|05|

798 127 40
                                    

Yunho y Jongho se sintieron aliviados una vez que llegaron a su casa, por fin estaban en paz y sin nadie haciéndoles preguntas que les incomodan.

—¿Cual es el afán de todos por preguntar cuando tendremos hijos?— El alfa se encogió de hombros mientras se quitaba su corbata— Es que acaso es obligatorio tener hijos cuando ya estamos casados.

—Supongo que para ellos es así, en algún momento ya nadie nos va a preguntar por eso, aunque está el detalle de la marca— Jongho se cruzó de brazos y abulto sus labios, acción que hizo reír al menor— Tengo la duda ¿Planeabas tener hijos con tu ex?— El menor menor ladeo su cabeza— Tenían todo planeado ¿Eso también?

—No te importa— Murmuró para después abrazar sus piernas.

—Sí los tenías— El menor limpio una lágrima que se deslizó por su mejilla— Dime algo, el tiempo que estuvimos fuera ¿Estuviste llorando?— Jongho asintio y lloro con fuerza.

Yunho se conmovió por el omega así que lo abrazo, pues sentía que por su culpa recordó todo lo de su ex y pues sería feo ignorarlo. Pasaron media hora en la que el mayor no soltó a Jongho hasta que se calmara por completo, incluso lo había comenzado a mimar en un intento de calmarlo.

—Lo siento— Murmuró cuando ya no lo escucho sollozar, aunque si estaba soltando pequeños hipidos— No debí mencionar nada.

—No debiste— Afirmó— Pero gracias por quedarte aquí— Balbuceó muy avergonzado, no iba a negar que se calmó gracias a la presencia del alfa, pero no iba a decirlo porque le daba vergüenza. Yunho rió y continuo mimandolo— Es extraño.

—Deja de ser un amargado por cinco— Jongho alejo un poco para mirarlo— No es mentira.

—Idiota— El castaño sonrió.

Cuando Yunho de igual forma lo miro directamente a los ojos, ninguno apartó la mirada, simplemente se quedaron ahí viendo el brillo del contrario. No lograban entender que ocurría, tal vez se debían a los siete meses que habían estado conociéndose o tal vez era sólo el ambiente que se formó por la vergüenza y la culpa por el suceso anterior.

Y la verdad era que muy dentro de ellos querían que ocurriera, sólo que no se sentían listo, al menos no para descifrar lo que iba a ocurrir.

Yunho se encorvó un poco para poder estar a la altura del rostro de Jongho y este no se apartó, el especie entre sus labios estaba por desaparecer si alguno no reaccionaba en ese momento, ambos parecían estar en un especie de trance, y finalmente sus labios rozaron dando inicio al principio de algo bueno y lindo o a algo incómodo y vergonzoso. Lo que fue un roce, se convirtió en un beso sin destino alguno, ambos se fundieron en una experiencia nueva y jamás conocida, sería incómodo si alguno se llegará a arrepentir de aquella decisión que tomaron fuera de sus cinco sentidos.

La única razón por la decidieron separarse era para recuperar el aire, en ese momento Jongho se oculto en el pecho del mayor y este sólo sonrió por lo tierno que le pareció.

—¿Y que se supone que deberíamos decir ahora?— Preguntó Yunho queriendo desaparecer el silencio, pues no le gustaba.

—Ni idea— Murmuró el menor— No creí que nos llegaríamos a besar, al menos no cuando nadie nos estaba viendo.

—Bueno creo que no cumplimos con eso de no hacer algo que hiciera que este se volviera incómodo— Jongho asintió— Pero si lo pensamos ninguno se detuvo.

—¿Estás hablando enserio?— Se alejó de él olvidando que el comentario anterior lo hizo sonrojar.

—Estas rojito— Pellizco sus mejillas— Eres tierno.

—No lo soy— Quitó las manos del mayor de sus mejillas—¿Esto no te incómoda?

—Bueno aún cuando es diferente contigo, pues ya he tenido un par de experiencias así— Jongho negó— Mejor descansemos.

—Aun no nos cambiamos— Yunho miro su atuendo, notando que seguía en traje y el menor igual.

