Capitulo 4

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Me sorprendì al no resivir ningún regaño de su parte solo me saludaron amablemente como lo asían pocas beses los saludé también,al subir a mi abitación los escuché ablar que yo seguramente andaba con alguna chica ese comentario me provocó un poco de risa así es mejor que crean eso y no sospechen de mí.

Mis ojos solo pueden ver a Mattew y a nadie más 

Algunas horas después amaneció los rayos del sol entraban por mi ventana se me avía olvidó cerrar las cortinas,me encontraba en la sala mirando la tele cuando mis padres bajaron las escaleras con algunas maletas.     

Les pregunté que si se iban de vacaciones a lo que respondieron,se van a Miami por negocios.  

Los acompañe a la salida nuestro chófer los estaba esperando afuera para llevarlos al aeropuerto.

Horas después le avisé a Mattew que estaríamos solos todo el verano y le pregunté si que ría venir a lo que el afirmó.

El llegó en seguida subimos a mi cuarto para estar más cómodos se sentó sobre la cama yo me subí arriba de el para mirarlo sus labios se posaron sobre los míos en un apasionado beso y nuestras lenguas jugaban plácidamente

Colocó sus manos en mi espalda para pegarme más a él,me  sonroje por un momento al sentir algo muy duro sobre mi trasero Mattew estaba duro como roca,lentamente me pare de sus piernas y me senté a su lado.

Señalo su erección para decirme pequeño esto es lo que tú provocas en mi no me atrevía a mirarle a los ojos aún no estaba listo para tener sexo tenía miedo.

Escuché una vez más su vos no te preocupes Shon yo sé que aún no estás listo para esto es como si el ubiera leeido mi mente tomo una de las almohadas y se cubrió su abultada entrepierna. 

Después de algunos minutos bajamos a la cocina por algo de comer encontramos uno de nuestros postres favoritos helado de chorizo con fresas.     

No quería quedarme solo esa noche así que le dije a mi novio que se quedará conmigo a lo que el no se resistio nos duchamos el primero y después yo le di una de mis pijamas le quedava muy bien la mía era parecida,no me pondría de nuevo la que le preste me quedaría demasiado grande su bien formado cuerpo se ajustaba a ella como anillo al dedo.

Lo que los demás piensan de mi Donde viven las historias. Descúbrelo ahora