Jung Hoseok seguía observando todo en silencio el sabía cómo terminar con aquella maldición impuesta por las antiguas generaciones del apellido Min para seguir con sus investigaciones a pesar de estar muertos pero solo había casos en los que funcionaba y en los que no, jamás intervino ya que eso no iba con el realmente no le importa pero aquel hermano mayor quería lo mismo que el.
Libertad.
Desde hace más años de los que podría recordar deseaba la libertad más que nada pero su maldición no podría ser destruida no tenía más opción. Observo la habitación de aquellos primos y una idea llegó a su mente observo al segundo y asintió utilizará a Kim Taehyung para ayudar a los hermanos Min después de todo no podría rechazar el trató que le haría.
Taehyung salió de su hogar a las tres de la mañana caminaba por los solitarias y oscuras mientras fumaba y escuchaba música; al llegar a su trabajo guardo su teléfono y tiro la colilla del cigarro a la basura. Abrió de más sus ojos al sentir a una preferencia detrás de él.
- ¿Mentita? - pregunto pensando que era aquel que estaba en su casa pero nadie contestó por lo que se giro encontrándose con un hombre desconocido para el - ¿Si? - esta vez se puso a la defensiva
- Tranquilo conozco a tu mentita... Necesito ayuda con algo ¿Me permites? - el Kim no muy convencido asintió
