Undeniable atraction - KTH

Cap 12- Parte 2

¿Salvaré a unos pocos? ¿Qué diablos significa eso? Mi corazón está a punto de salir de mi pecho. ¿Salvaré a unos pocos? La línea corre a
través de mi mente en repetición. Todavía va a hacerle daño a mi gente.

¡No! Hice lo que me dijo. Abandoné a taehyung. No sé cuándo empiezo a sollozar o cuando me caigo de rodillas, pero unas grandes manos se
envuelven alrededor de mis hombros y me ponen de pie.

A través de mis ojos borrosos, veo a un hombre fornido y alto. Es más joven que taehyung, ¿tal vez a mediados de sus veintes? Me frota los hombros con suavidad, pero no me suelta. Estoy un poco contenta; no creo que pudiera estar aún por mi cuenta. Él tiene ojos amables y una suave sonrisa que dice mucho. Debe ser Axel o Blake.

-¿Está bien, señorita? ¿Hay algo que pueda hacer para ayudarle?

Hace un guiño al final de su pregunta. Parpadeo un par de veces, para aclarar mis ojos. Tengo que aclarar mi garganta antes de que pueda
hablar con él. Se siente tan seca y gruesa.

-Sí, gracias. Estoy bien. Acabo de recibir una noticia inquietante.

Gracias por tu preocupación. Soy Clair.

Ya no está ayudándome a ponerme de pie, por lo que extiendo una mano para que me la sacuda a modo de saludo.

-Encantado de conocerte, Clair. Soy Blake. Siento lo de tu noticia.

¿Hay algo que pueda hacer?

Niego con la cabeza y empiezo a sollozar de nuevo. Sé que él me cuidará. Y sé que toda esta introducción es un acto para asegurarse de
que el Acosador Gilipollas no se dé cuenta de que está asociado con taehyung. Pero esas palabras resuenan en mi mente otra vez. Me vengo abajo otra vez. Blake me atrapa antes de que golpee el suelo.

Me sostiene en sus brazos y me frota la espalda. Susurra a mi oído para que nadie lo pueda oír.

-Todo va a estar bien, Clair. Lo prometo.

Luego, en voz más alta, habla de nuevo.

-Lo siento, señorita, por lo que le esté molestando. Tal vez debería
comer algo para calmar sus nervios.

Me alejo de él y asiento. Cuando las puertas del ascensor detrás de nosotros se abren me siento mejor sabiendo que nadie nos puede ver aquí.

Le paso la nota que tengo arrugada en mi mano. La desenreda y oigo que se escapa una maldición de sus labios. Está en silencio por un momento, luego levanta la mirada hacia la mía.

-Está bien, lo podemos manejar nosotros mismos. Y tu prima está con Kai. Él va a cuidar de ella. Cuando lleguemos al restaurante, tienes que darme las gracias por mi ayuda y enviarme a seguir con mi camino. Él no se acercará si estoy ahí contigo. Pero nunca puedes estar fuera de mi vista.

No contesto. No puedo, mi garganta todavía es demasiado gruesa para formar palabras. Así que simplemente asiento y deslizo la nota en mi bolsa.

Salvaré a unos pocos.

Cuando salimos del ascensor caminamos juntos hacia el restaurante.

Antes de entrar me vuelvo y coloco mi mano en su antebrazo.

-Muchas gracias por ayudarme en el pasillo. Me siento un poco mejor ahora, pero si no te importa, me gustaría estar sola.

Gentilmente acepta mi rechazo de su oferta de desayuno y nos separamos. Elige un asiento junto a la ventana en la esquina trasera, así
tiene una visión clara de toda la habitación y nadie puede venir detrás de mí. Miro mi entorno, analizando todo lo que podría ser utilizado como un arma potencial para defenderme si es necesario.