★Cʀɪᴍɪɴᴀʟ☯︎ | Cʜᴀᴇsᴏᴏ x Jᴇɴʟɪsᴀ G!P

𝘊𝘢𝘱𝘪𝘵𝘶𝘭𝘰 𝘊𝘢𝘵𝘰𝘳𝘤𝘦 -𝘊𝘰𝘯𝘧𝘶𝘯𝘥𝘪 𝘢𝘮𝘢𝘳 𝘤𝘰𝘯 𝘲𝘶𝘦𝘳𝘦𝘳-

Maraton 1/2

Era la hora de verme con Dahyun.

No estaba preparada porque ella también era amiga de Irene, y digo ERA porque pasaron a odiarse por todo el daño que mi ex-novia me causó. Al graduarme no las volví a ver a las dos y después de tantos años volver a verla me causaba nervios.

Llegué al parque como ella me lo indicó.

Me senté en una banca a esperar que ella llegara, hasta que una chica de cabello azul se acercó a mi.

—¿Rosé?— preguntó y supe que era ella
Podría reconocer ese color azul que tenía a pesar del tiempo sin vernos.

—D-Dahyun— susurré al verla y me abrazó, le correspondí al abrazo.

—No has cambiado nada ¿sabías?— dijo cuando nos separamos.

—T-tú tampoco— sonreí, hasta en mi forma de hablar se notaba lo nerviosa que me sentía.

—Rosie, tienes ojeras— acarició la parte de abajo de mis ojos y bajé mi cabeza avergonzada.

—Pensé que ya no se notaban— susurré.

—Comienza a decirme que te pasó— se cruzó de brazos y supe que no serviría de nada decirle que no quería hablar del tema.

Me insistiría hasta lo último así que tenía que decirle si o si. Ya la conocía lo suficiente para decir que era así.

Le conté todo lo que pasó con Jisoo, intentando no llorar en el intento. Me dolía hablar de ello porque a pesar del tiempo sin vernos yo aún la amaba, si, aunque me mintió, aunque prefirió ocultarmelo todo yo la quería y mucho.

No les voy a mentir.

Tenía fuertes sentimientos por ella y quizás podría seguir siendo así.

¿No les ha pasado que por mucho que esa persona les haga daño ustedes la van a querer igual?

Pues eso me pasaba, era la realidad de mi vida. Vivimos tantas cosas juntas, tantos momentos juntas, y cada beso, cada abrazo y cada caricia no se iban a olvidar así de fácil.

De todas formas era algo prohibido por decirlo así.

Yo era una policía, que tal vez podría llegar a ser Agente de la T.E.A y ella... Era la criminal más buscada.

Tenía dos facetas, solo que me faltó conocer una y era la que más daño me causó a mi, a mi familia y puedo jurar que a muchas más personas.

No sabía si podría llegar a perdonarla o si me lo hubiera dicho desde un principio las cosas hubieran sido diferentes y estaríamos haciendo planes de casarnos y soñar juntas.

—Es una historia conmovedora— me encogi de hombros mientras seguíamos caminando por el parque.

—Lo sé, no creo poder olvidarla, Dahyun, tengo tanto miedo de aferrarme a estar con ella cuando no puede ser así.

—Chae, la amas y no hay imposibles para el amor.

—Lo mismo dije con Irene— ella negó fulminandome con la mirada.

—Hablando de ella... Me enteré que está embarazada.

En realidad no me esperaba esa noticia, pero tampoco me importaba mucho porque ella y lo que le pudiera pasarle me dejó de importar desde ese 15 de mayo por la tarde.

—¿Es de Bam Bam?

—No...— sonreí.

—Aquí es donde confirmo que el karma si existe— Dahyun asintió dándome la razón.