Scott y Olivia McCall son hermanos mellizos que viven tranquilos en el pequeño pueblo de Beacon Hills, hasta que una noche su mejor amigo Stiles los arrastra al bosque en busca de un cadáver, sin saber que Scott seria mordido por un misterioso anima...
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OLIVIA
Coraline, palomitas, tacos, mi hermano y la cama de mi hermano.
Simplemente la noche perfecta antes del primer día de clases. Me encontraba acostada junto a mi hermano mellizo Scott viendo mi película favorita mientras cenábamos.
Un ruido se escucho en el techo de la casa y le resté importancia, seguramente era alguna ardilla o la rama de algún árbol.
—Liv, ¿escuchaste eso?, creo que alguien quiere entrar en la casa— la alterada y chillona voz de mi hermano se hizo presente.
Rodé los ojos.
—Scott, estoy segura que solo fue el viento o una ardilla— seguí comiendo tacos. —Ahora guarda silencio y sigue disfrutando de la película y tu taco.
— Olivia creo que deberíamos revisar, solo para estar 100 por ciento seguros de que solo es el viento. — dijo poniéndole pausa a la película.
Lo mire un poco molesta por interrumpir la película y mi tranquila noche.
—Vamooooos Liv, por favor. — susurró suplicante.
—Agh, está bien vamos, pero lleva el bate por si acaso. — me levanté de la cama y bajamos las escaleras, me dirigí a la cocina en busca del spray insecticida, tal vez me equivocaba y era una persona, me uní junto a mi hermano para abrir la puerta principal, mamá se encontraba trabajando por lo que nuestra única protección era el bate de béisbol y el insecticida.
Scott me miro y asentimos dándonos a entender que estábamos listos.
Otro ruido se volvió a escuchar del techo. Nos sobresaltamos un poco y Scott se puso detrás de mí.
—Aw que lindo hermanito, gracias por protegerme— murmure viéndolo un poco incrédula, el sonrió inocente y se puso de nuevo a un lado mío — Bien aquí vamos, pero por cualquier cosa ten el bate listo y golpea a quien sea que este afuera con todas tus fuerzas mientras yo le roció insecticida en la cara.
Mi hermano asintió, a la vez que abría la puerta principal. El ruido se escucho una vez más y después nuestro mejor amigo Stiles Stilinski cayó de cabeza sosteniéndose con sus pies del techo. Scott y yo gritamos asustados mientras el alzaba el bate y yo el spray haciendo gritar a Stiles también.