—Cierto— Se levantó de la para buscar su pijama y salir.

Jongho por alguna razón estaba sonriendo, el alfa de cierto modo era extraño manejaba las situaciones incómodas muy bien.  Al notar que estaba sonriendo con tonto, sacudió ligeramente su cabeza y se levantó para cerrar con seguro y cambiarse, pues así era, Yunho se salía y se cambiaba en el baño, y él se encerraba para cambiarse.

[…]

Era extraño para ambos, en las dos semanas que llevaban viviendo juntos jamás habían pasado el límite que se pusieron en la cama, Yunho tenía su lado y Jongho el suyo, pero esa mañana al despertar estaban en media de la mañana y para colmo abrazados, como la noche anterior el alfa sobrellevó la situación para que no estuvieran incómodos.

—Entonces tu celo cae exactamente el viernes— Jongho asintió— Entonces Gahyeon no debe estar aquí.

—Menos mal pensaste en ella— El castaño sonrió—¿Cómo le harás?

—Creo que el sábado Mingi los visita y ella los domingos— Murmuró— Les puedo dar cuatro días para que los visiten y así ella no sepa que no pasamos juntos tu celo.

—¿Y así le harás en el tuyo?— Yunho asintió.

—Bueno ya que ideamos este plan, iré a buscarlos— El menor sonrió— Ya vuelvo.

—Claro— Musitó y continúo leyendo que era lo que hacía antes de que Yunho entrará y comenzarán a hacer un plan para su celo.

Nuevamente fue interrumpido por el suave golpeteo de la puerta, dió permiso para que pasarán.

—¿Que necesitas, Hyunjin?

—Alguien le trajo una carta— Jongho alzo una ceja, se levantó de su lugar para tomarla, le agradeció y le pidió que se retirará.

Era extraño que alguien le enviará una carta, porque para empezar no tenía amigos y sólo su familia sabía dónde estaba viviendo, la abrió quedó perplejo al ver de quién venía. Dongsik. Se fue a la cama para leerla y ver el motivo de que haya dado una señal de vida, que siendo no le hubiera gustado recibir.

—¿Jongho?— El menor alzó dejo de leer y se levantó para abrazar  a Yunho—¿Ah?¿Pasó algo?

—Dongsik— Balbuceó. Yunho siguió sin comprender pues en todos esos momentos desde que se conocen, nunca había mencionado ese nombre.

—¿Quien?

—Mi ex— Siguió balbuceando.

El alfa sin vergüenza alguna lo cargo, Jongho enredó sus piernas sobre su cadera. Camino a la cama para sentarse en esta y tomar la hoja que habitaba en esta, la leyó sin importarle que fuera íntima, una carcajada se le escapó al terminar de leerla.

—Despues de siete meses regresa para decirte que se deben ver, ni siquiera te lo pide... No deberías estar llorando, así como dijo que no valía la pena estar contigo únicamente porque te casarías a la fuerza, no vale la pena llorarle a alguien como él, no llores.

—¿Por qué tiene que volver?— Yunho sonrió.

—Seguramente se dió cuenta todo lo que perdió, espero que no pienses en ir a verlo, por favor te terminó por casarte ¿Que tanto cambia ahora que estás casado?— El menor lo miró— Pero si quieres ir bueno ¿Quien soy yo para impedirlo?

—Y-yo no lo sé— El alfa limpio con sus pulgares las lágrimas restantes.

—¿Que no sabes?¿Si quieres ir a verlo?— Jongho asintió— Como tú veas, si quiere ve— Le sonrió y se tomó la libertad de besar su frente, haciéndolo sonrojar.

—¡No hagas eso!— Oculto su rostro por la vergüenza que sentía en ese momento.

—Si eres tierno— El menor negó sin descubrir su rostro.

Yunho continuó molestando al menor para distraerlo del tema de su ex y ya que después pensará que iba a hacer.








Da miedo cuando empiezo a actualizar seguido (。ノω\。)

⬭. ֶָ֪ 𝗟𝗲𝘁 𝗠𝗲 𝗟𝗼𝘃𝗲 𝗬𝗼𝘂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora