-Ten ponte esto-dijo el hombre de ojos grises-
El humo de su recién encendido cigarro, llenaba levemente la habitación.
La joven lo miró algo extrañada, pero no le importó y obedeció, se colocó la venda que el hombre le había dado.
-Hoy vamos a jugar-dijo con una sonrisa de oreja a oreja-Se perfectamente que te gustará cariño-
La joven asintió ya sin ver absolutamente nada.
-De rodillas-dijo suavemente-
No era un hombre especialmente dominante, ni ella era sumisa, era un juego que ellos dos tenían.
No era la primera vez que le vendaba los ojos, a ella le parecía excitante no saber exactamente que pasaba.
El hombre hizo un gesto y la puerta se abrió lentamente.
-¿Esta lista?-pregunto un segundo hombre-
-Si-respondió simplemente-
Conocía aquella voz, la conocía perfectamente, sabia lo que venia y se estaba excitando de sobremanera.
La mujer se movió incomoda, algo que Remus noto, se agachó para llegar a su altura.
-Se que estas mojada, puedo oler tu excitación de lejos-susurro-
La mujer suspiro y trago saliva, no veía nada, pero si que escuchaba absolutamente todo lo que pasaba en aquella habitación.
Escucho el cierre de un pantalón y por su mente pasaron miles de imágenes, que lo que conseguían era que estuviera cada vez mas excitada, sintió como uno de los dos hombres le tomaba la mano para posicionarla cerca de su semi endurecido miembro, lo envolvió y enseguida supo quien era.
-Rem-intento decir-
-¿Te hemos dicho que hables?-
La mujer negó y comenzo a mover su mano atraves de la longitud.
-Abre la boca-dijo después de un rato-
Obedeció y en pocos segundos noto como comenzaba a embestirle rápidamente en la boca, cuando noto que estaba cerca de su orgasmo, el hombre salió de la boca de la joven, dejando que está respirara con normalidad.
-Túmbate en la cama-dijeron ambos hombres al unísono-
La joven obedeció y se levantó del suelo para quedar tumbada en la cama, escucho como se acercaban, jadeo al notar que le quitaban la ropa interior.
-Esta empapada-dijo uno de ellos provocando una leve carcajada en el segundo hombre-
Noto que le pasaban dos dedos por los húmedos pliegues para directamente llegar a su entrada, comenzó introduciendo los dos dedos lentamente, al ver que se deslizaba fácilmente agregó un tercer dedo, haciendo que la mujer gimiera.
Rápidamente cambió sus dedos por su lengua, siguió hasta que noto que la mujer estaba a punto de llegar al orgasmo.
-Con nosotros sabrás que es el verdadero placer-susurro Remus-
La tomo de la cintura haciendo que la mujer enganchará sus piernas en la cadera del hombre, posicionó su miembro de tal manera que con un movimiento este se introdujera lentamente, provocando un gemido largo.
Tomándola del trasero, comenzó a moverla lentamente.
-Puedes gemir y gritar lo que quieras, no nos van a escuchar-susurro el hombre-
La mujer trago saliva, siguió moviéndola cada vez más rápido arrancándole gritos de placer, sintió a Remus detrás de ella.
-No necesita preparación, está acostumbrada ya-
En la cara del hombre lobo se formó una sonrisa lasciva.
Posicionó su miembro en la pequeña entrada y comenzó a introducirlo lentamente, dándose cuenta, de que efectivamente, entraba fácil, a pesar del grosor.
-Remus muévete-dijo la mujer-
El hombre obedeció y comenzó con embestidas lentas, mientras se acostumbraba a tenerlos a los dos, después de unos pocos minutos, ambos hombres comenzaron con embestidas más rápidas.
La mujer comenzó a gritar levemente, Remus se acerco a su oído.
-Se que lo estabas deseando, casi tanto como yo-susurro-Te gusta ¿verdad?-
La mujer asintió rápidamente.
Suspiro al notar que Remus terminó y gimió al sentir como salía de ella.
-Quítate la venda-
La mujer obedeció, se quito la venda y cuando se acostumbro a la vista sin ella, vio a los dos hombres con una sonrisa lasciva.
Se mordió el labio y sonrió.
-Sigue-dijo con una sonrisa-
La atrajo hacia el y la beso, la volvió a tumbar en la cama y siguió con embestidas rápidas, sintió como terminaba dentro de ella, miró al hombre que permanecía de pie.
-Yo no he terminado-dijo con un fingido puchero-¿Me ayudas?-
El hombre se acerco y paso los dedos, haciendo que la mujer se mordiera el labio, comenzó a gemir cuando noto que introducía tres dedos y comenzaba a moverlos rápidamente, minutos después llegó al orgasmo gritando.
-Por Merlín Remus-suspiro la mujer-
Ambos hombres se rieron levemente.
-Ha aguantado bien, ¿no crees?-
Remus asintió y dejó un beso en la frente de la joven, poco después salió de la habitación dejando a la pareja a solas.
-Sabía que te gustaría-dijo mientras se acercaba-
Se acostó a su lado y la mujer asintió lentamente, quedando dormida segundos después.
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One Shots +18
FanfictionOne Shots +18 Los one shots son de mi autoría, salidos de mi propia calentura. Las protagonistas de estos one shots NO son alumnas, serán profesoras y/o mujeres adultas.