Liam
El sol se metía en nuestra habitación a pesar de las cortinas, su risa resonaba en el espacio, sus ojos achinados dejaban caer algunas lágrimas
-No, no ya basta por favor -Hice caso omiso a sus súplicas y seguí con el ataque de cosquillas -Liam por favor, basta -Siguio riendo e intentando escapar
-No, hasta que digas lo que quiero escuchar -Negó repetidas veces mientras reía
-Nunca, no voy a subirte el ego Liam O'Conner -Me miro retandome
-Okey, entonces no paro -Segui con las cosquillas hasta que se movió tanto que cayó de la cama. Por un momento pare, baje hasta quedar sobre ella sin aplastarla, la examine con la mirada para ver si estaba bien. Su risa ya no se escuchaba
-¿Estas bien? -Volvió a reír, dejándome respirar nuevamente
-Okey, okey vos ganas lobito, te amo - Susurró. Tome su cara entre mis manos, mirándola fijamente
-No me dejes -Le pedí
Me haces tanta falta princesa
-Liam... Ya me fui, ¿Lo recordas? Fue en el muelle, la D.D.D -Negue repetidas veces.
-No me dejes- la abrace fuerte escondiendo la cara en su cuello, ella acarició mi pelo -Megan, no es juego, no puedo sin vos -Respire profundo
No huele a ella
Es un sueño...
-Lobito, tenes que seguir. Vivi por mi -Pidió
-No te rindas princesa, te prometo que te voy a encontrar -La volví a mirar y bese con toda la intensidad que sentía- Nunca olvides que te... -El agua en mi rostro hizo que despertara
-¿Pero qué? -Quite el liquido de mis ojos y los abrí
-¡¿Que haces?! ¡¿Estas loco?!- Lexa grito furiosa frente a mi, dejo caer un balde vacío donde supongo que estaba el agua
-¡¿Por qué?! ¡¿Por qué me despertaste?! ¡¿Por qué lo hiciste?! -Me pare furioso y fui contra ella. Lexa retrocedió hasta quedar contra la pared del calabozo
-Ibas a morir -Susurró
-¿Por qué me despertaste? -Murmuré. Ya no podía mantenerme de pie así que cai al suelo
-Liam, ya no podes hacerte esto. El cerval va a matarte -Lexa tomo la pequeña botella en mi mano y la arrojó lejos de nosotros
-Quien dijo que no es eso lo que quiero -Ella me miro con pena, se puso de pie y se dirigió a la puerta
-No voy a dejar que te mates, O'Conner -Fue lo último que dijo antes de salir por la puerta llevándose todas las botellas de cerval que habia
Maldita bruja
-¡Hija de puta! -Intente gritar pero mi cuerpo estaba muy débil. Mire a mí alrededor, ese calabozo habia sido mi lugar desde hace ocho meses, tres semanas y cuatro dias... Desde que volvi a la manada después de ella.
Megan se fue hace exactamente nueve meses. Nueve meses llenos de pesadillas, dolor e ira, hasta que descubrí que cierta cantidad de cerval no me mata pero me deja alucinaciones, en las cuales la veo. Me encerré en este calabozo por ser incapaz de ver a las personas a las que les falle a la cara, en especial por ver cada puto lugar de la mansión, todo me la recordaba.
Pasaron unos dias de la última visita de Lexa, después de ella vino Tara- como todas las semanas- al igual que mi mamá, apesar de que le dije que se fuera con Marco no quiso. Los dias sin cerval fueron una tortura, no estaba lo suficientemente fuerte como para tirar la puerta abajo pero no tan débil como para conciliar el sueño o dejar de pensar
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•••Mi Gran Secreto•••
Manusia SerigalaNo podemos correr más rapido que nuestro destino, por más que busquemos no hay escapatoria cuando el fuego se encuentra con él. Megan Evans tendrá que descubrir quien es y cumplir con la misión para la que nació. Sin embargo los secretos de este nu...