Demonio cae en amor ( Yaoi)

Capitulo 6: Contrato.

Love.

Terminamos las compras y vamos de vuelta a la casa en el auto. Esta noche está bastante oscura.

— Oye, Love...

— ¿Pasa algo? — Pregunté.

— A ti, ¿Te gustan los chicos? — Preguntó Cedric mientras miraba al frente.

¿A qué viene esa pregunta?

—Mmm, así es — Respondí.

—Mmm, ya veo... Entiendo.

Todo lo que quedaba del camino, se volvió nada más que nervios, ya que, no dijimos ni una sola palabra después de esa conversación... ¿Acaso debí decir otra cosa? Pero si yo pensé que era obvio.

Cuando llegamos a la casa, preparé la cena, algo simple, pechuga de pollo rellena de verduras, un poco de flor de pena, le puse algo de esencia de corazón roto, acompañado de ensaladas mixtas, entre algunas hortalizas de los humanos y algunas de las nuestras... Estoy acostumbrado a cocinar así para Led... Es como la, ¿cocina fusión o algo así?

Todos comimos, al menos dijeron que estaba muy bueno, de otra forma... No hubiera válido la pena el hecho de que me hice un pequeño corte en el dedo índice de mi mano izquierda, mientras fileteaba la pechuga de pollo.

— ¿Te cortaste? — Preguntó Cedric mientras miraba mi dedo.

Jake y Gerard dijeron que irían a ver televisión a la sala. Mientras que Cedric seguía sentado en la mesa.

— Ah, sí, sólo un poco — Mencioné mientras tomaba los platos.

Debo lavarlos.

Llevé los platos y los dejé en el lavado...

— Oh... No compramos jabón para los platos... — Hablé en voz baja.

De repente, miré hacia atrás y ahí estaba Cedric, ¿Cuándo se levantó?

— Tienes razón, mañana tendremos que comprar — Comentó — Por otro lado, ¿No te duele en donde te cortaste?

— La verdad es que no...

¡Está demasiado cerca! ¡ Voy a morir!

— Te pusiste una curita, déjame ver — Dijo mientras tomaba mi mano.

¿Qué le sucede?

Él retiró la bandita de mi dedo.

— No fue tanto — Mi voz sonaba nerviosa.

—Es verdad, pero aún sangra — Sus ojos miraban directamente las gotas de mi sangre.

— S-Sí, mi cicatrización siempre ha sido mala — Expliqué algo nervioso.

De repente, él pasó su lengua por mi dedo, tomando las gotas de sangre que caían.

El erotismo de este acto es tan... ¡ Tan emocionante!

— Ya está — Él está sonriendo.

— ¿Eh?

Miré y mi herida ya no estaba.

— La curé para ti.

— G-Gracias — Agradecí, nervioso.

Ahora me siento avergonzado, porque mal pensé su acción, era sólo para curar mi herida, nada más... Rayos.

— Desde ayer lo noté, ¿También tienes una herida en el cuello? Puedo curarla para ti.

Mataría para que lamieras mi cuello... Pero justo esta herida... No.