III. Chica arregla pianos

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– Sí, Yuna...

La castaña hablaba más calmada, sentada en el asiento del copiloto, olvidando momentáneamente sus pies descalzados y el enojo y frustración que tenía hacia–su ahora–expareja. Agradeció a la torpeza y su ser naturalmente desorganizado que encontró la billetera y el celular en los bolsillos del abrigo, mas muchas de sus otras cosas quedaron en el bolso que Soobin tenía de rehén.

– Claro, espera...–movió los ojos entre la guantera del auto y una pequeña cajita adjuntada en la parte superior de la radio. Cogió lo que parecía ser una tarjeta de presentación–. Hwang Yeji, especialistas en pianos nuevos y usados. Si algo me sucede, ella será la culpable. –dijo sin pudor, teniendo al lado a la joven que le estaba salvando el trasero– Adiós, Yuna.

Colgó.

– ¿Arreglas pianos? –preguntó mientras seguía analizando la tarjeta–, ¿Los afinas? –alzó su vista y guardó la tarjeta en el bolsillo del abrigo.

Yeji, miró de reojo a su acompañante, sin dejar de prestar atención al tránsito nocturno. Trago saliva, sintiéndose nerviosa y respondió: –Sí.

Vio de nuevo, que Jisu–descubrió que ese era su nombre–, solo asintió y se golpeó internamente por no saber entablar una conversación o pedir disculpas adecuada por la descarada manera en que la miró esta mañana. Existen muchas coincidencias en la vida, curiosamente, Yeji se preguntaba como de todas las personas en el mundo se encuentra la mujer bonita del almacén.

Decide romper el hielo de la manera que mejor conoce, así que al llegar al semáforo en rojo, teclea rápidamente en la pantalla de su automóvil su aplicación de música, colocándole aleatoriamente lo que ella cree, es una reproducción de música pop. A todos sus acompañantes le gustaba la música pop.

Pero se avergüenza inmediatamente. Los parlantes, según Yeji, debía estar reproduciendo 'Issues' de Julia Michaels o quizá 'I know waht you did last summer' de Shawn Mendes y Camila Cabello, pero al contrario, descubre que sus dedos torpemente teclearon la playlist de música clásica y la pieza de 'Tanti Anni Prima' es la primera en reproducirse. Se alcanza a escuchar la viola y la seguidilla que le hace el piano, antes que Yeji detuviera la melodía cómodamente embriagante y a su vez, tristemente acertada.

Toma compostura y posiciona de vuelta la mano libre en el volante, siguiendo el camino que Jisu anteriormente le había dicho. Pero abre sus ojos, cuando siente la continua melodía que hace unos segundos había detenido. Gira su rostro, viendo como su acompañante se acomoda en el asiento, apoyando su cabeza en la ventana.

Yeji puede jurar que ella está intentando no llorar y eso le destroza un poco el corazón. Sintió la melancolía combinarse con el sentimiento de la música y la chica dando esporádicas miradas a sus descalzados pies para luego intentar perderse entre los lejos destellos de las luces de los pocos autos que andaban ya en las desoladas calles nocturnas de Seúl.

La monólida no dijo nada.

Giró a la derecha, adentrándose a la zona residencial e infinitas casas comenzaron a adornar la vista; luces prendidas, aparte de las farolas y el notorio ambiente familiar sobresalía ante Yeji.

– En este sector –apuntó Jisu, desabrochando anticipadamente el cinturón. La conductora asintió.

Estacionó el vehículo a la entrada de una gran escalera que daba directo a una mediana casa en lo alto. Apagó el motor, las luces y después de largos momentos dirigió su mirada a la castaña. La expresión neutra y notoriamente fría la hizo sentir nuevamente nerviosa y torpe, así que no supo si decir "Adiós" o "Perdón" por quinta vez en la noche (en su mente). Pero la más baja no hizo nada de ello, ni siquiera le dirigió una sola palabra y en cambio giró su cuerpo, tomando la manilla de la puerta para abrirla.

𝐏𝐈𝐀𝐍𝐈𝐒𝐓 | [yejisu - mini fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora