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El ciclo escolar de este año había comenzado a finales de agosto, habían pasado alrededor de dos semanas dando la llegada a septiembre, lo que sólo significaba una cosa.

El cumpleaños del nuevo mariscal de campo estaba cerca.

Al ser un colegio prestigioso, costoso, y ganador de múltiples campeonatos nacionales y algunos mundiales por parte de las porristas se podían tomar la libertad de celebrar a sus alumnos más sobresalientes, así como los capitanes de cada uno de los equipos, alumnos con excelencia académica entre otros.

Cada que algún alumno sobresaliente del colegio cumplía años se hacía una pequeña celebración o se felicitaba por los altavoces del colegio si es que no se podía llevar a cabo una.

Y este año por ser el primer año del nuevo mariscal se tenía planeado algo especial y grande para darle la bienvenida al nuevo integrante del equipo.

Se tenía planeada una celebración en uno de los salones vacíos del colegio, algo pequeño y especial. Pero claramente se tenía planeada una enorme fiesta en la fraternidad del equipo de fútbol.
Y toda la escuela estaba emocionada por eso.

-¿En serio? -preguntó puchereando

-Ya te dije que no Jimin

-¡Pero Yoonie! Es su cumpleaños por favor

-No quiero ir, lo felicitaré en el descanso cuando lo vea, pero no pienso ir a esa fiesta, es en la fraternidad, ya sabes que esas fiestas siempre terminan mal

-Pero queríamos hacer una porra para JungKook por su cumpleaños, para darle la bienvenida

Yoongi dejó de acomodar las cosas en su casillero y volteó a mirarlo. -¿Qué?

-Lo que escuchaste

-¿Cuándo pensaban decírmelo? Saben que no pueden hacer nada sin mi autorización

-Por eso queremos que vayas, porque así ya podremos planearlo

-Ya veré que decido

-Genial -Jimin le regalo un eye smile y se fue hacía su clase

Yoongi volteó hacia su casillero para continuar con su limpieza hasta que sintió como una mano le rozaba la cadera, volteó hasta la persona encontrándose con el querido y sexy profesor Baekho quien volteó guiñándole el ojo y haciéndole un muy leve movimiento con la cabeza que le indicó que se vieran en su oficina.

Yoongi le devolvió la sonrisa y el guiño volteando a su casillero una vez más y terminando por fin de guardar sus libros y sacar alguna basura que había ahí.
El timbre sonó, tenía clase, pero no le importó, notó como varios alumnos se metían a sus salones y otros tenían horas libres por lo cual seguían en los pasillos y otros se dirigían a la cafetería.

Por su parte fue hacia el baño para mirarse en el espejo, perfecto como siempre, se acercó al espejo subiéndose un poco e inclinándose sobre el lavabo, notó por el reflejo cómo algunos alumnos entraban y le miraban el trasero, no le molestaba, sabía que no tenía la culpa de tener un cuerpo tan increíble.

Además, su short no dejaba mucho a la imaginación.

Comenzó a colocarse un poco de tinta en los labios, aunque sabía que no le duraría mucho.

-Lindo short Yoongi -sus ojos se dirigieron a la persona que se encontraba detrás de él

-Hola fortachón -se bajó del lavabo enderezándose aún con la vista hacia el espejo guardando las cosas que había usado en su mochila

-¿Cómo estás?

-Estoy increíble como siempre -contestó cortante al mismo tiempo que intentaba bajar su short por los bordes dándole una buena vista al chico detrás de él

𝑪𝑯𝑬𝑬𝑹 𝑩𝑶𝒀 ❤︎ 𝙺𝙾𝙾𝙺𝙶𝙸 | 𝕥𝕖𝕣𝕞𝕚𝕟𝕒𝕕𝕒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora