te necesito - 𝗰𝗮𝗿𝗿𝗲𝗿𝗮𝗮𝗮

04 - Una cita que sale mal.

–Tengo un dos por dos en un restaurante, ¿Vamos?– dice Martin entrando a mi pieza.

–¿Eh?- decimos yo y rodri a la vez.

Yo estaba jugando un juego de internet en mi computadora y Rodri estaba acostado en la cama con su celular.

–Lo que escucharon, ¿Vamos?–

–Yo no tengo problema..– dice rodri y me mira. –¿Y vos?–

Que me hable es raro, pero, por fin Martin hace algo bien.

–Emm, si, vamos– digo.

Miró de reojo a rodri y él estaba con una sonrisa.

–Bueno, en un rato vamos, tenemos que estás ahí a las cinco y media, ¿Ok?–

Yo y Rodri asentimos.

Martin salió de la pieza.

–Bueno.. yo voy a bañarme– me levanto de la silla.

Paso por al lado de Rodri y él me agarra de la mano.

Frunzo el ceño.

–Vení, quiero hablar con vos– dice él mientras se sienta en la cama.

Yo confundida me siento al lado de él.

–Ayer Martin hablo conmigo y me dijo algo.. que me dejó confundido–

–¿Por eso me hablas?...– rodrigo me estaba por contestar pero lo interrumpo. –¿Que te dijo?–

–Me dijo que vos seguís enamo..– mi celular empieza a sonar.

–Perdón– agarro mi celular.

Era Fernando, cortó la llamada y vuelvo a mirar a rodri. 

–Seguí..–

–¿Segura? ¿Quien te llamo?– dice Rodri mirándome.

–No importa, ¿Que te dijo Martin?–

–Bueno, me dijo que vos estás enamo..– vuelve a sonar mi celular.

–Ay..– era otra vez fernando, cortó la llamada otra vez. –Seguí–

–Te está llamando por segunda vez, ¿No es importante?– Rodri frunce el ceño.

–No, siempre me llama y es para lo mismo, seguí, no importa–

–Bueno, vos seguís enamora..– vuelve a sonar mi celular.

Rodri suspira.

–Atende, no te va a dejar en paz..–

Suspiró y atiendo la llamada.

–¿Que querés?– digo cansada.

–¿Tenés planes hoy?–

Rodeó los ojos.

–Si–

–¿Con quién? ¿Y qué vas a hacer?–

–Chau– cortó la llamada antes de que él diga algo.

–¿Quien era?– dice rodri. –¿Fernando?–

–No..– bajo mi mirada.

–No me mientas..– lo miró.

–No importa rodri, yo te quiero hacer una pregunta..–

–A ver, decime–

–¿Que era lo que me querías decir?–

–Ah.. ya no importa– dice desanimado. –Nos tenemos que preparar para ir al restaurante– dice levantándose de la cama.

–¿Y me vas a dejar con la intriga?– él me mira. –No me gusta– me cruzo de brazos.