The Doll (ZhanYi/YiZhan)

13.

Capítulo 13. - El Hechicero y el Príncipe VII

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- ¡Por favor Ji Yang, tienes que creerme, debes irte ya!

- Estás loco... si fuera cierto ¿Por qué el rey no ha mencionado o nada? No se han inmovilizado...

- Porque... porque... él no lo sabe aún... - Hao Xuan supo la verdad aunque Zhan no fue demasiado explícito, pero no dudó en la veracidad en las palabras de Xiao Zhan. Incluso si no fuese cierto, nada perdía con resguardar a su familia. ¿Verdad? Confiaba en Zhan y no quería arriesgarse a comprobar si era mentira o verdad, debió irse.

Incluso Yang Zi se había ido ya con su familia y la familia de Hao Xuan igualmente ya estaba en otro poblado. El guardia los llevó y luego volvió para intentar de nuevo convencer a Ji Yang de irse del reino o podrían solicitar su presencia en la batalla cuando el reino de Yiling decidiera atacar por fin el reino.

- No te creo una mierda, solo quieres arrastrarme pero jamás voy a caer contigo, ya ríndete y vete de mi casa.

- ... - Hao Xuan sintió enojo pero ¿Qué más podía hacer? Quería irse pero al hacerlo probablemente lo acusarían de cómplice del traidor hechicero cuando el rey se enterara que su hijo había huido con Xiao Zhan.

No podía irse con su familia tampoco para no arriesgarlos, a pesar de decirle a Zhan que se iría, no podía... pensado mejor las cosas no era prudente, sobretodo porque la persona que él amaba continuaría en el reino, debía quedarse para protegerlo y para no levantar sospechas, hasta el momento nadie sabía más sabía que Yibo y Zhan ya se habían ido, solo él, Tang Hao y por supuesto, Meng Yao quien había inventado una excusa para la ausencia de Yibo en el desayuno. Lo único que más le preocupaba eran las consecuencias que habría cuando se dieran cuenta que no había logrado "proteger" al príncipe del hechicero, no le importaba si lo tachaban de inútil, pero no iba a delatarlos.

El mayor se dio vuelta para entrar nuevamente a su casa cerrándole la puerta a Hao Xuan en la cara.
El guardia no pudo hacer más por el momento, volvió al los adentros del palacio, ya inventaría una excusa del porqué no pudo evitar que Yibo se fuera.

Meng Yao logró hacer que el rey por ese día no solicitara la presencia del príncipe, de todos modos no le importaba demasiado pero había comenzado a preguntar por el hechicero y al parecer nadie lo había visto ese día, ni siquiera Tang Hao que intentaba no levantar sospechas, él tampoco pudo irse, solo podía intentar hacer de cuenta que nada pasaba.

Al día siguiente el rey ya estaba más molesto por no poder encontrar a su hechicero más poderoso, estaba comenzando a creer que este había huido pero al caer la tarde, finalmente el rey recibió la carta con la aprobación del matrimonio por parte del reino de Lanling, debía darle la buena noticia a su hijo, por lo que solicitó su presencia,  pero este también estaba demorando demasiado.

Hao Xuan había caminado hacia el bosque como normalmente lo hacía en compañía de Yibo, si le preguntaban sobre el príncipe, diría que lo había perdido en el bosque, eso les daría un poco más de tiempo de ventaja, desconocía donde Yibo y Zhan estaban.

- Alteza... quizá es mejor que se lo informe mañana, no hay prisa...

Tianlang-Jun se quedó mirando a Meng Yao haciéndolo sentir un tanto incómodo, el menor no dijo nada más solo miró hacia abajo tragando el odio que tenía por el monarca, todo rastro de amor que sintió por él alguna vez ahora era odio y repulsión pero sabía fingir demasiado bien ante él y ante todos los demás.

El rey caminó hacia él levantando su mentón haciéndolo mirarlo a los ojos.

- Te ves tan hermoso...