Capítulo 8: Your love is gone

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Estaba volviendo del colegio, aquel día había sido demasiado largo y agotador, como cereza del postre habían cortado la calle por la que siempre iba para llegar a casa, en cambio debía tomar la ruta más larga.

Caminaba lo más tranquila que se puedia estar cuando cada cinco minutos alguien te toca bocina, chifla o hacen comentarios innecesarios sobre tu cuerpo. Creo que los cazadores se equivocan cuando dicen que el lado oscuro de este mundo son los sobrenaturales, en realidad es esta parte en la cual no podes caminar tranquila por la calle.

¿Quien dijo que las cosas solo pueden mejorar cuando ya tocaste fondo? ¿Acaso no conoce el subsuelo?

De la nada comencé a escuchar a dos hombres que venían en el auto detrás de mi, gritando obscenidades ¿Acaso no ven que no me interesan? ¿No ven que no me importa lo que les genero? ¿Por que simplemente no me dejan tranquila?.

Aquellos hombres comenzaron a seguirme, no sabia que querían de mi pero me desvié del camino, se que suena estúpido pero faltaba mucho para llegar a casa y debía encontrar algún lugar para pedir ayuda.
Iba a cruzar en la esquina pero antes de dar un paso una moto freno rápido frente a mi, ese podría haber sido mi fin de no ser que el de la moto era Liam.

¿Que hace el acá?

Salvarnos la vida

Subí rápido a la moto y nos fuimos de ahí. Nos habíamos alejado de esos hombres pero aun así mis manos seguían temblando y ese sentimiento de inseguridad seguía en mi sistema, sin darme cuenta abrace fuerte a Liam, quizá demasiado.

-No me molesta que me abraces, bueno la verdad me fascina pero necesito respirar- su comentario me trajo de nuevo al mundo real y lo solté un poco

-Perdón- murmure

-No pasa nada- dijo viéndome por encima de su hombro

-¿Que hacías ahí?- pregunte

-Eh... Daba un paseo- dijo algo inseguro, sin embargo no tenia ganas de preguntar

Pero que sorpresa incluso para mi

Cerré los ojos por unos minutos intentando tranquilizarme pero eso empeoro las cosas, aquellos sentimientos solo crecieron y se fortalecieron, creí que íbamos más rápido en la moto porque el viento soplaba más fuerte pero no era así, íbamos a la misma velocidad era el viento el que habia cambiado.

-Princesa, tenes que calmarte- pidió Liam viendo al cielo y luego a mi. El viento soplaba más y más fuerte, pronto las nubes oscuras cubrieron al sol, ahora lo que iluminaba el cielo eran los relámpagos indicando que una fuerte tormenta se asomaba.- Cariño ya estas bien- Liam intentaba hacer de todo para calmarme pero aun no podía, en mi mente solo aparecían todas esas cosas que dijeron y lo que me hicieron sentir.

Nunca sabes lo que provoca en el otro lo que decís, esos hombres no sabían lo que me hacían sentir, insegura, temerosa incluso avergonzada. ¿Como es que no ven lo que provocan? ¿Como es que no ven el temor?

Cuando la moto freno abrí los ojos, estabamos en una parte del bosque que jamás había visto, había un lago lleno de hojas que caían del gran árbol junto a él. El pasto tenia alguna que otra flor, algunas amarillas, otras pequeñas de color rosa y todo junto era algo hermoso de ver.

-¿Que hace...- me interrumpí a mi misma por la sorpresa al sentir a Liam rodearme con sus brazos, la lluvia llego y aunque las gotas de agua nos estuvieran empapando él no me soltó.

Me aferre a él como si mi vida dependiera de eso, sabia que estaba mal, sabia que él estaba prohibido, yo estaba con Zack, sabia que el amor por mi debía ser mas grande que cualquier cosa, sobre todo sabía que él iba a lastimarme nuevamente y esta vez seria mi culpa. Pero se sentía tan bien abrazarlo, sentir su cuerpo sosteniendo el mio, sintiendo mis latidos a la par de los suyos y como su perfume inundaba mis fosas nasales.

•••Mi Gran Secreto•••Donde viven las historias. Descúbrelo ahora