CAPÍTULO 15: "PROBLEMAS"

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Shen Jiu, se encontraba sentado frente a la pequeña ventana de su habitación, en donde el silencio ya había dejado en claro cuántos suspiros pesados habían salido de los labios del maestro.

A pesar de ser un maestro de gran poder e inmortal, Shen Qingqiu, sentía que un estrés le comía la nuca.

Los recuerdos de las horas pasadas pasaban por su cabeza una y otra vez.

Todavía no lograba comprender como Luo Binghe había sido capaz de derrotar a uno de los demonios más fuertes en solo tres movimientos.

¿En qué momento había aprendido esos movimientos?

¿Cuándo y porque se había vuelto tan dedicado y fuerte en el cultivo?

¿No habían sido sus propias manos las que le habían pasado un manual defectuoso?

La luz de la luna caía sobre su rostro, mostrando una silueta hermosa, pero intimidante para cualquiera que posara sus ojos sobre él. Bien dicen que la belleza es peligrosa.

De pronto alguien toco la puerta de su habitación, recordándole a Shen Jiu, que ya era la hora de la cena.



—Maestro, le he traído algo de comer. —Ming Fan, se acercó cauteloso, ya que a pesar de que Shizun solo había posado un segundo la mirada sobre él, podía notar que algo molestaba a su maestro.

Sin muchos rodeos, Shen Qingqiu decidió investigar.



—Ming Fan, quiero ahora mismo que me menciones las cosas de importancia que debería saber que han pasado en estos tres años. —Shen Jiu, se giró directamente hacia él, notando como las manos temblorosas del joven casi derramaban el té.



—Este discípulo no cree que sea conveniente en este momento...—El muchacho se arrodillo a solo tres pasos de su maestro, disculpándose por su atrevimiento.



— ¿Por qué?—dijo Shen Qingqiu, conteniendo su molestia. "¿Ahora todos se creen con la autoridad para desobedecer?"



—Porque este discípulo cree que el maestro debe descansar. —Aunque Ming Fan podía ser algo estúpido, tenía algo bueno...Era sincero.

Shen Qingqiu, lo medito unos segundos.

Si Ming Fan, quien era tan leal a su maestro decía algo como eso, entonces era porque ciertamente las cosas que tendría que contarle eran no solo graves, si no que sacarían la furia dentro de él.

Aun así, mientras más lo pensaba, peor era.

Incluso si no le contaba nada, probablemente no podría dormir por la curiosidad.



—Solo habla de una vez—Dijo con frustración.

Ming Fan, cerró los ojos un momento con fuerza, tratando de enumerar las cosas.

Su corazón comenzó a latir fuerte por los nervios de la posible reacción de su maestro.



—En realidad no son muchas cosas...Como sabrá el líder de secta no se encuentra, pero eso no es de suma importancia, si no las cosas sociales entre los discípulos...—Ming Fan, suspiro con cansancio. —Desde que Shizun se marchó a reclusión, como ya habrá notado, Luo Binghe cambio de cierta manera...



—Si lo note... ¿Pero qué tiene que ver él con los discípulos? ¿Otra vez se llevan mal?—Shen Qingqiu dejo de mover su abanico, prestándole toda la atención al muchacho.

Ming Fan, negó con la cabeza.



—Al contrario...Después de que el saliera del castigo impuesto la última vez por usted, Ning Yingying robo varios de los manuales de su biblioteca personal para dárselos a Luo Binghe. Nadie se percató de lo sucedido hasta que notamos que Luo Binghe ya había aprendido todo lo que había en esos libros...—Ming Fan hizo una ligera pausa al percatarse como su maestro por primera vez mostraba tantas expresiones distintas sobre su rostro. Su voz comenzaba a temblar un poco ante el miedo de ser castigado y responsabilizado por estos actos. Aun así, quiso proteger a joven muchacha...—Le pido al maestro que no castigue a Ning Yingying, este discípulo aún no sabe por qué lo hizo, pero cree que fue por manipulación de Luo Binghe.



— ¿Pero eso no es lo más grave verdad?—Shen Qingqiu se levantó de manera brusca, tanto que dejo caer los platillos de comida que estaban en la mesa. — ¡Responde!—

El joven discípulo dio un ligero salto por el susto.



—N-No...Al mismo tiempo que sucedía esto...Se esparcieron ciertos rumores...—Ming Fan, sentía que sudaba frio, ¡Ahora si cortarían su cabeza!—Se comenzó a decir que Luo Binghe había mentido con respecto de dormir con usted la última vez, p-porque estaba enamorado de usted y porque se había enterado que el gran maestro no pasaría la reclusión solo, sino con el tío marcial Liu Qingge...



— ¿Qué?...Que estupidez...—Shen Jiu por primera vez en su vida quería jalarse el cabello.



—Esto...E-Esto llevo a que el rumor se hiciera más grande, entonces se terminó por decir que Luo Binghe también se había enterado que Shizun y el tío marcial tenían una relación, es por ello que deseaban pasar tiempo a solas...—Ming Fan, abrió los ojos al sentir como el abanico de Shen Qingqiu rozaba su cuello. — ¡Por supuesto todo esto es mentira!



—Nunca había escuchado tantas estupideces salir de una misma boca. —Su voz sonó tan áspera que incluso cierta persona que escuchaba a través de la puerta sintió como los vellos de sus brazos se levantaban. — ¿No me digas que esto se esparció hasta las otras cumbres?

Ming Fan, trago grueso.

Un leve asentimiento fue dado y la abofeteada que se le dio fue tan fuerte que resonó en el lugar.



— ¿No se supone que tú eres el responsable de evitar este tipo de cosas?—Shen Jiu, se dio media vuelta para volver a sentarse en el mismo lugar de antes, sin observar los ojos lagrimosos de su discípulo.

Ming Fan, volvió a asentir varias veces, pegando su frente contra el suelo, aclamando por el perdón de su maestro.



— ¿Entonces, que más?—Insistió Shen.



—D-Después de eso...Todos sintieron cierta lastima por Luo Binghe, por lo que cuando se hizo más fuerte, casi todos los discípulo comenzaron a admirarlo...—Ming Fan temblaba por lo que diría a continuación. —Con el pasar del tiempo, los discípulos pasaron a estar del lado de Luo Binghe, dejando mal a Shizun...Por lo que prácticamente incluso si ahora usted les ordenara algo, buscarían la opinión de Luo Binghe.



— ¿Dices que yo soy el malo? ¿¡Que ese mocoso tiene más autoridad que yo!?—Shen Jiu, no podía creerlo.

¿Qué tipo de mierda era esta?



— ¡No lo digo yo maestro! ¡Yo jamás iría contra usted—Ming Fan volvió a golpear su frente contra el piso unas cuantas veces.



La rabia fue tanta dentro del cuerpo de Shen Jiu, mezclándose con el estrés que golpeaba detrás de su nuca, que su cuerpo termino desplomándose contra el suelo.

Ahora si Ming Fan se sentía aún más perturbado, queriendo que la tierra se lo tragase.



¡Había matado a su maestro! ¡Probablemente su corazón había explotado del enojo!

El Orgulloso camino del villano escoriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora