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Todo se había convertido en escombros. El polvo rodeaba los cadáveres de los que un día fueron sus amigos y compañeros.
Ahí estaba Steve, tendido en el suelo, rodeado del desastre que había causado.
A lo lejos, veía Nueva York, o mejor dicho, lo que quedaba de ella.

- Ha sido todo por tu culpa - murmuró una voz muy familiar - Tu eres el responsable

Aquella voz pertenecía a Tony, quién aún agonizaba de dolor dentro de su armadura.
Rápidamente se arrodilló a su lado y agarró su mano. Trató de ayudarle, pero sabía que ya no podía hacer nada.

- Te llaman héroe en todo el mundo y ni siquiera pudiste salvar tu propia ciudad - continuó diciendo Tony - no eres nadie Rogers, no eres Nada

Sintió como el pulso de Tony se detenía y su mano comenzaba a enfriarse alrededor de la suya.
De pronto notó una fuerte sacudida en su hombro, era Tony, quien le ofrecía una taza de café caliente.

- Si querías dormir hasta tarde podías al menos haberme avisado y así no hubiera tenido que madrugar - dijo fingiendo molestia -¿Estás bien? Estás sudando

- Si, si....estoy....estoy bien - respondió Steve - Solo algo dolorido por lo de anoche

- Hablas como si hubiéramos tenido sexo, Capitán - dijo Tony riendo

Un fuerte rubor se apoderó de las mejillas del rubio.

- ¿Qué?? No! Yo....yo me refería a....

- Lo sé, lo sé. Era sólo una broma - le quitó la taza de café una vez que Steve se lo bebió - Vístete, nos vamos a Shield

-¿Ahora?

- Sí, ahora - insistió Tony - Tenemos que encontrar alguna pista de lo que esconde mi padre

Una vez en Shield, Steve ya vestía aquel uniforme que Tony le había conseguido, o mejor dicho, que había robado para él

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Una vez en Shield, Steve ya vestía aquel uniforme que Tony le había conseguido, o mejor dicho, que había robado para él.

- Yo iré al despacho de Howard, tú quedate a vigilar la entrada - dijo Tony

- ¿Por qué siempre haces tú lo más interesante ? - preguntó Steve molesto

- Muy simple, porque a tí ellos no te pueden ver, a mí sí - sabía que Rogers no le podía quitar la razón, no en ese momento - Ahora, si no te importa, será mejor que utilices tus dotes de distracción

-¿Por qué lo dices?

- Por eso - dijo Tony señalando la entrada del Edificio - Parece que vas a tener que hacer un nuevo amigo para evitar que nos pillen

Allí estaba Daniel Sousa.

- Tony, no creo que....

Pero tony ya se había ido.

𝕊𝕖𝕣𝕖𝕟𝕕𝕚𝕡𝕚𝕥𝕪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora