Príncipe Concubino

Capítulo 13: ¿Traición?

Después de tiempo de estar en el jardín decide regresar a su habitación. Aún quería hacer muchas cosas, pero tampoco podía. No podía estar por ahí caminando y que toda la gente lo vea, debía mantenerse oculto hasta que su hermano le diga. Si alguien les traicionaba o había algún espía, podían decirle a Taehyung que ya lo habían encontrado y estaba en el palacio del Norte.

Sabía que si Taehyung se enteraba que estaba ahí iba a ir a buscarlo para seguir con ese matrimonio por un capricho suyo. Hasta ahora no entendía por qué estaba casado con él si no lo quería.

O eso pensaba el menor, porque la verdad era que Taehyung se había dado cuenta de el gran error que había cometido con Jungkook. Estos cuatro años estaba buscando a Jungkook, pero no por un capricho, sino, porque realmente estaba preocupado por él. Un omega, varón o mujer, estaban en peligro con la sociedad que tenían. No podían estar solos por ahí y peor si les venía su celo.

Estos cuatro años habían sido suficientes para que el alfa madure y deje de lado esa actitud de superioridad hacia los omegas. Y eso, ¿por qué había sido? Su cambio comenzó desde que esa omega que ayudó a Jungkook a escapar, antes de morir le dijo "solo actúa igual que su padre al final, lo odio tanto, pero es igual a él". Y tristemente después de decir esa frase, uno de los guardias reales le cortó el cuello causando su muerte instantáneamente.

Taehyung al principio no le tomó mucha importancia, pero pasando los días comenzó a darse cuenta de que esa omega tenía mucha razón. Se estaba comportando como su padre, ¿qué pasó con todas las promesas que se hizo así mismo? Realmente el poder te puede cambiar...

Volviendo donde Jungkook, este se había quedado dormido nuevamente cuando regresó a su habitación. Aún su cuerpo necesitaba bastante reposo con todos esos días perdido. Después de varios minutos se siesta, este despierta algo desorientado y se levanta con cuidado de su cama para no marearse. Se ve al espejo suspirando al notar las pequeñas ojeras que se estaban formando debajo de sus preciosos ojos.

Decide salir al estar aburrido, en su palacio solo estaban las mismas personas de siempre así que no se debía preocupar, ¿no?

Al estar nuevamente en el jardín, respira hondo sintiéndose mucho mejor. Lo que más necesitaba ahora era respirar aire puro y no estar encerrado en esa habitación.

— Príncipe.—

Escucha de pronto una voz detrás suyo asustándolo sin querer, se voltea algo rápido mareándose haciendo que pierda el equilibrio. — ¡Alteza!— agarra al príncipe por la cintura para que este no caiga. Al abrir los ojos sonríe al encontrarse con el rostro de su viejo amigo. — ¡Nicolas! Cuánto tiempo sin verte, ¿cómo has estado?— pregunta con una sonrisa en su rostro. Cuando este lo suelta lo mira esperando una respuesta, pero se preocupa al ver su expresión triste. — ¿Nicolas...? ¿Sucede algo? ¿Por qué esa mirada triste?— le llena de preguntas al estar preocupado y el silencio de Nicolas no ayudaba mucho que digamos.

Algo había pasado con él, y no cualquier cosa. Si este no quería ni si quiera hablar de eso, es porque realmente ha sido algo fuerte. Suspira mirando a otro lado antes de acercarse a él y abrazarlo mientras acariciaba su espalda. — Nicolas, si no quieres hablar de ellos te comprendo completamente. Solo te pido algo.— al tener su absoluta atención comienza a hablar nuevamente. — No guardes tus sentimientos, eso realmente es muy dañino para ti. Si quieres llorar ahora, solamente hazlo. Nadie nos está viendo y aquí tienes mi hombro para llorar. Así como cuando éramos niños, ¿te acuerdas? Yo era el bebé llorón que te buscaba para llorar en tu hombro porque no podía hacerlo con un familiar.— ríe leve al escucharlo reír de igual manera, a todo este tiempo aún seguían abrazados.

— Vamos, no es tan difícil. Y no le diré a nadie que lloraste.— vuelve a acariciar su espalda al sentir su hombro mojarse, sube una de sus manos a su cabello acariciando también este. — ¿Ves? No es tan difícil, bebé llorón.—