C u a t r o.

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Desde que se enamoró de Seokjin, Jungkook siempre había sido muy realista respecto a sus sentimientos. No consideraba que fuera una persona ilusa, que se dejaba llevar por sus emociones y fantaseaba con una oportunidad al lado de su amor platónico. Porque vale, sí había imaginado escenas cursis en su cabeza con él y Seokjin como protagonistas. Y sí, en más de una ocasión había tenido sueños comprometedores en los que el pelinegro le había hecho ver las estrellas. Pero siempre fue a sabiendas de que nada de eso era real, y que por mucho que lo deseara, tampoco podría convertirlo en una realidad.

Veía el rechazo como un suceso destinado a ser, si es que algún día tomaba el valor suficiente para declararse. No había que ser un adivino, el pelinegro jamás se fijaría en él. Ya se habían besado una vez y nada cambió. Tan insignificante fue para Seokjin que un poco de alcohol bastó para borrarle de sus recuerdos. Jungkook debió haberse confesado entonces, para acabar con la tortura y seguir adelante. Era lo que la mayoría de personas hubiera hecho en su caso, pasar de página. Entonces, ¿por qué había seguido guardando su enamoramiento para él en vez de sacarlo de su sistema? Habían muchos motivos, pero el principal tenía que ver con que a Jungkook en el fondo le gustaba seguir ilusionado.

No, él no tenía esperanzas, pero se permitía disfrutar de aquél 1% de probabilidades que las estadísticas ofrecían por regla universal. No importaba si Seokjin tenía novia o si Jungkook estaba resignado a que nunca estarían juntos; mientras no lo rechazara oficialmente, Jungkook podía seguir imaginando un futuro alternativo. Una especie de "¿Si lo hubiera intentado las cosas serían diferentes...?". Como cuando lees un libro y anticipas un final trágico que te va a destrozar, pero tienes la opción de seguir leyendo y aceptarlo, o saltarlo e imaginar tu propia versión feliz. Era obvio cual de las dos escogió Jungkook.

Existía otra razón para no enfrentar a Seokjin, sin embargo, y era que tenía mucho miedo de las consecuencias que pudiera dejar en él el no ser correspondido. Las personas solían decir que era lo mejor, que era como retirar una bandita y que después de liberarse, los sentimientos se superaban con el tiempo y dejaría de doler. ¿Pero y si no lo hacía? ¿Y si Jungkook en lugar de olvidarlo solo ganaba un corazón roto de por vida?

No quería sufrir, y es por eso que había hecho todo por proteger su corazón, al menos hasta que este se volviera fuerte para soportar la respuesta de Seokjin.

Pero estaba equivocado. Las palabras de Seokjin no eran las únicas que podían hacer trizas sus ilusiones.

Enterarse por terceros era peor. Mucho peor.

Y lo estaba comprobando en carne propia.

— ¿Así que... beso en el jardín?

La sonrisa de Taehyung se ensanchaba a medida que los engranajes en la cabeza de Jungkook se movían para comprender lo que estaba sucediendo. Su expresión pasó del desconcierto a la sorpresa, con su boca intentando enunciar palabras que no salían porque su voz se había esfumado.

—Oh —Taehyung rió, disfrutando su nerviosismo—. ¿Di en el clavo?

Jungkook pasó saliva y su pecho se presionó ligeramente. ¿Por qué Taehyung estaba diciendo esas cosas?

— ¿C-cómo sabes de... ? —"Eso" quiso preguntar, pero los nervios le devoraban el corazón. Se suponía que Seokjin no recordaba nada. ¿Cómo era que su amigo sabía entonces?

—Ya te lo dije —el rubio suspiró—. Jin me lo contó. ¿No me escuchas?

Jungkook se quedó en silencio, sin saber que decir. Si eso era verdad solo podía significar una cosa, pero no estaba listo para escucharlo.

"Seokjin te mintió", no quería oír eso.

—Fue hace... un año —habló Taehyung, no muy seguro de su afirmación—. ¿O dos? No importa. Fue hace tiempo —hipó, se notaba cada vez más borracho—. Jin llegó a mi casa a las tres de la mañana ebrio y apestando a alcohol. Le pregunté dónde estuvo y dijo que había ido a una fiesta. También mencionó tu nombre. Sí... Jeon Jungkook —repitió, cerciorandose de que lo recordaba—. Al día siguiente toqué el tema y me contó que se habían besado —Taehyung esbozó una sonrisa... que se convirtió en una suave risa—. Tuvo una crisis de pánico por eso, ¿sabes? Fue muy gracioso.

Now you see me? [Jinkook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora