« 𝗟𝗲𝘀'𝘁 𝗽𝗹𝗮𝘆 𝗡𝗶𝗸𝗶! ꗃ 𝗝𝗮𝗸𝗲𝗸𝗶.

O2.♡

- A Niki nunca le advirtieron que cuando encontrará a su pareja destinada, este sería una bolita de amor, que solo quiere su protección, el llenarle de mimos, y tenerlo entre sus brazos, o tal ves necesita jugar todo el día con el. Ya que cuando le preguntaron en sus clases de etiqueta, "¿Cómo quieres que sea tú alfa?" Este solo pudo responder, lindo, atentó, cariñoso, responsable, protector, pero sobre todas aquellas cosas, quería que lo amase con todo su corazón.

Pero nunca pensó que cuando lo encontraría sería hasta mejor de lo que alguna ves pensó que este sería, le gustaba mucho Jake, de eso estaba muy seguro, su personalidad juguetona lo atrapó desde un inicio, sus cuidados e atención definitivamente fue la cereza del pastel para que el peli rubio cayera muy enamorado de ese hombre, por tales razones no quería dárselo a nadie más, ese Alfa le traía mucha felicidad como tranquilidad, así que pobre el beta u Omega quien quiera a su alfa, que el no lo dejaría solito.

Jakey era de Nini y Nini era de Jakey.

Amaba a ese muchacho pero en situaciones como esa quería darle golpecitos en su firme pecho para que lo soltase, ya que sus piernitas se estaban durmiendo por la posición un tanto incómoda que habían optado por usar.

Shim estaba abrazando lo de una manera muy firme mientras sus piernas aprisionaba su cintura, este escondiendo su cabeza en su cuello, como un koala lo tenía, después estaba la perrita de su pareja sobre sus piernas dormida, no lo dejaba moverse para nada, dios, quería mucho a ese par pero ya sus piernitas estaban dormidas, dándole esa sensación de hormigueo.

Un puchero apareció en sus labios pétalos de flor al intentar moverse pero de verdad que no podía, esos dos estaban dormidos, parecían que estaban en el quinto sueño, sobre todo parecían rocas.

─ ¿Qué hago? ─

Su vista se dirigió a su derecha donde descansaba su novio, dormía tan pacíficamente que Riki en esos instantes se sintió un poquito egoísta al saber del cansancio que este tenía, y que para la desgracia del alfa, solo podía dormir tranquilo con su aroma cerca o con el mismo entre sus brazos.

Suspiro, dejo de intentar el escapar de su agarre.

Conocía a su novio, fueron modelos infantiles juntos, lo siguieron siendo para la preadolescencia, ahora que el era un adolescente, y Jake se estaba convirtiendo en un adulto joven todo era un poco más difícil de llevar, el estrés atacaba de una manera rápida a su novio, no lo hacía con frecuencia pero cuando ocurría eso era un tanto preocupante, pero para eso estaba Niki, para ser un soporte para su JaeYoon.

La perrita de su alfa despertó, de manera inmediata salto de la cama, dejando libres las piernas del Omega peli rubio, que rápido se dió la vuelta en su lugar para quedar al frente del rostro de su amado. Sus ojitos curiosos viajaron por todo el lindo rostro de tal, su piel bien cuidada, sin ningún intruso en ella, sus bonitas cejas, esa naricita que Nishimura le gustaba besar, sus dulces labios, que fácilmente podía compararlo con dos bombones de chocolate, sus pestañas que descansaban en las bonitas mejillas, si, el Omega se había sacado la lotería.

Lindo, lindo, lindo, mío, mío, mío.

Hasta su lobito estaba de acuerdo con que su pareja era muy lindo y que solo le pertenecía a ellos dos, sonrió en grande ante aquel pensamiento. Importando le poco, beso las dos mejillas de su peli negro, el cual sonrió entre sueños, ¡Lindo, muy lindo!

Ahora sus labios se dirigieron a la nariz de este, si, dejo un besito en ella solo para escuchar después un pequeño estornudo por parte de Shim, cosa que lo hizo reír.

─ ¿Qué es tan gracioso? ─

Con la voz un tanto grave por el a ver despertado, con su ceja izquierda alzada, acompañado de una sonrisa burlesca, miraba al menor que por la penita de ser descubierto estaba con esa pequeña capa de rubor natural.

Por impulso Niki le regaló un golpecito en el pecho de este para esconderse de tal, aún era un cachorro muy penoso cuándo se trataba de esas situaciones que vivía con su alfa, y este mismo le encantaba el hacer aparecer ese color rosadito en sus mejillas, nariz e orejitas, ¡Jakey muchas veces era malo con el corazoncito de Nini! ¿No sé daba cuenta que lo aceleraba mucho, pero muchito?

Bonito, bonito, bonito, Omega mío.

El lobo de Shim en esos instantes saltaba en sus dos patas traseras al tener a su destinado en ese estado, era tan lindo, que en esos momentos quería llenarlo de besitos, lo único que se lo impedía era su aliento de recién levantado, iugh, no era un cerdito, pero en cambio podía hacer otra cosita que sabía que le gustaría a su menor.

Quitó sus piernas de la cintura del Omega, solo para alejarse levemente de el, colocando se posteriormente encima suyo, sonrió en grande al ver la confusión de este, ¡Aún así era muy lindo!

─ ¿Jugamos Niki? ─

─ ¿Ah?, ¿Qué quiere jugar, hyung? ─

─ ¡Guerra de cosquillas! ─

Comenzó a atacar a su menor con sus ágiles manos, escuchando la dulce melodía que eran para el la risa de este, si, aún con el pelito despeinado, con aquellas lagrimitas saliendo de sus ojitos por la risa causada, la ropa toda arrugada, sus mejillas con ese color rosadito, para los ojos de Jake era la cosita más tierna que alguna ves vería en su vida, daba gracias a la diosa Luna por darle tremendo ser para acompañar lo el resto de su vida

Aunque de tanto estar admirando lo no supo en que momento esto lo corrió a su lado de la cama, al ya tenerlo acostado lo ocupo como cama a el.

Sonrió.

─ Hyung es muy malo.─

─ ¿Por qué soy malo bebé? ─

─ Por qué es muy lindo, no sabe que con sus acciones hace que mi corazoncito salte.─

─ ¡Aigoo!~, muy lindo mi vida, pero también déjame decirte que Nini es igual de malo, hace que mi corazón quiera tenerlo cerca siempre.─

─ Si fuera por mi, siempre estaría a su lado hyung.─

Jake hizo sonrió levemente, agh, el de verdad que quería eso, pero no podía, así que con sus dedos aparto los mechones rebeldes del rubio para dejar un besito en su frente, y con los mismos quitar cualquier rastro de lágrimas de su rostro.

Omega mío.