Insaciable (+18)

Capitulo 11: ¿y ese Adonis quien es?

Roma

-somos tus ángeles guardianes- le digo con sarcasmo pestañeando exageradamente con una pistola en mano- ¿que te crees idiota sexy?

Ups eso se me escapó.

-oye linda que te parece si le dices a tus amigos que de una vez bajen las pistolas y te vienes conmigo- me rio a carcajadas.

-lo siento lindo eso será imposible, yo dije que eras sexy, no "oye soy estúpida, úsame"- le aclaro al tal Calem- escúchame Crimson , vamos a hacer esto, todo tu séquito se va a entregar junto contigo, eso es lo mejor- le recomiendo - a menos que quieran salir todos agujereados y metidos en una bolsa negra.

-eso debería que decirlo yo, no creo que salgas viva de aquí, la belleza no sirve cuando se trata de sobrevivir- eso me hace gracia.

-¿Sabes quien fue el primero al que le corté los testiculos? - pregunto irónica- fue al hombre que me torturo, mató a mis padres y me subestimó pensando que no iba a lograr salir de ese infierno, me dijo algo parecido a lo que tú me acabas de decir "tu belleza no te va a ayudar en la vida "lo que el no sabía era que yo además de hermosa soy inteligente y excelente matando y en torturando.

Recuerdo que yo le había rogado que no le hiciera nada a mis padres, que le daría todo lo que quiera de mi parte y el me dijo esa frase. La gente no se da cuenta que la belleza es una de las armas más mortales, con esa arma fue que logre seducir a los que me vigilaban cuando el hombre que mató a mis padres no estaba, al final terminaron todos asesinados por mi. Desde el momento en que vi morir frente a mis ojos a las personas que me dieron la vida me propuse a matar a todo el que interponga en mi camino. La belleza me ayudo muchas veces a conseguir lo que quería, así que la uso siempre que puedo como mi arma más letal.

-¿Quieres que te demuestre lo buena que soy? hagamos un juego justo, si yo sola consigo matar a todos tus 30 asesinos seriales tú te entregas, si tanta fe les tienes- me encojo de hombros todavía apuntándole, nunca hay que bajar la guardia.

-¿Te crees que me voy a tragar el cuento de que puedes a los mejores asesinos que tengo tu sola? - pregunta burlándose de mi, este hombre se está condenando solito.

-¿Entonces probamos o que? - pregunto mirándome las uñas como si fueran lo más interesante del mundo- me estoy aburriendo, dame mis juguetitos.

-yo te lo advertí linda, lastima que esa belleza se vaya por la borda- ¿ven que fácil que es manipular a un machito? - todos vengan ahora mismo al laboratorio, repito vengan ahora mismo.

-¿Estás loca? - me pregunta Maximilian muy cerca de mi oído para que los demás no escuchen.

-¿No confías en mi? - lo miro de reojo y el como respuesta se queda en silencio y mira hacia otro lado- que poca fe tienes en mi multicolor, pensaba que no dudabas de mi talento, veo que estaba equivocada.

Me alejo de él y me acerco a Calem como si fuera mi amigo de años, sus perros falderos al ver que me acerco me apuntan con sus armas pero le hago caso omiso ignorándolos, se que a menos que su jefe no les dé la orden ellos no van a hacer nada.

-mucho gusto, me presento como la mujer que te va a dejar tras las rejas y tal vez se divierta un poco contigo- me presento estrechándole mi mano- aunque no creo que compartas mi mismo nivel de diversión.