Treinta y cinco.

87 5 0
                                    

En unos días iríamos a un parque de diversiones, sería mi primera vez en uno, estaba realmente emocionada.

“¿Te vas a subir conmigo a la montaña rusa?” me preguntaste.

“No lo sé, me da miedo la verdad, nunca me he subido a una.”

“Vamos, yo te cuidaré, súbete conmigo” y como si fuera una orden asentí.

“Está bien pero ¿vas a abrazarme?” pregunté no tan inocentemente.

“Claro que sí, es muy buen pretexto para hacerlo” Reíste.

No dejaba de pensar que en unos días estaría en una montaña rusa por primera vez, en tus brazos como siempre había querido, y sin interrupciones, sin nadie que nos juzgara, contigo. 

Algún día.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora