✦IV: SEGUNDO INTENTO✦

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- ¡Pero si parece un rascacielos! ¿Cómo va a estar en su aula? - preguntó alarmada Nayeon, mirando a sus dos amigas

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- ¡Pero si parece un rascacielos! ¿Cómo va a estar en su aula? - preguntó alarmada Nayeon, mirando a sus dos amigas.

-Pues sí, se llama Jeon Jungkook, y estudia con nosotras. - aclaró la más alta.

-Eres una asalta cunas, Im. - empezó a bromear Dahyun, golpeando suavemente el codo de su amiga.

-Pero... Pero... - balbuceo la mayor de las tres.

-Unnie, dijiste que harías algo, háblale. - reclamó Sana, más que todo, animando a su amiga a hablarle al chico que le gustaba, sin importarle que fuera compañero suyo, mucho menos que fuera dos años menor que Nayeon.

-Es que... Yo no... Pero... Él... Agh... - Nayeon era incapaz de poder expresar una oración completa de los nervios que le daban, ni siquiera le gustaba Jungkook pero igual le aterraba hablarle a un niño que no conocía de nada, en especial siendo mayor que él, eso ponía en un riesgo absurdo su reputación.

-Nada de nada... Usted va a ir y va a hablar con él. - zanjó Dahyun en un tono gracioso, y acto seguido, empujó levemente (con ayuda de Sana) a la otra coreana en dirección a dónde se encontraba el susodicho.

Nayeon no había dado ni dos pasos cuando ya se estaba arrepintiendo de este plan tan ridículo.

« ¿En qué cabeza cabe eso de escoger gente así a lo loco para pretender que estoy enamorada de ellos, este plan es absurdo y ridículo, definitivamente mi cerebro no sirve ni para... »

Sus pensamientos (o mejor dicho, sus quejidos internos) fueron interrumpidos por la agradable y dulce voz de la japonesa.

- ¿¡Quieres que te acompañemos!?

- ¡No, gracias! ¡Estoy bien! - negó, la idea era que mientras más tiempo a solas compartiesen aquellas dos, mejor.

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El viernes en la mañana, mientras desayunaban, Sana y Dahyun no podían evitar intercambiar chistes acerca del oso que había pasado Nayeon con Jungkook. Resulta y acontece que el chico casi enloqueció al verla, ya que era muy tímido, incluso una compañera de ellas siempre trataba de acercarse a él y él coreano de una u otra manera acababa ignorandola por completo. Él no era de llevarse mucho con las chicas. Y como si no fuera ya suficiente con el hecho de que Jungkook literalmente huyó de Nayeon; a parte de eso, también se dio cuenta de que dos de sus compañeros de clase eran amigos del joven Jeon y que se habían percatado de que probablemente a ella le gustase él, por la forma en la que la mayor se había acercado a hablarle.

Así que ahora, Im le huía a Park y a Kim como diese lugar.

-Jamás olvidaré la cara que puso. - comentó Sana.

Don't Say Anything, Nayeon. ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora