Capítulo 3: Sentimientos familiares

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Pude sentir un dejavú en las clases de la universidad, solo escuchaba un blablabla, mientras en mi cabeza imaginaba muchísimos escenarios; necesito ir a bailar con Sero, opinar de superhéroes con Deku, tocar la cabecita de Darkshadow, reírme con Denki, ya suena maldito timbre, pero algo no me cuadraba así que necesitaba resolver mi duda con Shinso.
-Oye Shinso, ¿No se suponía que para curso de héroes eran sólo tres años?-
-Mmmmm si es así, pero decidieron prolongarlos para preparar mejor a los candidatos a héroes, creen que pueden lograr más experiencia, las cosas se calmaron un poco con la liga de villanos, no han atacado desde hace tiempo y eso calmó a todos incluida la comisión-
Un frío recorrió mi cuerpo, así que si existe liga de villanos, si puedo encontrar a Dabi en este mundo, el único problema es que no se donde buscarlo.
-Gracias Shinso, me sentía algo curiosa-
-No te preocupes, con gusto te ayudaré si te sientes atorada en alguna materia, después de todo a nosotros también nos van a incluir algunas materias para saber defendernos, espero estés lista con tu condición física-
Debe estar de joda, jamás he sido buena en deportes, no corro ni para ir al baño, no se que cara de preocupación haya puesto para que me dijera intentando calmarme:
-La materia la tomaremos con la clase 1-A, ellos nos van a enseñar algo de defensa y esas cosas, serán en parejas a veces o equipos, ellos aprobarán enseñando y nosotros aprendiendo.
Me parece lógico, si atacan a alguien debe saber defenderse pero me parece aún mejor pensar que tengo tiempo y me podré acercar a mis héroes, estoy nerviosa por saber que pasará.
-¿Y...cuándo son las clases?
-Mañana, así que te recomiendo descansar, me parece que tú tienes que ir viendo lo de tu mudanza a los dormitorios de la escuela, deberías hacerla el fin de semana para que no te sientas con pendientes-
-Te haré caso y de nuevo Gracias- Le dije mientras sonreía.
Sonó la campana de salida de clases y salí corriendo quería conocer allá ciudad, no me explico como tenía dinero en mi cartera, mi familia en la otra realidad si no era rica tampoco éramos tan limitados, así que me dirigí al centro comercial, solo quería recorrer mi nuevo hogar.
Perdí totalmente la noción del tiempo, cuando menos vi ya se hacía de noche, así que decidí volver a mi casa, iba de camino cuando sentí a alguien perseguirme, intenté meterme entre callejones pero seguían los pasos.
-Oye no corras, no podrás escapar-
Sentí escalofríos, no llevaba nada con que defenderme, no me di cuenta y tropecé con un bote de basura y me quedé siendo una bolita en el piso y cerré mis ojos, aquel hombre robusto y con barba se acercó a mi y antes que pudiera tocarme a mi,sentí un calor infernal.
-Pero que.....- se escuchó un grito desgarrador que terminó por ponerme la piel de gallina y no pude evitar soltarme a llorar.

Cuando abrí los ojos pude ver una silueta que se acercaba a mi a la vez que aún se veía el resto de llamas azules, mi corazón comenzaba a latir más rápido y por alguna extraña razón, no sentí miedo y deje de llorar secando mis lágrimas

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Cuando abrí los ojos pude ver una silueta que se acercaba a mi a la vez que aún se veía el resto de llamas azules, mi corazón comenzaba a latir más rápido y por alguna extraña razón, no sentí miedo y deje de llorar secando mis lágrimas.
Abrí mis ojos por completo al ver quien era.
-No te emociones, el tipo rechazó una propuesta y tuvo que ser eliminado, solo fue suerte tuya, llevaba meses buscándolo-
-D...Da.....Dabi...- sin que pudiera terminar la frase, me tomó de los hombros y me puso contra la pared, cerré mis ojos pensando que me lastimaría a mi también pero después deje de sentir la presión de sus manos en mi cuerpo.
Cuando abrí mis ojos pude ver su mirada completamente clavada en mi, se veía confundido, como si me conociera de algún lado y pude escuchar como tragó saliva.
-¿Cómo es que estás aquí?
Lo mire extrañada, y antes que pudiera contestar se escuchaba una sirena de patrulla acercarse a nosotros. Mire y regrese la mirada al azabache mientras él desaparecía en la obscuridad.
-Te encontrare niña-
Por algún motivo sus palabras no me asustaron, yo también quería encontrarlo aunque no esperaba ese primer encuentro.
Llegó la patrulla y tomaron mi declaración, una falsa declaración, no supe porque no quería delatar a Dabi, y a mi favor era que ya no había rastro de sus llamas azules. Dije que no había visto nada solo me asusté al ver la escena de crimen. Los oficiales me llevaron a casa, esa noche no pude dormir pensando en mi encuentro con el villano, y pensaba si despertaba aún seguirá aquí o regresaría a la otra realidad.
-Soy una tonta, desperdicie mi día en asustarme- dije mientras conciliaba el sueño.

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