Carta Número 6

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La sensación del agua sobre sus pies despertó a Louis, le costó un poco comprender que se había quedado dormido en la arena. Estirándose se fijó la hora en su reloj y vió que pasaban de la 8 de la noche.

-Dormí por mucho tiempo - Exclamó a nadie en particular.

Se levantó del lugar y se dirigió al hotel para darse un baño y revisar unos trabajos que le habían enviado por correo. Cuando terminó con todo se debatió entre acostarse a dormir o leer la sexta carta acompañado por su fiel compañero: el café.

-No te desesperes Louis, las cartas de Harry
seguirán allí mañana - Se dijo a sí mismo, así que a regañadientes se preparó para dormir.

Una vez en la cama sintió como que algo le hacía falta.

Pensando se dió cuenta de que se trataba aquello, se levantó y se fué a buscar la carta que tenía guardada en el bolsillo de su chaqueta aún sin deshacer, de allí extrajo la sexta carta y apresuradamente volvió a la cama, abrazando con fuerza aquel sobre se quedó profundamente dormido.

...........

Una suave mano le acariciaba su mejilla, lentamente abrió los ojos y se encontró con Harry que lo observaba con aquella hermosa sonrisa que mostraba sus hoyuelos.

-Estás aquí - Murmuró Louis

-Nunca me fuí completamente angelito - Le contestó sin borrar la sonrisa de su rostro.- Eres hermoso cuando duermes, ¿lo sabías?

Él sonrió bajando la mirada hacia la sábana sintiéndose tímido de repente. Aquello era muy raro, Harry siempre le había dicho cosas lindas y él nunca se sintió tímido.

-Seguro que parezco uno loco con todo el pelo revuelto.

-Siempre fuiste un loco, con o sin el pelo revuelto - contestó Harry con una sonrisa irónica.

-Jaja que gracioso.- Replicó fulminándolo con la mirada.

-Angelito, solo vine a ver si estabas bien… ahora me tengo que ir.

-¿Por qué? Acabas de llegar… yo te extrañé mucho.- Contestó haciendo un puchero.

Él le acarició lentamente el labio, lo cuál provocó que el rostro de Louis se tornara de un rojo intenso

- Sabes que nunca me resisto cuando pones esa cara, pero me es imposible quedarme. Solo te digo que continúes leyendo las cartas y recuerda que cada vez que abras un sobre yo estaré a tu lado aunque no me puedas ver.

Lágrimas comenzaron a brotar de los ojos de Louis.

-¿Por qué lo hiciste?- Preguntó entre sollozos y volviendo a bajar la mirada hacia la sábana.

Harry lo tomó por la barbilla y lo obligó a mirarlo, fué secando cada lágrima que se le escapaba. Estuvieron así por un largo rato, ojos verdes contra ojos azules.

Harry fué el primero en romper el contacto deslizando su mirada a los labios de Louis y suspirando dijo:

-Solo lee las cartas.

Y dicho esto se fué acercando lentamente hasta que sus labios estuvieron unidos por completo. Louis sin pensarlo dos veces le devolvió el beso colocando sus manos el cuello de su amigo. Nunca se había sentido tan bien en su vida. Él lo tomó por la cintura y lo acercó más a su cuerpo con un fervor que él no sabía que tenía.

Louis sintió como si el mundo hubiera desaparecido a su alrededor, no quería dejar de besarlo nunca, pero Harry cortó aquel maravilloso beso y acariciándole dulcemente la mejilla le dijo en un susurro.

17 cartas de amor [adapt. L.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora