Sonríe Mr. Refreshing

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Las salidas internacionales se estaban anunciando y Oikawa venía cargando sus maletas y las de una pelinegra bastante animada quién sostenía el celular de Tooru sonriendo a la pantalla al ver a Hanamaki y a Matsukawa en la videollamada.

-¿En serio no quieren que vayamos por ustedes al aeropuerto?- preguntó el pelirosa y ex capitán negó con la cabeza.

-Tomaremos un taxi- dijo sonriendo con suavidad

-Vendran cansados por el viaje ¿Seguros?- volvió a preguntar Issei con cierta preocupación por sus dos amigos que estaban a punto de tomar el avión para pasar las vacaciones de invierno en Japón. Ciertamente no era cualquier cosa, era casi un día entero de viaje, seguramente llegarían muertos

-Tranquilo, estaremos bien- sonrió Azami mientras volteaba a ver a Tooru para que lo secundara en su afirmación y este sólo asintió con convicción

-Bueno, estás con Yoshida. Es probable que tenga razón- Takahiro soltó una pequeña risa

-¿Es probable?- cuestionó la pelinegra con indignación y alzó una ceja

- Corrección, Yoshida siempre tiene razón- corrigió Mattsun -Ademas es una bolita de energía andante, estoy seguro que el viaje no representa un problema para ella- acompleto la información

-Solo espero que no quiera hacer otras cosas cuando lleguemos- Oikawa intervino y le quitó el celular a Azami provocando un puchero en su rostro-No puedo seguirle el ritmo- suspiró con gesto cansino

-¿Qué pasa, anciano?- bromeó Mattsun -¿Ya quieres la pensión?-  soltó una carcajada y el castaño sólo hizo una cara llena de recelo

-No dirías eso si tuvieras todos los deberes que ahora tengo- hizo una mueca y empezó a estirar el celular sobre él mientras Azami daba ligeros brinquitos para volver a tomar el control sobre el dispositivo. -El entrenador es un bárbaro- se quejó mientras seguía jugando con la pelinegra quien luchaba por alcanzar el celular

-Piedad- pidió ella y Tooru soltó una ligera risita regresandole el control del móvil

-Pasajeros con destino a Bilbao favor de abordar el avión por la puerta 3- se escuchó la voz mecánica del aeropuerto dando la señal de que a ese avión debían de subir

-Bueno chicos, esa es nuestra señal- hablo Oikawa -Nos veremos mañana- sonrió

-Cuidense- se despidió Azami y colgaron para abordar el avión e ir de regreso a su tierra natal haciendo una pequeña escala en ese país del viejo continente

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-Ya los extrañaba horrores- una efusiva pelinegra se lanzó hacía Mattsun y Hanamaki regalando un fuerte abrazo que amenazaba con quitarles el aire

-¿Cómo es que tiene tantas energías después de viajar casi un día entero?- preguntó Issei bastante sorprendido por la actitud

-No la viste durante el vuelo- resopló el castaño con maletas en mano -No paraba de hablar de lo emocionada que estaba por llegar- sonrió recordando cómo hace unas cuantas horas Azami ni siquiera se había dormido por lo menos una hora, sino que parecía que había ingerido cinco kilos de azúcar y su sistema había reaccionado a dicho producto

-¿Así que recibiste una cucharada de tu propia medicina?- cuestionó Makki bastante risueño por la situación y Oikawa frunció el entrecejo -Ya, vayamos a una cafetería, el frío cada vez es más- se frotó los brazos y Mattsun pasó sus brazos sobre sus hombros en un intento de darle algo de calidez

-¿No podemos dejar primero las maletas?- preguntó Oikawa con un puchero

-No, se hará más tarde- intervino Azami -Vamos- tomó el brazo del castaño y empezaron a caminar con dirección a la cafetería.

Entraron y rápidamente fueron recibidos por un agradable olor a café y a pan y tales aromas solo removieron los recuerdos de Oikawa, quien negó con la cabeza y se dispuso a disfrutar de esa tarde con sus amigos. Ya había pasado mucho tiempo lejos de casa, debía aprovechar cada minuto regalado.

La tarde fue bastante amena y agradable, los cuatro chicos egresados de Seijoh platicaba sus aventuras  como estudiantes universitarios, sin duda el interés estaba principalmente centrado en los japoneses que ahora residían en Argentina quienes sin duda no se reservaban nada y entre varias tasas de café y algunos panecillos contaban todo lo que habían vivido juntos.

Sin duda platicar de frente era mucho mejor que hacerlo a través de una pantalla, rieron, bromearon y se molestaron, los minutos se convirtieron en horas cerrando esa distancia a nada, su vínculo seguía intacto y era algo totalmente grato. La noche había llegado y Yoshida se levantó de su asiento disculpándose y yéndose con dirección al baño dejando solos a los tres varones.

-¿Así que Yoshida de nuevo, eh?- inquirió Mattsun alzando una ceja con curiosidad

-Dejalo, ya saben lo que dicen- interrumpió Hanamaki -Donde hubo fuego cenizas quedan- le guiñó un ojo, Oikawa sonrió, pero negó con la cabeza

-No- lo volvió a negar -Escuchen... -suspiro -Azami es preciosa, me ha ayudado mucho y pasar el tiempo con ella es grandioso, me hace recordar porque fuimos novios hace algunos años, sé que si lo intentamos esta vez haremos las cosas bien, pero... - apretó ligeramente la taza -No me siento listo- soltó una bocanada de aire.

Mattsun y Hanamaki se miraron con cierta complicidad, tal vez si le decían lo que había pasado el día que se fue las cosas cambiarían, tal vez si le decían que Sugawara lo había ido a buscar al aeropuerto la balanza cambiaría, pero...

-Oikawa-llamó Mattsun dispuesto a decir lo que pasó, pero Makki tomó su mano y negó con la cabeza. Todos ese día le habían prometido al platinado no decirle a Tooru sobre lo ocurrido aunque nadie estuvo de acuerdo decidieron aceptar su decisión

-¿Han visto a Suga-chan?- preguntó el castaño sin apartar su mirada de la mesa. Quería saber de él, pero no sé animaba a buscarlo por miedo a ser rechazado incluso como amigo

-No- contestó el pelirosa -Lo siento- se disculpo y el ex capitán negó con la cabeza en señal de que todo estaba bien.

Yoshida regreso del baño, pagaron la cuenta y salieron de la cafetería caminando por las frías calles de Miyagi, las vísperas de navidad estaban cerca y en el aire se respiraba ese dulce aroma  que anunciaba esas fechas para pasarlas con las personas que querías, sin embargo Tooru sólo podía recordar su navidad pasada, esa navidad dónde había entregado su alma y corazón a la sonrisa de Mr. Refreshing.

N/a
Holi pequeñas estrellitas, antes de que me pidan que les pague la terapia (╥﹏╥) vengo a decirles que subí una historia muy particular OiSuga hfkha. Es un cliché tercermundista donde Oikawa es un chakal y Sugawara es un niño fresa, además no es el único ship que habrá. Espero que le den una oportunidad pq desde hace tiempo quería hacerlo, pero no me animaba hasta que mi soulmate me convenció jaja e incluso me estuvo ayudando.

La historia se llama "Vamo'a portarnos mal"  y les prometo que no hay lágrimas ni sufrimiento e.e

Advertencia: tiene un lenguaje bastante folklórico y colorido por si no les gusta, así que casi no hay mucha formalidad