En la costa la muerte se asoma,
con su cabello blanco y lanza.
El menor no lucha,
solo sonríe.
Entrega su vida
para nadar en la paz eterna.Su pecho atravesado.
Un último aliento.
En las olas su cuerpo cae,
sin vida.Las aguas dejan de brillar,
y lentamente se van desvaneciendo.Las sirenas escondidas entre las rocas,
lloran por su libertad. Aúllan de felicidad.Él lo ha matado.
Al menor.
Pobre Kenn.«La cacería comenzó, la cacería comenzó, la cacería comenzó.»
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Hijos del mar
Fantasy«Cuatro hermanos, sedientos de venganza, malditos por el agua. A por ti van.» Cuando la guerra en el océano se desata, las alianzas se forman y se deshacen tan rápido como la espuma. Los bandos cambian como las mareas y la luna guía sus elecciones. ...