los suyos armó su pequeña valija y se despidió de aquella mujer que lo había estado cuidando listo para tomar el primer avión que lo llevara directo a Corea, aún no estaba seguro de como lograría encontrar a su padre pero para su suerte encontró una escuela a la que poder seguir asistiendo mientras realizaba su búsqueda.

Luego de un viaje de unas largas 17 horas, por fin se encontraba en el aeropuerto, le esperaron veinte minutos más de viaje hasta Seúl y su trasero ya empezaba a dolerle. Una vez llegó a la bendita capital de Corea le indicó al taxista la dirección de la casa de el hijo de la amiga de su madre, con el cual se quedaría hasta que encontrara un buen lugar donde quedarse o en su defecto, a su padre.

Al llegar pagó al taxista, se bajó y tocó timbre siendo recibido por un joven bastante alto y delgado de cabellos castaños y largos.

-Hola, ¿Debes ser Mark verdad?-El nombrado asintió.-Pasa, soy Johnny, mamá me dijo que cerca de esta hora estarías llegando, seguime te voy a mostrar tu cuarto.-

Johnny terminó por hacerle el recorrido por la casa explicándole como funcionaba cada cosa y entregándole una llave de la misma para que no tenga que estar dependiendo de él. Mark escuchó atentamente cada una de sus explicaciones y le agradeció al Suh por ofrecerse a llevarlo a su primer día de clases.

...

Unos días después ya estaba todo listo para su primer día de clases y por lo tanto su primer día en la búsqueda de su padre, Lee Taeyong.

Tomó su mochila con sus cosas y subió al auto de Johnny quien lo llevaría por ese día ya que no debía ir a la universidad. El camino fue silencioso ya que Mark tenía una mirada de que si le dirigías la palabra probablemente terminarías con un golpe en la cara.

Una vez estuvieron en frente de la escuela Mark se bajó del auto sin olvidar despedirse de Johnny y agradecerle una vez más el haberlo llevado.

Acabó por adentrarse por los pasillos de la escuela en busca de su primera clase la cual logró encontrar enseguida. Pasó tranquilamente, al igual que la segunda y la tercera hasta que finalmente llegó la hora del receso donde se encaminó hasta la que creía que era la cafetería y buscó el puesto de comida listo para elegir lo que comería ese día.

Sirvió comida en su bandeja y comenzó la búsqueda de algún lugar en el que sentarse, no había logrado hacer amigos ni nada por el estilo por lo que estaba bastante solo y perdido. Y para empeorar su suerte por distraído acabó chocándose con un chico un poco más bajo que él pero con una mirada penetrante.

-¿¡Pero que diablos haces!?-Chilló en cuanto notó como toda su bebida de fresa había caído en su ropa arruinándola por completo.

Mark tragó en seco a sabiendas que había metido la pata y en grande, dos chicos más se acercaron al de baja estatura como si fueran sus dos secuaces. De repente comenzó a sentirse más intimidado.

-¿Te comió la lengua el gato?-Preguntó alzando una ceja.

-Lo siento, fue un accidente, no te vi, iba distraído.-Contestó, pero esa respuesta hizo enfadar aún más al chico frente suyo.

-¡Accidente dice!-Suelta junto con una carcajada.-Esta remera cuesta más que cualquier cosa que tengas.-Responde poniéndose serio.-Y vas a pagarla por haberla arruinado.-

Mark lo miró incrédulo, ¿Ese estúpido chico estaba insinuando que debía pagarle por haberle ensuciado la ropa? ¿Quién rayos se creía? Soltó una risa irónica y estuvo apunto de responder de no ser porque un joven peliazul lo tomó del brazo e interrumpió la discusión.

-¡Discúlpenlo! Es nuevo, no tiene idea de lo que dice, lo siente mucho, ¿Verdad?-Preguntó mirando directamente a Mark mientras lo alentaba a dar una respuesta positiva. El mayor terminó asintiendo algo dudoso.-¡Bien! No volverá a pasar, ¡Ya nos vamos!-Contestó arrastrando al pelinegro lejos de aquellos tres chicos.

Una vez estuvieron lo suficientemente lejos el peliazul suspiró y volvió a dirigirle la palabra.-¡Uf! Eso estuvo cerca, noté que eras nuevo en cuanto te vi hablándoles tan tranquilamente.-Mark lo miró confundido.-Por cierto soy Jaemin.-

-Mark.-Respondió tranquilo.

-¿Uh? No sos de acá ¿Verdad?-El contrario asintió.-Con razón les hablaste a esos tres.-Respondió mientras reanudaba su paso.

-¿No se les puede hablar?-

-Algo así.-Contestó con una mueca.-Se creen los reyes del instituto y probablemente de la ciudad, no te conviene meterte con ellos.-Responde tranquilo, Mark asiente y juntos llegan hasta una mesa de lo más alejada de la cafetería donde hay dos chicos más.-Te presento a mis amigos, Jisung y Chenle, chicos él es Mark, es nuevo y no es de acá así que trátenlo bien.-

-Hola.-Saludó Jisung con una sonrisa.

-Uh hola, ¿De dónde sos?-Preguntó ansioso, le gustaba hacer amigos.

-Canadá, bueno nací acá y viví unos tres años y luego con mi madre nos mudamos.-Explicó mientras se disponía a comer.

-Un poco lejos se fueron.-Bromeó Zhong.

-¿Por qué Renjun está mirando furioso en nuestra dirección?-Preguntó el menor del grupo con algo de temor en sus ojos, Huang lo había molestado como por dos años cuando llegó a la escuela, hasta que encontró a un nuevo "Juguete" con el que divertirse y se olvidó de él.

-Mm Mark volcó accidentalmente su batido de fresa en Renjun.-Los otros dos chicos lo miraron horrorizado.

-Sos hombre muerto.-Soltó Chenle.

-Vaya primer día...-

...

Por otro lado aquellos tres chicos que se creían los reyes del instituto se habían sentado en su mesa dispuestos a almorzar, a excepción de Renjun quien no había dejado de quejarse de aquel chico que había ensuciado su atuendo.

DongHyuck lo escuchaba, o algo así, estaba más concentrado en devorar su sándwich, Jeno por otro lado lo escuchaba atentamente y asentía sin pensarlo.

-¿Qué opinás Hyuck?-Preguntó Renjun sacando de sus pensamientos al menor.

-¿Sobre?-El mayor rodó los ojos.

-Vengarme del chiquito ese y no sé... tal vez volverlo mi juguete.-DongHyuck lo miró haciendo una mueca que tan solo duró un mili segundo. En realidad DongHyuck no apoyaba del todo los planes de Renjun y si estaba con él es porque prefería eso a tenerlo en contra.

-Supongo.-Respondió volviendo su atención a la comida. A decir verdad le daba algo de lastima el chico nuevo, era lindo y parecía perdido.

-Bien, Jeno ideas.-Ordenó, el nombrado se puso en marcha sentándose a su lado.

DongHyuck más bien se dedicó a devorar su comida y de vez en cuando desviar su vista al lindo pelinegro recién llegado.

No estaba seguro de si le agradaba del todo la idea de que ese chico fuera el nuevo juguete de Renjun.



¡Hola hola!
Había olvidado completamente que tenía este fic para subir, espero que les guste <3

MarkHyuck | meet youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora