Scott y Olivia McCall son hermanos mellizos que viven tranquilos en el pequeño pueblo de Beacon Hills, hasta que una noche su mejor amigo Stiles los arrastra al bosque en busca de un cadáver, sin saber que Scott seria mordido por un misterioso anima...
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Estaba sentada en las gradas viendo la práctica de los chicos.
—¡Vamos, vamos! — grito el entrenador— Entrenamiento uno a uno. ¡Jackson! — grito otra vez. Diablos no se como Bobby no se daña la garganta de tanto que grita. — Hoy toma un stick largo— mi amigo asintió y tomo el stick largo y se lo mostró al entrenador —¡Ese es mi chico!
Jackson se posiciono en línea de defensor y el entrenamiento comenzó. Uno a uno salió todos los jugadores tratando de pasar por Jackson para anotar un gol, pero él se metía y bloqueaba los tiros y tiraba a los jugadores al suelo.
Todo iba bien hasta que fue el turno de mi hermano.
—¡McCall! — grito el entrenador, Scott estaba distraído—¿Qué esperas? — le pregunto y por fin Scott se dio cuenta que era su turno. Mi mellizo se preparó y le lanzo una mirada a Jackson, estaba segura que era una de desagrado. El entrenador hizo sonar el silbato y Scott salió corriendo al llegar Jackson lo derribo. Stiles y yo cerramos los ojos debido al golpe.
¿Enserio Whittemore debe ser tan brusco?
—¡Uhhh McCall! — hablo el entrenador mientras caminaba hacia el —Mi abuela puede moverse más rápido y adivina que... ¡Esta muerta!
Vi un poco asustada la escena, Scott podría perder el control y crear una masacre en este momento.
—¿Crees que puedes moverte más rápido que el cuerpo sin vida de mi abuela?
Jackson sonreía burlonamente.
Lo odio. Bueno no, pero en estos momentos sí.
—Si entrenador.
—No te escuchó.
—Si entrenador— dijo un poco más fuerte y claro. Podría jurar que en cualquier momento se transformaría o tal vez ya lo estaba.
—Entonces hazlo de nuevo— ordeno Bobby— ¡McCall lo hará de nuevo!, ¡McCall lo hará de nuevo!
Scott volvió a posicionarse.
—¡Vamos! — grite y el entrenador hizo sonar el silbato.
Scott corrió rápidamente y esta vez derribo a Jackson. ¡Mierda hasta a mí me dolió! Me levanté de la grada donde estaba sentada y corrí lo más rápido que pude hacia Jackson, mientras que Stiles se dirigía hacia Scott. Jackson empezó a quejarse de dolor en su hombro.
—Diablos, bueno te lo merecías un poco por ser tan idiota con mi hermano— dije reprochándole un poco, le ayude a levantarse y me gane una de sus miradas de pocos amigos. Enarque una ceja —No me mires así, Whittemore.
—Me duele mucho— se quejó.
Negue con la cabeza y rodé los ojos.
Mi vista se desvió a Scott quien se dejó caer de rodillas al suelo y son sus manos se agarró el casco. Demonios odio no poder escuchar lo que le dice Stiles. Ellos se fueron rápidamente de la cancha. El entrenador y algunos jugadores de lacrosse llevaron a Jackson a la enfermería. Preguntare por el después.
