18. Epílogo

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...y cualesquiera sean tus trabajos y aspiraciones,
mantén en la ruidosa confusión, paz con tu alma
con todas sus farsas y sueños rotos
éste sigue siendo un mundo hermoso.

Esfuérzate en ser feliz.

No pudiéndome contener con lo que había pasado anoche, me reuní con Bo Won en la mañana. Salí temprano del departamento dejándole una nota a Yoongi para decirle que iría a correr y que regresaría después, sólo para no preocuparlo; Bo Won me citó en el parque de la calle principal y ahí estaba cuando yo llegué. Comenzamos a caminar entre los árboles de cerezo que en este punto del año soltaban sus flores por todos lados.

—. Tengo que explicarte muchas cosas...—comenzó mi amigo con un pequeño suspiro.—. Y necesito que me prometas algo.

—. ¿Qué cosa?

—. Que no te molestarás por cualquiera de las decisiones que tomé.—me miró seriamente, no podía prometer ese tipo de cosas cuando realmente no sabía qué tanto había cambiado Bo Won en mi vida, pero terminé aceptando porque le debía mi viaje entero.—. Prométemelo.

—. Está bien. Lo prometo.—acepté, logrando que Bo Won se relajara un poco más—. ¿Pero puedo preguntar yo?—él enarcó una ceja.—. Sí, yo pregunto lo que quiero saber y tú me explicas en qué me has metido.

—. Me parece justo. Pregunta entonces.

—Inflé mis mejillas, traté de pensar en qué fue lo primero que me había parecido extraño en cuanto desperté.—. ¿Por qué el departamento cambió? Es decir, tú no lo recuerdas pero yo vivía en un departamento mucho más chico y en otra zona.

—. Bueno...después de que Yoongi ganara el concurso, muchos contactos estuvieron interesados en él y entonces comenzó a estudiar música, cuando se graduó tenía muchas ofertas de trabajo, entre ellas el conservatorio. Tiene muchos patrocinadores, un montón de gente interesada en su trabajo, así que...tiene dinero suficiente para costearse la vida que tienen. Tú también, dado que trabajas en el conservatorio.

—. ¿Lo hago?—pregunté confundida. En mi línea temporal pasada también trabajaba en el conservatorio, era maestra, pero nunca me pagaron tanto como para poder pagar el departamento de lujo en el que ahora vivía—. ¿Sigo siendo maestra?

—. De hecho, no...eres directora ejecutiva. Tú encuentras los talentos nuevos, organizas eventos, entre otras cosas.

—. Wow....¿cómo es que eso sucedió?

—. Si respondo eso creo que te aclararía otras dudas.—dijo con una mueca—. Tienes ese puesto porque terminaste tu carrera, Jiwon. Además eres novia del mayor talento del conservatorio, todos estaban interesados en tenerte como empleada.

—en realidad, no me había aclarado nada, me había creado más preguntas.—. No lo entiendo, se supone que nos expulsaron.

—. Y aquí es cuando debes aplicar tu promesa de no enojarte. ¿Está bien?—asentí con mi cabeza—. El día del accidente no ocurrió. Dijiste que habíamos incendiado un árbol, así que cuando entraste al laboratorio con tu cañón, decidí dejar todos los proyectos a un lado. El accidente no pasó, nadie fue expulsado, terminaste tu carrera y listo.

—. Pero....¿cómo pude hacer eso si mi padre no podía costear mi escuela?

—. Yo los ayudé.—confesó finalmente.—. Dijiste que tu padre había muerto, nunca dijiste cómo, sin embargo...lo sospeché siempre. Supe que no le agradaba que fuéramos amigos, entonces, incluso si no te habían expulsado tenían problemas económicos; yo le ayudé a tu padre a pagarle a los prestamistas y que tú pudieras seguir estudiando. Tu padre puede pagar tu matrícula, por ende no se suicida, y ahora...

Desiderata; M.ygDonde viven las historias. Descúbrelo ahora