Ella amaba a Choi Beomgyu, su mejor amigo de toda la vida. Él no quería ilusionarla.
Su relación se basaba en cumplir las reglas que Hanami se cansó de seguir.
Beomgyu y Hanami se ven atrapados en una aventura llena de emociones y sentimientos por...
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Esas tres palabras «Por favor perdóname» fueron suficientes para que Hanami quisiera ayudar más a Beomgyu, a sacarlo de todos esos líos en que estaba metido así le costara ser ella quien los pagara, solo quería a su amigo lejos de todas esas situaciones que lo mantenían en peligro.
Estuvo planeando durante días palabras, frases e incluso discursos para hablar con Suyeon, pondría toda su fuerza de voluntad hasta lograrlo.
Los últimos días desde el viaje a Ansan fueron increíbles para ellos como un grupo muy cercano de amigos, solían ahora ir los tres juntos por el sendero y algunas veces los seis chicos incluida la pareja que felizmente demostraban su amor sin miedo.
Yeonjun felizmente caminaba con Hanami quien parecía con más energía de lo normal, era obvio, pues en unos momentos más estaría por pedir la cosa más difícil a la chica problemática del instituto, debía tener ánimos de algún lado. Ella veía los árboles que poco a poco recuperaban su color por la mitad de la primavera en curso, su mano iba rodeando el brazo del pelirosa para no caerse, sonrió al mirar detalladamente su perfil tornándose un sonrojo en sus mejillas por su cercanía. Choi Beomgyu que caminaba en silencio, lo presenciaba todo con un estado de ánimo nada agradable.
—Yeonjunnie. —Lo llamó haciendo que la mirara—. Te quiero mucho, ¿lo sabías?
Beomgyu abrió sus ojos al escucharla y verla ser tan tierna con él, mientras que el muchacho atentado se sonrojó deteniendo su andar y con ello el de todos para mirarla mejor. Hanami lo tomó de la mejilla con su mano suelta apreciando cada detalle de su rostro, un chico muy lindo que robaba el corazón de muchos.
—Lo sabía, Hanami
Su respuesta hizo que ambos mantuvieran esa frescura en sus rostros, la peliazul aprovecharía la situación a no ser que su mejor amigo carraspeó en voz alta dando entender que seguía ahí. Ambos voltearon a él recobrando su postura, un momento muy vergonzoso.
—Te lo advertí una vez, Yeonjun. No quiero problemas contigo de nuevo.
Se limitó a decir reanudando su caminar en dirección a la escuela, le causaba esa terrible sensación de irritación que esperaba realmente no fueran celos como creía, solo no quería verla con él, se engañaba.
Continuaron en un rotundo silencio hasta llegar a su destino. Los alumnos viajaban a sus aulas de un lado a otro discutiendo distintos temas, Hanami pareció entrar en modo automático al llegar a su salón, su mente se nubló de preguntas y cosas por razonar, situaciones tras situaciones y sus posibles soluciones, no se quedaría solo de brazos cruzados observando como la pelirroja intentaría humillarla, y aunque así fuera tenía un recurso, la fuerza que su cuerpo portaba. La violencia no arreglaba nada, pero por lo menos le daría la merecida paliza a esa chica que hacía mucho la tenía harta.
Su maestro caminaba por toda el aula explicando un tema al cual Hanami no le mostraba interés, todos sus sentidos estaban puestos sobre las estrategias, nada era más importante que sacar a su amigo lo más antes posible.