¡¡Él es mío!! {En Correción}

Capítulo 4

Corría y corría como un animal por el profundo bosque, el aire frío le pegaba de lleno en la cara alborotandole el cabello y llenandolo con el aroma de la naturaleza.

Las ramas de algunos árboles le arañaban la cara pero no le importaba en lo más mínimo.

Su único objetivo era llegar a la casa del Sheriff.

Tanto su lobo como él ansiaban ver a Stiles, como si fuera una urgencia, algo desesperado.
Estaba entrando en la fase más primitiva de su ser, dejando que su lobo interno tomara control de sus acciones.

El control era cada vez más difícil...

Cuando finalmente llegó a su destino, se quedó estático al ver el famoso Mustag GT que los betas tanto habían alabado.
Estaba estacionado junto al Jeep azul de Stiles y la patrulla del Sheriff.

Soltó un gruñido de rabia.

Era su Camaro el que debía estar estacionado allí.
Con el ceño fruncido y los dientes apretados escaló hasta la ventana de Stiles, mirando con cautela a traves del cristal.

Contuvo un rugido de rabia cuando vió a un hombre sentado plácidamente en la cama de SU humano, mientras el castaño estaba sentado en el suelo doblando un montón de ropa, hablando animadamente con el hombre como si tenerlo allí fuera algo completamente normal.

Parecían en realidad una pareja que llevaban años casados y hablaban de su vida diaria.

-Y entonces me dijo que era algo muy común- contó Stiles mirando al hombre sentado en su cama- Que eres muy molesto y te tuvo que soportar por mucho tiempo- sonrió burlonamente al ver la mueca del otro.

-Creo que tu y mi hermano van a fastidiar mucho mi existencia- bufó Azazel cruzandose de brazos.

Derek observó con recelo el sujeto.

Nunca lo había visto en el pueblo, ni en ningún otro lado ¿Era amigo de Stiles?

Él y los demás conocían a todos los amigos de Stiles y jamás habia mencionado a este sujeto.

Sabía que Stiles no tenía muchos amigos, ya que los podía contar con facilidad.

Entonces ¿Quién diablos era este tipo y por qué estaba con Stiles

¿Era este el tal Azazyel que decían los betas?

-Tu me acosaste por mucho tiempo, así que ahora me dejaras divertime a mi- replicó Stiles mirandolo con los ojos entrecerrados.

Derek miró a aquel hombre con más detalle.

Era alto y musculoso, de piel acanelada, cabellos negros largos hasta los hombros recogidos en una cola baja dejando unos mechones traviesos sobre su frente, tenía los ojos de un raro tono rojo escarlata y una sonrisilla maliciosa en su cara.
Su rostro era varonil, elegante y exesivamente guapo, incluso él tenía que admitirlo.

Vestía solo un pantalón negro y una camiseta azul oscura que enmarcaba cada músculo de su cuerpo.
Y estaba recostado casualmente en la cama del castaño humano como si fuera su propio hogar.

Derek contuvo otro gruñido de rabia al sentir como el aroma a menta de ese sujeto cubría casi por completo la habitación de Stiles, como si viviera allí o como si pasara mucho tiempo en ese lugar.
De hecho, el aroma de ese tipo y el aroma a galletas de Stiles impregnaban esa habitación unidos en una mezcla que a su parecer era asqueroso.

Azazel sonrió maliciosamente al sentir a Derek espiandolos.

¡Hora de la acción!

Se incorporó lentamente de la cama y se puso se pie acercandose sensualmente a Stiles.