Hoy se bebe, hoy se sale, ser bueno y fiel ya de nada vale
Por mujeres como tú es que dicen que todos los hombres somos iguales
Si no me conoces no me señales, ya yo me conozco tus males
Como Hector el Father, hoy yo salgo pa' la calle con to' mis anormales
Alec
*Pasado*
Es jueves de la primera semana escolar y la verdad siento como si hubiera pasado un mes, el cansancio me está matando pero a pesar de todo, este año debo aprobar todas las materias para conseguir algún beneficiario por parte de mis padres, aparte me ayuda con mi reputación.
Comencé a llevarme de maravilla con Aradia, es una chica que tiene ese algo que la hace demasiado agradable pero al mismo tiempo es el mismo diablo encarnado ya que tiene un carácter demasiado fuerte, un dato que me da mucha risa recordar, es que ama el chocolate y cada y que come uno, lo disfruta como si fuera el último que hubiera en el mundo, ni hablemos de su estatura ya que con los zapatos que utiliza se ve muy alta, pero cuando la vi sin tacones pude notar que es realmente bajita, de ahí su apodo "Mi Umpalumpa" .
Iba caminando a la salida de la escuela cuando Lizzy se me acercó un tanto sospechosa.
-Alec! ¿Podemos hablar?-
- ¿Sobre qué?-
- Pero necesito que sea en un lugar más privado, podríamos ir a comer, yo invito-
- Está bien, pero todo corre por mi cuenta- obviamente no iba dejar que pagara ella, podría ser un hijo de puta pero seguía siendo un caballero.
Llegamos a un restaurante no muy lujoso pero en el que servían comida exquisita. Por alguna extraña e irritante razón, Lizzy empezó a evadir el verdadero tema de conversación y comenzó a hablar de un montón de cosas que ni siquiera entendía y la verdad no tenía tiempo para andar con sus jueguitos.
- Elizabeth basta! ve al punto de ésta conversación, sino para irme ya que tengo asuntos pendientes- me levanté de la silla.
- No! Alec espera, te lo diré pero por favor no te enojes-
- Dilo de una buena vez Elizabeth-
- Quiero que entre tú y yo exista algo más que una relación física-
- Pierdes tu tiempo, sabes lo que pienso de eso querida- la interrumpí.
- Lo sé, pero ponte a pensar, soy la única chica con la que has repetido tus sesiones de sexo intenso, y sé que me dirás que amas tu vida de soltero pero dame una oportunidad de demostrarte que puedo hacer lo que las demás no-
- Lizzy basta, no quiero formalizar nada, tú sabes que no me gusta ni soy de estar amarrado a una sola persona-
- Y si te digo que puedes seguir con las demás pero tener una relación conmigo, algo así como una relación abierta-
- ¿Por qué quieres formalizar algo tan repentinamente?-
- Porque ya no puedo seguir fingiendo que solo quiero algo físico y sin sentimientos, de verdad quiero estar contigo y me adaptaré a ti, dame una simple oportunidad, solo eso te pido-
- Solo una, si no funciona entonces lo dejaremos como lo hemos estado haciendo y nada de celos o toxicidad-
- Lo prometo-
- Una cosa más, para mi ésta relación no tiene mucha importancia, solo es un cuento que te dejaré creer, el día que mis sentimientos sean reales te lo diré de frente, ¿Entendido?-
- Si, está bien, haré lo posible porque te sientas bien conmigo-
Creí que Lizzy de verdad se sentía bien conmigo y yo entré en una especie de confusión entre ella y Aradia ya que no sabía cuál de las dos me gustaba más o si verdaderamente sentía algo por alguna de ellas. Me di cuenta de que Lizzy solo quiso formalizar algo porque quería joderla, quería hacerle la vida imposible a Aradia ¿Por qué? no sé, solo sé que
Aradia se enamoró de mí y Lizzy le ofreció su ayuda pero como era de esperarse, ella la apuñaló por la espalda.
*+*+
*Presente*
Ahí estaba yo, en el centro comercial observando deslumbrado a una chica que estaba metida en un disfraz de diabla que le quedaba a la perfección.
- Hola mi amor- dijo Lizzy desde el extremo de los probadores.
- ¿Elizabeth? ¿Qué haces aquí?-
- La pregunta es ¿Tú que haces aquí con ella?- dijo mirando a Di de pies a cabeza
No sé porque Aradia lucía demasiado insegura con ese disfraz, nunca la había visto así y cuando Lizzy dijo eso ella se metió corriendo al vestidor, eso sí que me molestó y la verdad ya estaba harto de sus celos hacia ella.
- Elizabeth hablemos en privado-
- Pero mi amor-
- Mi amor y una mierda, tú te sales de aquí, conmigo, ahora- la tomé lo más fuerte que pude del brazo y la saqué del centro comercial, la verdad no me importaba lastimarla, ya estaba cansado.
- Alec me lastimas-
- La verdad es que ya no me importa lastimarte Elizabeth, me tienes harto, ¿Qué mierda tienes en contra de Aradia como para que quieras joderla utilizándome o haciéndola sentir insegura de sí misma?-
- No sucede nada-
- Bien, porque de ahora en adelante si intentas joderla, lo harás tu sola pero ojo, me encargaré de que todo lo que le hagas te sea cobrado al doble-
- ¿Qué quieres decir?-
- ¿Qué crees que quiero decir?-
- ¿Estás terminando conmigo?-
- No, estoy terminando con ésta relación de mentira, con tu maldita fantasía-
- Pero Alec yo te amo-
- Si me amaras no intentarías controlarme-
- Pero...-
- Pero nada Elizabeth, esto se acabó, si me disculpas tengo que volver con los chicos-
- Alec no puede...-
- Si puede terminar así Elizabeth y ahora vete, no quiero verte y no estoy para lidiar contigo-
Regresé con Steven quien aún estaba en la tienda buscando entre otros disfraces.
- ¿Dónde está Aradia?-
- Fue a pagar los disfraces y me dijo que no te dijera porque podías querer pagarlo tú así que finjamos que no te lo dije-
- Ah okay-
- Ven ya volví... Alec creí que te habías ido con Lizzy-
- Sobre eso... Yo... Terminé con ella-
- ¿Qué?- dijeron los dos al unísono.
- Pues era una relación tóxica, pero no hablemos de eso, los invito a comer y todo corre por mi cuenta ya que Aradia pagó los disfraces-
- Ven!- lo regañó ella y yo solo me reí.
Pasé un buen rato con los chicos, realmente no creí que me fueran a hacer reír tanto y después de comer nos fuimos a conseguir el trabajo del cual nos había hablado Di.
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Un Pacto A La Luz De La Luna
Novela JuvenilEsta es una historia en la que la confusión va más allá del amor y sus límites, te lleva a pensar si realmente amas a alguien o si el sentimiento va más allá de eso... Ella es nueva en el país. Él, un chico sin compromisos, ambos tienen algo en comú...