En busca de mi Saturno

3

Soy fiel creyente de que cualquier otra persona luego de leer esa carta se hubiese paralizado de miedo y para ser sincera al principio me asusté, hasta que empecé a atar cabos en mi cabeza y se me vino la explicación más lógica. Así que luego de eso solo me levanté, me di un baño, me coloqué un short de Jean negro y un suéter grande color negro y me robe las llaves de la camioneta ya que, 1. Mama estaba dormida y 2. La mayoría del tiempo me la prestaba sin problemas.

Para cuando agarré la carretera ya eran las 2.47 de la madrugada pero de verdad no me importó, estaba demasiado molesta porque no podía creer que apenas Cameron llegaba ya quería joderme la vida.

Explico lo siguiente, cómo llevo diciendo, Cameron es el estupido perfecto siempre ha amado asustarnos a Vivian y a mi, aparte de sobreprotegerla tanto que descubrió cómo llegar a mi cuarto sin que lo sintiéramos (cabe destacar que lo sé porque lo hizo más de una vez para llevarse a su hermana cuando nos escapábamos a fiestas DE ÉL y terminábamos en mi casa muy tranquilas, aunque no tanto porque era tan psicópata que entraba sin permiso o dar razones) así que no me parecía casualidad que justo llegara con ganas de hacer una broma pesada que gastara nuestro tiempo y nuestra energía. Al atar mis cabos no me costó mucho irme directo a su casa, sabía que sus padres no estarían debido a que mayormente están viajando y dejaban a Vivian sola o en este caso con su hermano, así que seguramente por eso también nos había buscado él, seguro se habían ido a quedar en algún club, hotel o simplemente agarraron el primer vuelo que encontraron porque sin ser millonarios tenían dinero suficiente para hacer eso.

Me faltaban unas 2 cuadras para llegar a la casa de Vivian y aún estaba demasiado molesta porque al principio si me había asustado mucho con esa carta pero por Dios, esas cosas
de stalkers asesinos u obsesivos pasa más en las historias que veo en Investigation Discovery que en mi ciudad, y no había de otra, tenía que haber sido él.

Apenas llegue me baje furiosa del carro y no sentí ni un poquito de sueño o del alcohol en mi organismo, solo toqué el timbre seguido como unas cinco veces hasta que se abrió la puerta de golpe. Lógicamente abrió él, ya que mi mejor amiga o estaba dormida o muy ocupada con sus audífonos.

- Que pasó Te perdist... - comenzó a decirme pero lo empujé y pasé- explícame que cojones está pasando por tu cabeza como para entrar en mi casa así, a estas horas y de paso atreverte a tocarme. - me dijo con los ojos más oscuros de lo que los recordaba.

- Que eres un idiota, eso me pasa. Cómo se te ocurre llegar fastidiando ? Ni siquiera por tener 23 años has madurado ? -le dije y me di cuenta de que se me había pasado un poco la agresividad y estaba empezando a sentir pena, el tenía puesto el mismo mono pero ahora estaba sin camisa y casi toda la casa estaba oscuras, solo habían dos luces encendidas y eran amarillas aparte de estar lejos de donde nos encontrábamos.

- Gaía, estás drogada o qué? - me dijo mirándome sumamente mal.

- Mira - le dije sin más y le lance la carta al pecho - ahora dime que aluciné y es un papel en blanco.

Se paró dos segundos al ver el sobre, luego solamente lo abrió y me pareció ver que leía detenidamente lo que decía la carta. No hizo ni una expresión, literalmente nada, solo la leyó y al terminar la guardo y me tendió la carta.

- No me interesa saber nada de tu vida Gaía, es hora de que te vayas, tampoco pretendo defenderte de ningún stalk... - lo interrumpí.

- De verdad Cameron? -me seguía mirando sin una señal de vida así que solo suspiré- Escucha, nunca nos hemos llevado bien, eso lo entiendo, pero en serio sé que la única persona que sabe cómo entrar a mi cuarto a escondidas eres tú entiendes ? Y también sé que siempre has amado molestarnos tanto a Vivian como a mi. Lo consideraré una tregua si tomas la carta y simplemente aceptas que lo hiciste como una broma pesada y ya. Aparte es tarde, y no tengo ningún tipo de interés de seguir acá peleando contigo Cameron.