⬭. ֶָ֪ 𝗟𝗲𝘁 𝗠𝗲 𝗟𝗼𝘃𝗲 𝗬𝗼𝘂

|06|

Después de una extensa charla con Yunho dónde le dió cientos de motivos para no ir y unos cuantos para si ir, se decidió por no ir pues no había una razón por la que estuviera comprometido a ir, a parte de que no se sentía muy bien pues estaba por entrar en celo.

—Aqui está el té— Jongho le sonrió al mayor.

—¿Gahyeon ya se fue?— Hongjoong asintió— Menos mal, ¿Y Yunho?

—Aun no, de igual forma ya están arreglando el lugar donde dormirá los siguientes cuatro días— El menor lo miro para después darle un sorbo al té.

—Todo esto se me hace extraño y no se porqué— Murmuró.

—Tal vez porque es una casa distinta— Jongho asintió— Debo llevar un par de cosas a dónde se quedará.

Se levantó de la cama para ir al closet de Yunho y sacar un par de prendas para los siguientes días, Jongho sólo se concentraba en terminar su té.

Sería la segunda vez que pasaría su celo solo y así sería los siguientes años, aunque su madre le había dicho que no pasaba nada si terminaban juntos en un celo pues con eso habría una marca asegurada, pero claro le dijo que eso no iba a ocurrir ni en sus mejores sueños, Yunho no le atraía.

Hongjoong le dijo que ya volvia pues tenía que ir a dónde Yunho se quedaría, tal vez sería raro no estar con el alfa por cuatro días pues aún se distraía con Hongjoong, mayormente era el alfa quien lo entretenía más, pero era lo mejor para que no pasará nada.

Escuchó unos cuantos gritos desde la primera planta de la casa, lo cual le resultó extraño pero no podía salir de la habitación por su seguridad, o eso le había dicho Yunho antes de que se fuera a su trabajo.
No fue hasta que escuchó a Hongjoong fuera de la habitación gritándole a alguien que no podía entrar, pero aún así esa persona entro a la habitación dejando perplejo a Jongho.

—Dongsik— Murmuró—¿Que haces aquí?— No sabía cómo había hecho para atinarle a la habitación, aunque pudo ser suerte.

—Necesitaba verte— Respondió y se intento acercar al menor pero este se alejó.

—¿Después de siete meses?— Musitó— Después de haberme dicho que no valía la pena estar conmigo porque me casaría a la fuerza, después de terminar cuatro años de relación, decides venir porque necesitabas verme— Sus ojitos acumularon lágrimas— Tomaste tu decisión, Dongsik, decidiste no seguir conmigo.

—Me equivoqué— Jongho negó.

—No vengas con esa patética excusa de me equivoqué me dejé llevar, porque no te la creeré, ahora vete de mi habitación y de la casa— Aún cuando tenía el sentimiento de querer llorar, se mostró firmé para correrlo—¡Vete!

—Jong— El mayor se acercó para acunar el rostro del omega— No es seguro que entes en celo en esta casa.

—No es seguro que estés en mi habitación siendo que sabes que entraré a celo— Bueno su aroma lo delataba y no podía negar lo que era más que evidente.

Jongho sabía cómo era su celo y mayormente él no era conciente de lo que hacía pues su lobo salía a luz para encargarse de todo, y que un alfa estuviera en su habitación y tocando su rostro no era nada nuevo, le avergonzaba ese lado de él pero no podía evitarlo, antes de Dongsik tuvo muchos accidentes por ser terco y salir cuando no debía, después sus padres lo encerraban los cuatro días que su celo duraba, ya cuando conoció a Dongsik se controló un poco y los paso con él aunque sus padre no estuvieron de acuerdo.

—Dongsik— Musitó.

El mayor lo miró y Jongho se vio obligado a mirarlo de igual forma, si cuerpo comenzo a calentarse su celo estaba cada vez más presente y las caricias en sus mejillas no le ayudaban en nada, y mucho menos la presencia del alfa.

Pero antes de que pudiera ocurrir algo de lo que claramente se iba a arrepentir al estar conciente, alguien los separó. Jongho jadeo por la sorpresa de aquel acto y por el aroma de Yunho. El alfa más alto saco al otro de la habitación del menor, Hongjoong fue testigo de aquello y no lograba comprender si Yunho estaba molesto porque ese alfa entro a su casa, porque estaba en la habitación de Jongho o por celos.

—Encargate muy bien de Jongho— El rubio asintio

[...]

Yunho debía admitir que era aburrido sin la presencia del omega, aún cuando era de pocas palabras y que mayormente se burlaba de él, se la pasaba bien. Escuchó que tocaron la puerta de la habitación donde se encontraba, era Hongjoong.

—¿Pasó algo?— El rubio negó— Deberías estar cuidando a Jongho.

—Y lo estoy haciendo, pero tengo mis necesidades— Yunho sonrió— Haz está muy raro desde que llegaron.

—¿Raro en que forma?— El omega sonrió.

—Aun no lo sé, pero se que estás raro y sé que se debe a Jongho— El castaño nego— Yo sé que sí, ¿Haz pensado en hablar con Gahyeon?— Preguntó antes de volver a su trabajo.

—¿Cómo de que tendría que hablar con ella?— Hongjoong sonrió.

—Ella cree que eres su alfa, que están destinados a estar juntos, por eso no soporta a Jongho— El alfa alzo una ceja sorprendido por la reciente revelación— Eres lento, debiste saberlo desde el inicio.

Bueno ahora mucho tenía sentido, si tal vez era muy despistado pero entre fingir estar casado, ayudar a Jongho a sobrellevar el matrimonio, el trabajo y la presión de su padre, no te tomaba el tiempo de ver qué ocurría en la casa.

—Esto también es difícil para Jongho— Yunho asintio.

—Lo sé, trato de que sobrellevar esto, todos sus planes se arruinaron por una decisión que tomaron por él, trato de que se sienta cómodo con todo lo que pase... Pero también es difícil para mí.

—Ambos deben ayudarse a sobrellevar esto, es un inicio que se lleven bien y no sean distantes— Yunho tallo su rostro con evidente frustración, necesitaba que las vacaciones llegarán sólo así se relajaría un tiempo— Ya deberías presentarle amigos, debe ser muy aburrido no tener nada que hacer.

—Lo haré, ve con Jongho y cuídalo— La forma en que pedía que lo cuidará se llegaba a escuchar con desesperación y preocupación, como si temiera de que algo llegará a pasar durante su celo.

—Tengo todo bajo control, no te preocupes— Le sonrio y salió del lugar.

Yunho soltó un alargado suspiro, serían los cuatro días más aburridos de su existencia, y para acabarla trabajaría y Jongho no podría ayudar a no sentirse tan abrumado con tanta cosa que pasa. Ambos eran un soporte para el contrario y aún no lograban verlo aunque era más que evidente, ambos desde que se conocieron se mostraron seguros de apoyar al otro en lo que se pudiera y hasta el momento no se daban cuenta.

Tal vez más tarde cuando ya no hubiera vuelta atrás para los sentimientos que se colaban poco a poco en su apoyo.