d i e c i s i e t e

51 5 3
                                    

Hace tiempo que estaba en la habitación de Soomin cuidando de ella, así que estaba conversando un poco tratando de hacerle recordar un poco. Ya habían pasado varios días desde que estaba en el hospital

—¿Entonces a que edad nos conocimos?

—Yo tenía como unos 8 años y tú tenías unos 5 años, en ese entoces eras muy pequeña y me llamabas Kookie— sonreí recordando aquellos tiempos—

—¿Entonces ahora tienes 22 años?— asentí—

—Si llevamos 14 años de conocernos y siempre celebramos nuestro aniversario de amistad, aunque últimamente no querias hacerlo— hice una mueca—

—Lo siento— dijo mientras tomaba mi mano— Intentaré recuperarme pronto para que podamos festejar de nuevo, como los buenos amigos de siempre— me sonrió—

—No te preocupes, después podremos recordar por ahora solo concentremonos en que se mejore tú brazo y tú pierna— señalé ambas ya que el brazo lo tenía con un cabestrillo y la pierna la tenía enyesada—

—Oye— le miré atento— ¿Crees que podrías traerme algo de comer?, la comida del hospital no me sabe buena y necesito comer otra cosa

—¡Claro!, te traeré algo delicioso solo espera a que llegué tú papá

—Estoy aquí— dijo el señor Ko mientras entraba a la habitación—

—¡Oh!, llega justo a tiempo

—¿Justo a tiempo para que?

—Soomin dijo que quería comida de a fuera, asi que traeré un poco— dije mientras me levantaba de la silla—

—Aah, me hubieran dicho y yo la hubiera traído

—No es necesario señor Ko, yo iré y mientras usted le cuenta a Soo como fue su infancia

—Bueno, esta bien

—Solo no demores mucho por que de verdad que tengo hambre— dijo tocando su estómago— Por favor Kook— me sonrió—

—Trataré de no tardar tanto Soo— asintió y salí de la habitación de Soomin—

Me subí a mi coche y conduje al restaurante que era el favorito de Soo, a donde ibamos a comer después de que salía de la secundaria. Pedí su plato favorito y pedí uno para mi y otro para el señor Ko, después de pagar todo me volví a dirigir al hospital, siempre tratando de que no vieran que traía comida de contrabando.

Estaba por entrar a la habitación, pero la conversación de Soomin con su padre me detuvo en la puerta.

—Sabes que me da mucho gusto tenerte aquí, ¿Verdad?

—Pero si estaba aquí antes, ¿No?

—Aah bueno si, pero te habías ido a otro país

—¿A otro país?, entonces hubo alguna razón por la cual volví

—Si, pero bueno no te esfuerces por recordar ahora— escuché un suspiro de su parte— Solo disfruta el tiempo y después vendrán los recuerdos por si solos

Toque la puerta para poder entrar y se escuchó un “Pase” de parte de el señor Ko.

—Traje la comida, esta caliente— dije mostrando las bolsas—

—Gracias a dios— dijo levantando las manos— ¿Qué trajiste?

—Fui a tú restaurante favorito y traje tú comida favorita— saque la comida y la puse frente a ella—

—Gracias por contrabandear la comida— sonrió—

¿Hay dos como tú? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora