MI REINA

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Emma

Han pasado unas semanas desde que me reuní con Dante en su mansión, todo este tiempo hemos salido a citas como por ejemplo a cenar, cine, a caminar y las cosas que hacen las personas que se conocen.

Se ha comportado de los más atento y amable conmigo todos los días me manda un arreglo de rosas a mi departamento lo cual se me hace un detalle lindo para ser un mafioso.

Desde que acepte conocerlo, no hay una noche que no piense si estoy haciendo lo correcto, si no estoy tan loca como para salir con un mafioso y no cualquiera, si no el más peligroso de italia.

Pero lo pienso tantas veces que ya hasta me duele la cabeza, realmente me atrae Dante nunca me havia sentido tan tranquila con una persona a como me siento con el.

Cuando estoy con el me siento de alguna manera protegida, que estoy en casa cada ves que me abraza, se que puedo correr peligro a su lado, que algún enemigo o alguien que quiera desafiarlo me tome a mi como su punto débil.

El me ha asegurado que no corro ningún peligro, que tiene hombres cuidando de mi cada vez que salgo de mi departamento y que no cree que nadie se atreva a desafiarlo de esa manera ya que terminaría tres metros bajo tierra.

Hasta ahora no he conocido mucho de el, solo se que aparte de ser mafioso es dueño de hoteles, restaurantes, antros y de más, todo un empresario.

También se algunos gustos de el como que le gusta el color negro y rojo, ama la música clásica, le gusta practicar boxeo y que no muy le agradan los animales pero si quiere estar con migo tendrá que acostumbrarse a ellos por que ni loca dejare a Bella en la calle.

Realmente se muy poco a comparación de lo que el sabe de mí, pero la diferencia aquí es que yo me esfuerzo por conocerlo y el me mando a investigar lo cual me sigue pareciendo una locura pero en fin que puedo hacer yo con eso.

En estos momentos me encuentro saliendo de mi trabajo para salir hacia mi departamento, subo a mi camioneta y arranco hacia mi hogar.

Por el espejo retrovisor puedo ver como la camioneta de los hombres que mando Dante para mi seguridad me siguen hasta llegar al departamento.

Una vez llego a este estacionó mi camioneta y bajo para subir. Cuando estoy frente a la puerta de mi departamento entro y enciendo las luces de la sala y cocina, checo la hora en el reloj que hay en la pared y veo que son las 9:13 pm, si que salí tarde de mi trabajo.

Mañana es fin de semana puedo ir a ver a Dante ayer no lo pude ver ya que tubo que arreglar un asunto de un trato con un hombre, no me dijo mucho pero realmente no quiero saber como tortura y mata a la gente, solo en pensar en eso se me eriza la piel.

Camino hasta la cocina para tomar un poco de agua ya que estoy sedienta, cuando llego tomo un vaso abro el refrigerador saco la jarra con agua fría y me sirvo, dejo la garra en su lugar y tomo de mi agua la cual me refresca la garganta una vez pasa por esta.

Dejo el vaso en el lavabo para caminar hasta mi cuarto donde voy a tomar una ducha para poder alistar me he ir a ver a Dante.

Entro a mi cuarto y me percato de que Bella esta acostada en mi cama durmiendo sonrió y camino hasta donde esta, me acuesto a su lado para darle caricias en su pequeña cabeza.

-Hola hermosa mamita ya llego- digo y esta ronronea y se pone boca arriba para que le acaricie la panza lo cual hago y sonrió.

Me levanto de la cama y camino hasta llegar a mi armario de donde saco mi ropa que me pondré.

Me decido por usar un vestido blanco ajustado al cuerpo con los hombros descubierto y que me llega hasta la mitad de los muslos y tiene una pequeña aventura en la pierna izquierda.