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Namjoon era su mejor amigo, se conocían desde que tenía memoria. Su padre siempre estuvo para él, lo apoyó y alentó en todas sus decisiones. Una de ellas era en cambiarse de escuela, no quería ir a una escuela privada, ya que su amigo Namjoon no estaba con él. Luego de la muerte de su madre, Hoseok pudo refugiarse en su padre y amigo.

El moreno lo apoyó y consoló todo lo que pudo, por eso cuando el padre de su amigo sufrió problemas económicos y tuvo que ser cambiado a una escuela pública, el no dudo en cambiarse e ir a estudiar con su amigo.

Su padre al principio no estaba muy de acuerdo, pero al notar que su hijo empezó a decaer, no dudo en apoyarlo.

—¡Hey, Hoseok! —le habló Nam desde la pantalla del computador.

—Namjoon — respondió con una sonrisa.

—Te ves bien— miró con nostalgia—. ¿Cómo estás? Te veo bronceado —preguntó queriendo obtener algún pequeño detalle del lugar.

La risa de Hoseok sonó por toda la habitación —Estoy bien amigo, si tu lo dices— respondió.

—Está bien, luego me dirás donde estás  pero al menos se que el clima es cálido.

—Es verdad, si es cálido muy diferente a Seúl. ¿Cómo está Jin? —cambió de tema sin disimulo.

—Molesto, pegó el grito al cielo cuando le preguntó a Chanyeol por ti y el solo respondió que no sabía nada de ti, dijo que te dará un par de golpes por mentirle —advirtió.

—Ay Namjoon, lamento haberles mentido pero que hubiera pasado si les decía que me iba— preguntó—. ¿Me hubieran dejado ir sin que les diga dónde? —inquirió.

Namjoon pensó un momento y le mostró una tímida sonrisa —Es verdad, Jin hasta te hubiera atado a una silla —aceptó con honestidad.

Los dos estallaron en risas por el comentario del moreno, sabían que el maquillador tenía un carácter un poco complicado, muy aparte de ser terco.

Namjoon evitó hablar de Yoongi, aunque no tenía nada que decir del rubio, este no había hecho ningún acercamiento para saber de Hoseok.

Hablaron unos minutos más y Nam se despidió rápidamente cuando escuchó la puerta del departamento abrirse, SeokJin no podía saber que hablaban porque si no, sería capaz de gritarle y romperle los tímpanos a ambos.

Se despidieron, prometiendo volver a conversar pronto. Pero Hoseok sintió un mal sabor en su boca, de pronto anhelaba escuchar noticias de Yoongi hacia su persona. Escuchar que el rubio estaba un mar de lágrimas y su vida un desastre por su partida serían algunas de las cosas que hubiera querido saber, pero Namjoon no pronunció su nombre.

Quizás el rubio aún no se daba cuenta de su partida, dos semanas habían pasado y de seguro Yoongi tenía trabajo por entregar y no salía para nada de su estudio, era lo más probable, el mismo se consoló ante su respuesta, ya que, si no era así, sabía que nunca le importó al rubio.

Lagrimeó al obtener esa conclusión, no tan absurda en su cabeza, pero aún válida en su corazón. Suspiró cansado.

꒰◌꒱

Yoongi miraba una película, se trataba sobre una familia con problemas y muchas diferencias, que al final resolvían todo y quedaban muy contentos. Una mueca se formó en su rostro, ya que aquello solo pasaba en las películas.

Los felices por siempre.

Yoongi nunca tuvo el cariño de su padre, es más, nadie en la casa lo tuvo. El siempre trataba mal a todos, pero con la diferencia que su hermano tenía el apoyo de su madre y el no tenía a quien apoyarse.

En su adolescencia conoció el amor junto a una compañera de su colegio. Ella se convirtió en su novia a la cual quiso demasiado, entregándole todo su cariño. Le había escrito varias letras de canciones como regalos o simples detalles, ya que todo era mejor con ella.

Los malos tratos de su padre y el favoritismo de su madre con su hermano no le afectaban, desde que se enamoró, su cabeza no dejaba de pensar en cierta chica hermosa y cuáles serían los detalles que le daría.

Habló con ella para presentarla con sus padres, pero ella se negaba, alegando que solo llevaban algunos meses y debían esperar.

La vida de Yoongi estaba bien, terminaría el colegio el siguiente año y ya estaba pensado que carrera escoger. Música.

Pero no todo sería color de rosa, ya que una gran decepción se llevó cuando un día encontró a su novia besándose con su "amigo".

Su mente se nubló y perdió los estribos a causa de la ira, cuando se dio cuenta que su amigo estaba en el suelo, con su rostro golpeado y con rastros de sangre.

Su "novia" gritaba con desesperación, queriendo parar la riña. Pero Yoongi solo se levantó y preguntó.

—¿Por qué? —una mezcla de rabia y dolor expulsó en esasdos palabras.

—¡¿Por qué?!— gritó—. Porque estoy harta de ti y tus estúpidos regalos, de tus malditas cursilerías. ¡Eres demasiado empalagoso y ya no te soporto más! —respondió con furiay veneno.

Yoongi solo observó el rostro rojo de la joven, estaba muy enojada pero no arrepentida por lo que dijo y eso le dolió. Tomó los pedazos de su corazón y los guardo en un lugar para siempre.

Demoró en sanar mucho ya que los podía ver en el colegio. Pero cuando ya había pasado 1 año y su corazón estaba sanando, recibió un nuevo golpe por parte de su ex. Escuchó en la radio una de sus canciones, aquellas letras que le regaló con tanto amor y aprecio, ella las había vendido a buen precio y puso que el compositor era anónimo.

Así que, cada vez que escuchaba la música en la radio, su corazón dolía. No pudo contarle a nadie, su hermano ya estaba en la universidad de otra ciudad, su madre cuidaba de su padre ya enfermo. Por lo que se encontró sólo, nuevamente.

Decidió no volver enamorarse y si lo hacía, no demostraría afecto, no quería que rompan su corazón.

Si todo fuera como en las películas, el quizás pudo haber tenido una mejor relación con su padre. Si de pronto su padre no hubiera sido tan estricto y autoritario, como por ejemplo al momento de decidir su carrera profesional.

Los desprecios y palabras denigrantes eran el pan de cada día, discutiendo por esa carrera tan absurda y poco reconocida. Yoongi no soporto más y un día tomó las palabras de su padre como una verdad, y esa noche de abril, después de una discusión terrible, el rubio tomó sus cosas y se marchó de la casa.

Su madre le dio un poco de sus ahorros para que pueda llegar a Seúl y se estabilizara hasta encontrar un trabajo, ella estaba queriendo compensar todos los errores que cometió con Yoongi, pero una suma de dinero depositada a su cuenta cada mes, no sanaban sus heridas.

Alejó esos tipos de pensamientos y decidió levantarse del sofá y seguir trabajando, habían pasado varios días y no lograba componer una canción que cause emoción y alegría, ya que su corazón estaba lleno de rencor y orgullo.

꒰◌꒱

Repito, no me he olvidado de esta historia. 

Begin Again • [YoonSeok]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora