Escenarios GOJO SATORU

« Hechizo »

•✨•✨•✨•✨•

Una risa divertida salió de mis labios. Me reía desesperadamente, como una loca, llamando la atención de todos los que estaban en la cafetería. Pero eso no me importaba. Solo me importaba lo que sentía.

— ¿¡Como dices!? ¿Gojo Saturo? ¿El chamán más fuerte? — tire mi cabeza hacia atrás para soltar una carcajada, que para los hombres del lugar parecía encantadora, sexy y tierna — Mmm... Explícate mejor Geto. — lo mire divertida — ¿Como que sellar a Gojo Satoru porque no podemos derrotarlo?

— ______ Hanaka. — me llamo con tono serio —

— No me subestimes, Geto. — lo mire con frialdad — Sabes que odio que lo hagan.

Empecé a mirarlo muy furiosa al hombre que tenía enfrente, mis ojos rojos se iluminaron mostrando lo muy enojada que estaba, y a su vez el gran poder maldito que tenía.

— Me gustaría que no hicieras una escena aquí. — soltó Geto mientras me miraba con seriedad —

— Mmm... — sonreí maliciosamente — ¿Escena? ¿Te refieres a esto?

Volteé, mire a cada hombre a los ojos de la cafetería quiénes me estaban mirando, estos cayeron en mi hechizo maldito y encantador. Mis ojos rojos brillaron al obtener tanto poder, tanto control de los hombres estupidos que cayeron ante mi con tan solo mirarlos.

Mis ojos rojos eran hipnotizantes, una vez que los miras caes ante ellos, caes ante mi, entro en tu mente y puedo ordenarte lo que quiera, en pocas palabras, si activo mi técnica maldita, miras mis ojos puedo controlarte a mi manera.

Ese es el poder maldito del clan Hanaka, hechizar, controlar y maldecir. Lastima que el clan Hanaka fuese asesinado por los grandes hechiceros, estos tenían miedo del gran poder maldito que este clan tenía, decían:

« Es un poder del infierno, el mismísimo diablo les dio ese poder para matarnos a todos. » « Debemos exorcizar al clan Hanaka »

Que lastima que no pudieron acabar conmigo, yo heredé todo el poder todas las maldiciones del clan Hanaka. Toda mi familia murió a manos de esas personas cobardes que se hacían llamar Hechiceros. Y una mierda, tenían miedo y la forma más rápida de acabar con ese miedo fue asesinando a un clan que no tenía la culpa de tener un poder maldito tan poderoso.

Eran unos cobardes.

Yo soy, ______ Hanaka, el último miembro del clan Hanaka.

Al ya tener control de todos los hombres que cayeron ante mi con tan solo mirarme les di una orden, conectando con sus estupidos cerebros les di la orden de hacer que explotaran, llenando toda la cafetería de sangre y de gritos desesperantes de todas las mujeres que empezaron a gritar como locas al ver a sus chicos muertos sin cabeza, estas no duraron en salir corriendo.

— mire a Geto sonriente — ¿No fue divertido? — sonreí maliciosamente — Me encanta el rojo, es el color de la sangre, también de la seducción.

— Ahg. — gruñó — Llamaste demasiado la atención. Menos mal que no fuimos a un restaurante de lujo. — puso mala cara al ver el cuerpo de casi todos los hombres tirados por el suelo sin cabeza —

— Hubieses pagado tu. — bromee — Dime Geto, ¿Cuantos dedos de Sukuna equivalen mi fuerza? — sonreí maliciosamente —

— Siendo sincero contigo, unos 10 dedos o 15. — respondió —

— Eso me enorgullece.