Jimin es un atractivo omega que se dedica a complacer a algunos alfas y betas con tal de mantener su costosa vida.
Hasta que Min YoonGi le arruina la vida.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Aquellas palabras que imagino que nunca escucharía... No, mas bien no lo había imaginado... Nunca paso por su mente que Min YoonGi fuera capaz de decir tales cosas.
—Pero que gran manera de arruinarlo. —Soltó en una pequeña risa mezclada con enojo, intentando cubrir la tristeza que su lobo comenzaba a experimentar, al sentir el rechazo y duda por parte de su alfa.
Jimin tomo una larga y profunda respiración, intentado controlar a su ya roto omega, tardo algunos minutos, sentado al borde de la cama matrimonial y sábanas blancas, mientras su vista se concentraba en la nada.
Mordió su mejilla interna al sentir a su lobo arañar su interior, en un intento fallido por tomar el control.
No podía llorar, no... Mas bien no debía llorar.
Se puso se pie camino hasta recoger su playera.
—Jimin...no, no te vayas... —Murmuro entre cortas palabras y respiración irregular, después de largos minutos incómodos pudo hablar. Solo para pedirle a su omega que se quedara.
—¿Quieres que me quede? —Mustio aun sin verle a la cara. —¿A que? ¿a tener sexo? —Pregunto con sarcasmo y burla en sus palabras. —YoonGi nunca, nunca. —Enfatizó en sus palabras. —En la vida me había sentido tan pequeño en mi vida, y sabes muy bien a que me dedicaba, y aun así podía sentirme bien conmigo mismo, pero ahora solo puedo sentir que me vez como... Basura, como algo que ya no te gusta y puedes dejar olvidado, pero... Esta bien, por lo menos podemos terminarlo aquí, antes de que sea demasiado tarde.
—¿Terminar que? Demasiado tarde ¿para que? Yo no quiero terminar, Yo te...~.
—Demasiado tarde para dejarte. —Interrumpió Jimin, intentado no romperse ante Min YoonGi. —Demasiado tarde para dejar de amarte.
—Por favor amor, solo dime la verdad, no cambiara nada. Incluso si... —YoonGi detuvo sus palabras de golpe, al sentir a su omega siendo destrozado.
¿Él había hecho eso?
¿En verdad había logrado romper al omega de Jimin?
—¿Incluso si no es tuyo voy amarte igual? Termina lo que quieres decir, para poder irme. —Hablo Jimin, manteniendo su rostro sereno, como si no acabaran de romperle el corazón y estuvieran intentado pegarlo con lindas e inútiles palabras.
—Si, eso no cambia nada...
—Eso... Ya no es nuestro bebé, ahora es "eso". —Susurro muy bajo, casi inaudible. —¿Tu que crees? —Pregunto volviendo a elevar la voz.
—Quiero creer que es mio. —Respondió Min, viendo el rostro de Jimin negar al instante en que escucho su respuesta.
—Hay una diferencia muy grande entre creer y querer creer. —Sonrió Jimin, mientras se colocaba su ropa.
Jimin dio largos pero lentos pasos hacia su alfa, si es que aun podía llamarle así.
—Jimin. —Susurro YoonGi, al sentir los labios de su omega sobre los suyos.
Eran cálidos, suaves, delicados, podía sentir la forma en que se movían, cada delicado movimiento sobre sus labios, el débil roce, el cálido calor que le brindaban. —Adiós Min YoonGi. —Murmuro al finalizar un largo y último beso. —No es tuyo.
