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- El maquillaje que llevaba puesto lo estaba incomodando un poco, eran muy lindas las múltiples calcomanías que estaban colocadas sobre todo su rostro, estás eran de distintos tipos y formas como de distintos colores, hasta algunas tenían deliciosos aromas, también estaba los brillitos de varios colores que le colocaron a sus mejillas, acompañado de eso estaba el rubor artificial que le colocaron, mientras adornando su naricita estaba una bendita para niños con dibujitos de perrito en ella, eso sumando le a su vestimenta de colores llamativos con una talla más que la suya, lo hacía ver extremadamente adorable.

¡Y eso que Jakey era un Alfa!

Bueno, no solo era el maquillaje que lo tenía incómodo, del mismo modo teníamos a las viejas cochinas que le había mencionado Niki hace algunos días viéndolo, como si fuera la última rebanada de tarta de manzana, bueno, sabía que era muy lindo, pero esas miradas no le gustaban para nada, ya que de una manera no muy linda decían que se lo querían comer; Y la otra cosa era que su Omega aún no terminaba sus fotografías, llevaba sentado en ese columpio por más de treinta minutos esperando lo, pero aún no salían de las fotos con los juegos infantiles.

Eso era fácil, solo era jugar con ellos, posando de ves en cuando, haciendo sonrisas mientras el fotógrafo las tomaba, ¿Debería ir a ver cómo va? No quería parecer un metiche, pero eso era lo que sería de todos modos, aunque por otro lado solo era un Alfa preocupado por la seguridad y bienestar de su precioso Omega, solo era eso.

Se mordió el labio inferior, manía que optaba por hacer cada ves que estaba indeciso o estaba preocupado por algo.

─ ¡Ay! ¿Viste como le hizo unnie?, ¡Es más lindo en persona! ─

─ ¡Boba! Habla bajo, te puede escuchar.─

Bufo con fastidio al escuchar los mal ocultados murmullos de aquellas dos omegas, como sus insoportables chillidos cada ves que respiraba, no le caían mal, simplemente no estaba en condiciones para tratar a alguien de buena manera, no hasta que supiera que le pasaba a su peli rubio.

Se levantó del columpio dispuesto a buscar a su novio, captando así la atención del staff presente, cosa que ignoro comenzando a caminar dónde los juegos infantiles estaban, sin embargo ni medio paso logró dar ya que ciertos brazos que conocía perfectamente se enrollaron alrededor de su cuello mientras de igual manera las piernas del mismo en su cintura.

Sonrió grande, lo tomo por debajo de sus pompis para no hacerlo caer al suelo mientras con esa acción de paso lo pegaba a su cuerpo en señal de protección y posesividad, ojo, Jake no era de ese tipo de Alfas solo no le gustaba a su lobo que su destinado estuviera solo con un beta, que por muy de su confianza fuera no sabía que le pudiera hacer a su bebé.

Nego con su cabeza divertido al sentir como Riki le daba pequeños besos en su cuello - dónde con anterioridad se había ocultado - escucho las risas traviesas de tal.

─ Bueno chicos, hicieron un buen trabajo.─

─ ¿Está completo todo? ─

─ Aún faltan las fotos juntos pero eso fácilmente se pueden hacer otro día, ya es muy tarde, el niño se puede enfermar.─

El peli negro solo asintió de manera lenta, no era que le desagradara la idea de aquello pero le era raro que no terminarán la sesión fotográfica ese mismo día. Prefiero quedarse callado ante sus pensamientos, para ir con el staff correspondiente en busca de su ropa como la de su Niki, así también quitarse ese maquillaje, que aunque lo hacía lucir más lindo y hacía juego con el del rubio que tenía a su lado, debía quitárselo, sentía que su cara se estaba comenzando a irritar.

¡Ñum!

─ ¡Niki! ─

Escucho las carcajadas de su menor, este soltando se de su frágil agarre para salir corriendo dónde anteriormente estaba ubicado con el camarógrafo.

¿Enserio lo había mordido? ¡Su bebé no puede estar volviendo se salvaje!

Así comenzó una persecución por aquel amplió parque para niños entre un Omega un tanto travieso como un tanto tímido y un juguetón e risueño Alfa que solo buscaba como devolver le lo que en algún momento le hizo a su pobre cuello. Se supone que es el Omega quien carga con la marca, no el Alfa.

Shim puchereo al ver a su amado arriba del tobogán con una linda sonrisa burlesca.

─ Nini es malo con Jakey.─

─ Nini solo juega, no es malo con Jakey.─

Ahora era turno del menor para pucherear de una manera tierna haciendo derretir el pobre corazón de Shim. El solo quería que su peli negro se subiera al tobogán con el, tal ves para botarlo, pero nada más.

Muchos tachaban a Jake como un anti sistema, bueno hasta el mismo se decía así, una muestra clara de ello fue que no se subió por las tontas escaleras, claro que no, subió por el mismo tobogán hasta estar frente al de ojitos afilados que encontró buena oportunidad para deslizarse por tal jueguito de niños, obviamente llevándose a su alfa, quien se aferró a su cuerpo como si su vida dependiera de ello - lo hacía.-

─ Quedaron perfectas, gracias Riki.─

─ No hay de que hyung.─

─ ¿¡Qué!? ¿¡Esto era un plan macabro creado por el amor de mi vida y mi hyung favorito!? ─

─ ¿Ya estás de exagerado JaeYoon? ─

─ ¡La traición hermano! ─

El fotógrafo solo rodó sus orbes en señal de fastidio para después alejarse del par de enamorados, mientras el modelo menor acariciaba con cariño los bonitos cabellos ondulados de su novio, ya que este mismo estaba oculto en su cuello. . . Esperen.

¡Ñom!

─ ¡Hyung! ─

Lloriqueo, Jakey era malo con Nini.

El alfa no hizo caso a sus quejas después de todo no se arrepentía con lo que hizo, en cambio solo le regaló una amplía sonrisa mientras de una manera más suave mordía las mejillas sonrojadas de su menor.

Uy, sin darse cuenta, las viejas cochinas estaban mirando.

Ñom, ñum, ñam, ¡Delicioso!

Ñom, ñum, ñam, ¡Delicioso!

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