Sol y Luna [LUKANETTE+18]

CAPITULO 6

"Cinco años habían pasado desde que Gina abandonó Luna.

Ya no era el muchacho bromista que solía ser. Julieta, quien se quedó conmigo, intentaba subirme los ánimos. Lo lograba, por ratos éramos los dos conversando como en los viejos tiempos.

Pero luego recordaba el compromiso y el amargo sentimiento se posaba en mi pecho. Una tremenda rabia hacia quien fue mi mejor amiga, y una profunda pena por Rolland.

La boda a pesar del tiempo, no se había llevado a cabo. El rey Thomas había muerto hace un par de años y Rolland tuvo que tomar su lugar de manera precipitada.

Obviamente asistí al funeral para dar todo mi apoyo.

Tristemente nuestros encuentros fueron menos frecuentes. Yo intentaba viajar a Sol al menos dos veces al año para ayudarlo. Julieta iba conmigo para ver a Gina.

Mi relación con ella era tensa, evitábamos hablar a toda costa. Lo peor era que Rolland no tenía la más mínima idea de lo que sucedía entre nosotros. Prefería mantenerlo así, no quería altercados entre mi amigo y yo; ya me era suficiente con perderla a ella.

Un día mi padre me mandó a llamar a su despacho. Cuando entré, él estaba de pie mirando hacia la ventana que daba al jardín. Me dediqué a observar su silueta por un momento, se veía cansado, sus hombros encorvados y ya bastante anciano. Se volvió hacia mí y me sonrió con calidez, muchos me dicen que heredé ese rasgo de él. Él siempre fue un buen padre, algo de lo que me siento muy agradecido.

Me acerqué y me pare a su lado viendo igualmente por la ventada. Nos quedamos en silencio por un buen rato, de alguna manera presentía lo que iba a decirme, sin embargo quise esperar a que él hablara.

- Rolland se ha vuelto un rey formidable. Está siguiendo los pasos de su padre. - dijo finalmente.

- Él es muy inteligente, puede con ello - fue mi respuesta.

- Es tu turno hijo; has ayudado a tu amigo con su cargo. Es hora que tu tomes el mando de nuestro reino. - me tomó de un hombro y me miró a los ojos. - Estoy viejo y cansado, y no me gustaría pasar por lo mismo que Thomas, quiero ver cómo te vuelves un rey admirable antes de morir.

Me volví hacia él y lo abracé. No podía pensar en un mundo donde mi papá no estuviese. Mi madre murió al darme a luz, Louis, mi padre, es la única familia que tenía.

- Si ese es tu deseo mi meta será cumplirlo - fue mi respuesta.

Lo solté y me sonrió. Hablamos por un rato sobre mi coronación y lo que él deseaba hacer antes de relevar su cargo. Hasta que dijo algo que no me esperaba ni un poco.

- Deberías contraer matrimonio.

- ¿Para qué? - las bodas en Luna son escasas, innecesarias.

- Serás un monarca joven, sería bueno mostrar una línea de mando sólida. Presentar a un rey y a una reina. - era buena idea, aunque seguía pareciéndome extraña.

- He estado ocupado, no he cortejado a ninguna dama por un tiempo.

- ¿Qué hay de Lady Julieta Ricci? Los he visto bastante unidos últimamente. - Fruncí el ceño ante esa declaración.

- ¿Julieta? Ella es solo mi amiga.

- No creo que ella lo vea así. - Mi padre sonrió de manera fugaz. - Piénsalo, Es una joven muy bella, de buena familia y le tienes confianza.