ALI
Las once y media e Isa vuelve a tirarse encima para despertarme, ya es rutina. Por lo que veo todas las chicas de la cabaña están ya despiertas, y todavía ni a sonado la música, no puedo entenderlo... Al parecer ya "se han acostumbrado a levantarse pronto en estos días" no me entra en la cabeza... ¿Cuándo se acostumbra una a levantarse? Va contra mi naturaleza...
Isa consigue hacer que me levante y me vista, nada más salir por la puerta de la cabaña escuchamos a las chicas cuchicheando y riendose, todas nos miraban.
-¿Tan mala cara tengo?- le pregunto a Isa riendome.
-Pues sí la verdad, pero no creo que nos miren por eso...
-Seras...- le pego un puñetazo flojito en el hombro.
Cuando llegamos a los baños para asearnos todas las chicas hablaban animadamente, y en cuanto aparecemos, esas risas se combierten en susurros y risitas disimuladas. En serio, no entiendo nada ¿Qué es lo que les pasa a estas?
Isa y yo pasamos un poco del tema, ya nos acabaríamos enterando qué es lo que cuchichean, nos daba igual. Y entonces, llegaron nuestras respuestas... al salir del baño nos encontramos de frente con Clara, fuimos a explicarle lo que nos estaba pasando cuando ella se nos adelanto:
-Hola chicas, esto es horrible, odio ser el centro de atención, y por culpa de ese maldito rumor en mi cabaña no se habla de otra cosa, no me he atrevido a abrir la boca desde que me he levantado.
-¿Qué rumor? ¿Que dices?
-Pues al parecer, aqui la gente del campamento con sus mentes perversas, ven demasiada coincidencia que tres chicos y tres chicas se "queden encerrados en el baño toda la noche" así que se a exparcido el rumor de que lo hicimos a posta y de que nos liamos entre nosotros, hay apuestas para ver quien adivina quien va con quien y todo... Es alucinante...
-¿Estas de coña no? Me estas vacilando... No puede ser, pero ¿Cómo pueden pensar eso? Es una tontería, ¡somos amigos! La gente se aburre muchísimo, ¿No tienen otras cosas de las que hablar?
-Pues así es la gente hija...
Acompañamos a Clara al baño para que no pase sola por la sesión de cuchicheos y nos vamos todas a desayunar. Cuando llegamos a la mesa los chicos estan tan campantes ya sentados, igual no se han enterado de nada...
-¿No os habeis enterado de los rumores?- Pregunta Isa nada mas llegar.
-Claro que sí, ¡¡es buenísimo eeh!!- dice Jorge mientras todos se rien.
¿Enserio? ¿Les da igual?
-¿No os molesta?- les pregunta Clara sorprendida.
-¿Por qué iba a molestarnos, es un rumor de cuatro tontas que se aburren, ¿A nosotros qué nos importa lo que digan? Mientras que no llegue a mayores y se quede en un rumor tonto, ¿por qué no reirse de la situación?- Explica Fer con su media sonrisa.
-Teneis razon, es una chorrada, no hace falta tomárselo de ese modo.- Les reconozco con una sonrisa. Isa y Clara también sonrien, por lo que deduzco que ellas también se han convencido.
Terminamos el desayuno con las risas y bromas de siempre pero con cien miradas puestas en nosotros, es algo incomodo, pero si les ignoras al final ni lo notas.
Esa mañana nos tocaba caballo otra vez, otra clase con Sergio, necesito conocerlo más, saber algo sobre su vida, necesito comprobar si es o no es mi padre. Me pregunto qué actividad dará Tomás (el otro coodirector mayorcito, y por tanto, mi otro posible padre).
Me dirijo hacia la clase de caballo y la verdad que como de costumbre lo paso genial, Sergio es un buen tio, es simpático, gracioso, atento... Tiene pinta de ser un buen padre ¿Será el mio? Aunque dejando a un lado todo lo bueno que tiene, no consigo quitarme de la cabeza esa horrible imagen, ese instante en el que ví a uno de mis posibles padres liandose con una niña de mi edad. Necesito sabes más sobre él, asique mientras espero mi turno para hacer el ejercicio de salto, tomo valor y le hablo:
-Hola Sergio, eres muy bueno en esto de los caballos, a mí me gustaría llegar a serlo algún día, ¿Cuánto tiempo llevas en esto?- Algo discreto para empezar.
Sergio me responde sin quitar los ojos de encima a mis compañeros que hacían el ejercicio, se tomaba muy en serio su trabajo.
-Pues llevo unos catorce o quince años con el campamento, pero montando, de toda la vida.
Es él, lo es, estoy segura. Cuando me disponía a seguir discretamente con mi interrogatorio, el caballo de Nacho empieza a correr, salta la valla y deja a Nacho salirñ disparado por los aires para caer sobre una montaña de paja.
Sergio sale corriendo con su caballo hasta donde está Nacho y le ayuda a incorporarse, agarra a su caballo y los lleva a los dos de vuelta hasta el picadero.
-Se acaba la clase por hoy chicos, tomaros un desacanso, yo voy a acompañar a Nacho a la enfermería, parece que no tiene nada, pero para q le venden las heridas.
Todos asentimos y nos encargamos de meter a los caballos en los establos y dejarlo todo bien cerrado con las llaves que nos había dejado Sergio.
Me dirijo hacía el despacho de Sergio y Tomás para dejar las llaves, entro, las dejo, salgo y al salir me encuentro de frente con los dos, con Tomás y Sergio con una expresión seria.
-Estaba dejando las llav...- intenté esplicar.
-Lo sabemos, Alicia, queremos hablar contigo- dice Sergio.
-Sí, pasa, por favor- Dice Tomás abriendome la puerta del despacho.
No puede ser, el corazón se me acelera y empieza a latir a mil por hora, no sé a dónde mirar, no sé dónde meterme, solo quiero desaparecer de ahí. Esta claro lo que ha pasado, me han descubierto, uno de los dos es mi padre y se ha dado cuenta de quién soy, seguro que es eso, pero ¿Querrá librarse mi padre de mi ahora, igual que lo hizo cuando yo era un bebe? Me quedaban segundos para averiguarlo...
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ALI EN MULTIMEDIA
